Blindar las pensiones

El Pacto de Toledo inicia al fin su andadura, justo ahora que se plantea como indispensable, debido a la ineficacia demostrada por el Gobierno del Partido Popular en la gesti¨®n equilibrada y eficiente de la financiaci¨®n de la Seguridad Social. Se requieren medidas urgentes resultado del consenso, como es urgente tambi¨¦n recuperar la confianza en el sistema, algo que obliga al nuevo Gobierno a girar 180 grados en el discurso opaco en que ha desarrollado la ¨²ltima legislatura en materia de pensiones.

Y es que es realmente f¨¢cil desconfiar. Mirando en perspectiva, resulta incre¨ªble que un sistema como nuestro sistema de Seguridad Social, ahora y exclusivamente debido a los cuatro ¨²ltimos a?os donde los d¨¦ficits se han disparado de manera astron¨®mica, pueda hablarse del final o el recorte del sistema de pensiones por su insostenibilidad. A partir de 2012, la reforma laboral ha generado un d¨¦ficit que el Gobierno no ha sabido solucionar y que ha propiciado el florecimiento de las expectativas de quienes persiguen el negocio de 85.000 millones de euros anuales de las pensiones, algo inveros¨ªmil en nuestro pa¨ªs, pues los salarios ¨ªnfimos hacen imposible costear los 7.700 euros anuales de ahorro medio que requiere un plan privado de pensiones.

Ser¨ªa una injusticia intolerable que, por los d¨¦ficits generados por las pol¨ªticas desde 2012, se recortaran las pensiones de quienes cotizan en una Seguridad Social excedentaria desde los a?os sesenta, lo que adem¨¢s es contrario a nuestra Constituci¨®n. Los Gobiernos deben cuidar y gestionar adecuadamente el sistema de pensiones y eso no incluye ni los recortes ni el desmembramiento del sistema. Es urgente pues derogar instrumentos de recorte de las pensiones, como lo son el ¨ªndice de revalorizaci¨®n y el factor de sostenibilidad impuestos unilateralmente por el Gobierno del Partido Popular.

UGT va a apostar por el refuerzo de nuestro sistema de pensiones y ello pasa porque de una vez por todas se blinde la financiaci¨®n del mismo de forma que los futuros Gobiernos no puedan con sus pol¨ªticas llevarlo al borde del precipicio. De haberse adoptado medidas de blindaje de la financiaci¨®n de la Seguridad Social con anterioridad, el Gobierno del Partido Popular no podr¨ªa haber costeado las bonificaciones a las empresas por contrataci¨®n de desempleados con cargo a la caja de la Seguridad Social, ni se costear¨ªan los gastos de mantenimiento de la propia Seguridad Social con cargo a la misma caja.

El problema actual del d¨¦ficit de la Seguridad Social es que el Gobierno ha destinado los ingresos procedentes de las cotizaciones a costear cosas muy distintas a las pensiones. Y esto se ha hecho en una ¨¦poca de fuerte descenso de las cotizaciones por la reforma laboral, lo que es exactamente lo contrario de lo que se deber¨ªa haber hecho. Si el Gobierno hubiera seguido el ejemplo del entorno europeo, deber¨ªa haber compensado la ca¨ªda de ingresos a trav¨¦s de medidas complementarias. Es lo que se ha hecho en pa¨ªses cercanos: tasas de gravamen directas al consumo, hasta superar el d¨¦ficit de las cuentas. Aqu¨ª, se podr¨ªa haber destopado las bases de cotizaci¨®n que cada a?o dejan 26.100 millones de euros sin cotizar. Y haber previsto, y con ello dotado presupuestariamente, las disposiciones del fondo de reserva evitando as¨ª acabar con los super¨¢vits acumulados en el fondo desde hace una d¨¦cada.

Ahora es el momento de romper el tab¨² existente en Espa?a en materia de impuestos. Tab¨² s¨ª, pues de otra manera no puede explicarse que Espa?a sea el ¨²nico pa¨ªs del entorno europeo donde los ingresos por cotizaciones del sistema contributivo de pensiones no se incrementan con aportaciones procedentes de los impuestos. En Espa?a el gasto en pensiones supone un 10% del PIB, mientras que en los pa¨ªses del entorno puede llegar al 14%. Esto supone 40.000 millones de euros, cantidades que en Francia se completan con impuestos. Solo el impuesto denominado Contribution Sociale G¨¦neralis¨¦e (CSG) paga el 35% de las pensiones francesas.

Para UGT este es el verdadero debate que ha de afrontarse en el Pacto de Toledo: habr¨ªa que definir una exacci¨®n fiscal basada en una cesta de impuestos que anualmente aportara la diferencia entre ingresos y gastos de la Seguridad Social, calculada de forma que la diferencia sea siempre positiva y sirva para dotar el Fondo de Reserva. En UGT pensamos que con las pol¨ªticas adecuadas, nuestro sistema es el mejor de los posibles. Y con ¨¦l vamos a lograr el mejor de los futuros posibles para nuestra sociedad. Es el momento.

Pepe ?lvarez es secretario general de UGT.