Pesadilla en las cocinas fiscales de Montoro

Cuando Cristobal Montoro abandone el ministerio de Hacienda habr¨¢ que llamar a Alberto Chicote para que limpie las cocinas fiscales del departamento. La etapa de Montoro est¨¢ siendo especialmente pr¨®diga en recetas tributarias indigestas, un fast food impositivo que deja numerosas secuelas a los contribuyentes en forma de advertencias europeas, normas t¨®xicas y el inconfundible aroma a fritanga de churrer¨ªa que desprenden parches recaudatorios apresurados ¡ªcomo las componendas en el Impuesto de Sociedades para tapar el d¨¦ficit¡ª, con flancos legales dif¨ªciles de cubrir. V¨¦ase el ¨²ltimo episodio: el tribunal de Justicia de la UE ha rechazado la legalidad de las ayudas fiscales concedidas a las grandes empresas, aprobadas en 2002, para incentivar la internacionalizaci¨®n de las empresas a trav¨¦s de deducciones en el Impuesto de Sociedades. La Comisi¨®n Europea ya ha dado los primeros pasos para reclamar las cuantiosas deducciones aplicadas por empresas como Telef¨®nica, Banco Santander o Abertis.

Es s¨®lo el ¨²ltimo caso de una larga serie de cambios tributarios de baja calidad t¨¦cnica, gestionados con una llamativa incompetencia. Dicen que la idea de deducirse parte del fondo de comercio en la compra de grupos extranjeros surgi¨® de la f¨¦rtil inventiva de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. El mismo d¨²o art¨ªstico perpetr¨® la Ley Beckham. Es dif¨ªcil seguir los vericuetos mentales por los que el presidente de Gobierno, dimitido de la presidencia de honor del PP (es el s¨ªndrome pueril del ¡°?Pues ahora no respiro!¡±), lleg¨® a la conclusi¨®n de que era necesario esconder cientos de millones de ingresos de futbolistas a la recaudaci¨®n del Estado. Pero ese fue el resultado. ?Qu¨¦ decir del grasiento plato cocinado por la Agencia Tributaria cuando compar¨® las donaciones ilegales al PP con las donaciones a Caritas? ?O las filtraciones a medios de comunicaci¨®n afines de los informes destinados al juez Ruz sobre dichas donaciones irregulares? ?O la escandalosa destituci¨®n de los inspectores que se negaron a suprimir la sanci¨®n tributaria de Cemex?

La obra maestra del men¨² es la amnist¨ªa fiscal. Hace falta valor para plantear una amnist¨ªa fiscal en un pa¨ªs europeo que presume de democracia impositiva; se requiere mucha sangre fr¨ªa para pasar, sin mancharlo ni tocarlo, por encima del hecho de que no se cumplieron los objetivos de recaudaci¨®n marcados (1.193 millones frente a los 2.500 millones previstos). Pero que, agobiado por la falta de peticiones, Hacienda llegara a ofrecer pluses de confidencialidad a los amnistiados o que se permitiera regularizar dinero en met¨¢lico, con el riesgo de blanqueo, demuestra que en los fogones fiscales se cocina cualquier materia prima, por incomestible que resulte y siempre con las t¨¦cnicas culinarias m¨¢s pringosas.

Conste que la pobreza t¨¦cnica y la incompetencia legislativa no son privativas de Hacienda. Ah¨ª est¨¢ la chapucera regulaci¨®n energ¨¦tica para demostrarlo. Pero en el departamento de Montoro tienen un sabor especial, a veces con bouquet de amenazas a pol¨ªticos y periodistas y en otras con retrogusto a desplantes e imposiciones. S¨ª, Hacienda es diferente.