De la creatividad a la copia

La coolhunter y gur¨² de las tendencias Li Edelkoort volvi¨® a poner el dedo en la llaga. Lo hizo en Voices, el encuentro que organiz¨® el portal especializado The Business of Fashion a principios de mes. Reservado a los pesos pesados de la industria, solo se asiste previa invitaci¨®n. Edelkoort ofreci¨® all¨ª una charla en la que de nuevo repas¨® algunos de los puntos que dan cuerpo a su pol¨¦mico manifiesto Anti-Fashion, con el que sentencia que la moda como sistema, tal y como lo conocemos, est¨¢ acabada.

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Uno de los principales motivos de este estado cr¨ªtico tiene que ver, seg¨²n su tesis, con la falta de ideas. Y es que, si en el pasado, explic¨®, dise?adores como Crist¨®bal Balenciaga o Yves Saint Laurent fueron capaces de idear prendas revolucionarias que ¡°cambiaron la forma en la que caminamos, nos mostramos y flirteamos¡±, actualmente el reciclaje se ha impuesto. La exploradora de tendencias sostiene que la novedad ha dejado de ser un activo, y los departamentos de dise?o buscan ideas en prendas vintage que reinterpretan y descontextualizan una y otra vez en una f¨®rmula que parece no agotarse pero que devuelve propuestas cada vez m¨¢s descafeinadas. El pron¨®stico de la experta a esta situaci¨®n no suena alentador: ¡°Con esta falta de innovaci¨®n conceptual, el mundo est¨¢ perdiendo la noci¨®n de lo que es la moda¡±.

La cuenta de Instagram @diet_prada, creada hace un par de a?os por dos dise?adores an¨®nimos en activo, ilustra con sarcasmo este proceso de reciclaje del que hablaba Edelkoort hace unos d¨ªas. Lejos de caer en lo f¨¢cil, Diet Prada no busca los clones en las compa?¨ªas de moda r¨¢pida, sino que le saca los colores a las marcas de lujo con r¨¦plicas y parecidos m¨¢s que razonables acompa?ados de textos llenos de iron¨ªa. Todo empez¨® cuando consultando los desfiles en la Red se percataron de que muchas de las presuntas nuevas propuestas estaban inspiradas en el trabajo de otros dise?adores. La presi¨®n por las ventas en un mercado cada vez m¨¢s competitivo e inestable es, seg¨²n sus autores, el principal motivo de esta pr¨¢ctica de apropiaci¨®n de ideas ajenas.

Dos l¨ªneas rojas

¡°La gente tiene que vender, as¨ª que hay much¨ªsimas marcas que probablemente sientan que pueden contar m¨¢s con el ¨¦xito probado de otros que con su propia creatividad¡±, dicen. Varios son los dise?adores de la industria del lujo que en los ¨²ltimos a?os se han quejado de que tienen menos tiempo para desarrollar sus ideas. Y es que de dos colecciones al a?o las marcas de lujo han pasado a ofrecer hasta ocho en el nuevo ritmo que empresas como Inditex han impuesto (las tiendas de Zara reciben novedades dos veces por semana). La l¨ªnea que separa la inspiraci¨®n de la copia es compleja, pero para los responsables de Diet Prada hay l¨ªneas rojas: ¡°Hay una gran diferencia entre Miuccia Prada inspir¨¢ndose en una chaqueta de los cincuenta para copiar la silueta y estas nuevas marcas que est¨¢n haciendo pieza por pieza copias de conjuntos completos con la intenci¨®n de vender mucho¡±.

Ante la copia hay divisi¨®n de posturas: los que la condenan o los que se sienten honrados. Aunque, al final, las m¨¢s perjudicadas son las firmas m¨¢s peque?as y de dise?adores emergentes. Y es que si Internet les ha ofrecido la posibilidad de mostrar y vender de forma m¨¢s f¨¢cil y econ¨®mica sus productos, tambi¨¦n las ha expuesto de un modo m¨¢s directo al plagio y a las r¨¦plicas.