Francia oculta al Dalai Lama por miedo a Pek¨ªn
Ninguna autoridad ha recibido al l¨ªder espiritual durante su semana en Par¨ªs
El miedo a la primera potencia econ¨®mica del planeta es inversamente proporcional a la riqueza de cada pa¨ªs. L¨®gico. Hay un elemento objetivo para medirlo: dime c¨®mo tratas al Dalai Lama y te dir¨¦ si tiemblas mucho o poco ante Pek¨ªn. Francia acaba de demostrar que su nivel es muy bajo: ninguna autoridad pol¨ªtica ha recibido al premio Nobel de la Paz 1989 durante toda su semana de estancia en Par¨ªs.
El feo gesto ha sido m¨¢s elocuente porque, solo dos meses antes, el l¨ªder espiritual del budismo tibetano fue recibido en Washington por Barack Obama. Tambi¨¦n con cierto miedo, pero mucho menos. Tenzin Gyatso, nombre del dal¨¢i lama, tuvo que entrar por la puerta de atr¨¢s en la Casa Blanca y solo lleg¨® a la Sala de Mapas, no al Despacho Oval, reservado a las altas visitas oficiales. Y sin periodistas. Pero al menos le recibi¨®, difundi¨® fotos del encuentro y asumi¨® la advertencia p¨²blica china de las consecuencias que tendr¨ªa para las relaciones bilaterales.
Ni el presidente Fran?ois Hollande ni el primer ministro Manuel Valls han osado irritar al r¨¦gimen chino, que ocup¨® en 1950 el T¨ªbet desalojando del poder a la dinast¨ªa teocr¨¢tica encabezada por los sucesivos Dal¨¢i Lama. A Gyatso solo han querido verle una veintena de parlamentarios, tres de los cuales han fracasado en sus gestiones para que Hollande y Valls lo recibieran. La raz¨®n de mayor peso para todo esto se produjo hace dos a?os. El presidente chino, Xi Jinping, firm¨® en Par¨ªs acuerdos con Francia por valor de 18.000 millones de euros.
Suenan a prehistoria aquellas conferencias de prensa en las que, en cada entrevista con un dirigente chino, se ped¨ªa a los l¨ªderes occidentales una exigencia p¨²blica de respeto a los derechos humanos en China. Como cuando el Dal¨¢i Lama era recibido por George Bush en 2007 o Nicolas Sarkozy en 2008. Alguien argumentar¨¢ que Tenzin Gyatso renunci¨® en 2011 a sus cargos pol¨ªticos y ya solo viaja como l¨ªder. De acuerdo. Pero entonces, ?por qu¨¦ no le recibi¨® ni el Papa cuando pas¨® por Roma en 2014?
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