Botellas de vino para amantes de la lectura y c¨®mo combinarlas

Hay libros que, como las novelas de Ian Fleming, creador de James Bond, o las obras de ebrios c¨¦lebres como Charles Bukowski y Malcolm Lowry, traen debajo del brazo la bebida ideal para acompa?ar su lectura.

Fleming: ¡°Un vodka Martini seco, con una c¨¢scara de lim¨®n. Agitado, no revuelto. Preferiblemente vodka ruso o polaco¡±

Bukowski: aficionado al whisky y la cerveza, un calderero ¡ªun c¨®ctel preparado con ambas bebidas¡ª

Lowry: mezcal. Ahora la tienda italiana Librottiglia ha ido m¨¢s all¨¢ y ofrece una l¨ªnea de vinos maridados de antemano con relatos in¨¦ditos que vienen fijados a la botella

Tres autores han escrito las historias para el maridaje con los vinos de la l¨ªnea, dos tintos y uno blanco, que se venden a 15 euros la botella y a 40 en un paquete de tres. Pese a que los relatos a¨²n est¨¢n disponibles solo en italiano, y los env¨ªos circunscritos a Italia, los responsables de la tienda afirman en un intercambio de correos que pronto empezar¨¢n a exportar sus productos, con los cuentos escritos en ingl¨¦s.

La p¨¢gina web de la tienda explica as¨ª la combinaci¨®n con el vino blanco de su cat¨¢logo: ¡°L¡¯Omicidio [El homicidio]¡­ es un [relato de] misterio te?ido de humor que se mezcla con el esp¨ªritu fresco y ligero del Roero Arneis¡±. Sobre La Rana nella Pancia (La rana en la panza) dice que se trata ¡°de una intrigante f¨¢bula que complementa la personalidad poco com¨²n de los tintos Anthos: un Brachetto seco con notas dulces¡±. Y de Ti amo. Dimenticami [Te amo. Olv¨ªdame] resume: ¡°La historia de un amor que cambia la vida, tan intenso como la [uva] rub¨ª roja del Nebbiolo Roero que acompa?a¡±.

La revista digital Bustle da otro ejemplo de c¨®mo se pueden crear estos maridajes enoliterarios. Si bien el sabor fuerte de la carne de caza mayor, por ejemplo, suele acompa?arse bien con tintos con cuerpo, de reserva, y su armon¨ªa se puede comprobar de un bocado, el caso de la literatura es m¨¢s ambiguo. Bustle recomienda la lectura de Lolita, de Vladimir Nabokov, con un Chardonnay: una pol¨¦mica novela sobre un profesor enamorado de una ni?a de 12 a?os y un vino blanco muy popular en Estados Unidos cuya uva se cultiva en el valle del r¨ªo Ruso en California.

M¨¢s all¨¢ del juego entre la nacionalidad del novelista, un ruso exiliado en Norteam¨¦rica que escribi¨® la ¨²ltima parte de su obra en ingl¨¦s, y el lugar de producci¨®n de la bebida, ¡°Nabokov es como el Chardonnay¡±, dice Bustle, ¡°un rico, sabroso convite para el que no hace falta un t¨ªtulo de especialista para disfrutarlo¡±. En la degustaci¨®n del Chardonnay ¡°la gente usa palabras como ¡®barrica¡¯ y ¡®terroir¡¯ para tratar de que suenen como algo para lo que se precisa haber estudiado¡±, afirma Bustle. Y agrega que lo mismo sucede con Nabokov: ¡°Algunos act¨²an como si se necesitara un grado en Literatura para disfrutarlo¡±.

Muy probablemente la clave de los maridajes perfectos entre vino y literatura est¨¦ ah¨ª, en que si ambos son buenos no har¨¢ falta diploma de Enolog¨ªa ni una tesis sobre los novelistas rusos del siglo XX para beberse una buena historia acompa?ada de una copa de libro.