¡°La ayuda humanitaria se ha convertido en un objetivo de guerra¡±
Juan Prieto, coordinador de MSF en Yemen, ha sobrevivido al bombardeo de uno de sus hospitales. Y se ha quedado en el pa¨ªs
¡°Cada vez hay m¨¢s guerras y cada vez son m¨¢s cruentas¡±. ?ste es el balance de 2016 del coordinador general de proyectos de M¨¦dicos sin Fronteras (MSF) en Yemen, Juan Prieto (Santander, 1967), que en agosto sobrevivi¨® al bombardeo de uno de sus hospitales. El ataque acab¨® con la vida de 19 personas y dej¨® 24 heridos. En total, MSF ha recibido en el ¨²ltimo a?o 50 bombardeos en 21 instalaciones m¨¦dicas diferentes, sobre todo en Siria y Yemen. Pese a todo, Prieto ha decidido quedarse y trabajar, como los 4.410 profesionales que MSF Espa?a tiene repartidos por todo el mundo y como invitan a todos en su ¨²ltima campa?a de incidencia p¨²blica #Yomequedo presentada este mi¨¦rcoles en Bilbao.
- P. ?Qu¨¦ ha sucedido en los conflictos para que los hospitales tambi¨¦n sean campo de batalla?
- R. La respuesta no es f¨¢cil pero es una realidad: cada vez m¨¢s estructuras de salud, as¨ª como escuelas y mercados, se han convertido en objetivos militares, en objetivos de guerra. Hemos recibido ataques en Siria, Afganist¨¢n y, en varias ocasiones, en Yemen donde los responsables gubernamentales dicen despu¨¦s que se deb¨ªan a errores o a que en el interior se encontraba un objetivo militar. Cada vez ocurre m¨¢s y supone violar el derecho internacional humanitario. Un hospital es un lugar neutral.
- P. Una situaci¨®n que requiere no s¨®lo trabajar desde el terreno, sino tambi¨¦n realizar una fuerte incidencia pol¨ªtica desde Europa.
- R. Como consecuencia de los conflictos se generan millones de desplazados y pedimos que se atiendan sus necesidades como personas, est¨¦n donde est¨¦n. No s¨®lo en Turqu¨ªa sino a donde vayan a reconstruir sus vidas. Si Europa no entiende esto tampoco entender¨¢ que exijamos ayuda en los pa¨ªses de origen de todos estos desplazados, lugares extremos donde los sistemas de salud se paralizan y dejan de funcionar. Por eso, sobre todo, nosotros trabajamos desde all¨ª.
- P. ?Ve necesario mantener el rechazo de MSF a los fondos de Europa para la ayuda humanitaria?
- R. Creo que es necesario mantenerlo porque est¨¢n externalizando el control de las fronteras. Llevo m¨¢s de 15 a?os trabajando en MSF y voy a seguir trabajando porque cuenta con un principio muy importante: la independencia. Nos financiamos de forma directa por colaboradores privados que tambi¨¦n creen en esa independencia. Si la ayuda humanitaria en Europa se va a utilizar con un fin pol¨ªtico, no estamos de acuerdo, no queremos ser c¨®mplices de ning¨²n sufrimiento. Rechazamos recibir dinero de Europa y de cualquiera de sus pa¨ªses. Y por eso me quedo en MSF y en terreno, porque hay mucha gente esper¨¢ndonos aunque para atenderlos nos juguemos la vida.
Si la ayuda humanitaria en Europa se va a utilizar con un fin pol¨ªtico, no estamos de acuerdo, no queremos ser c¨®mplices de ning¨²n sufrimiento
- P. ?As¨ª le ha ocurrido en Yemen este a?o?
- R. En agosto estaba all¨ª, en el pa¨ªs, cuando una bomba destruy¨® uno de nuestros hospitales pero en la oficina. Esta semana hace justo un a?o del ¨²ltimo bombardeo que sufrimos en otro hospital tambi¨¦n de Yemen. Es muy extrema la realidad de este pa¨ªs. Todos tenemos muy claro que es all¨ª donde tenemos que estar. No debemos olvidar a las personas que necesitan atenci¨®n m¨¦dica tanto a nivel quir¨²rgico, como atenci¨®n en partos o por otras patolog¨ªas m¨¦dicas, y que cuando la situaci¨®n se agrava quedan abandonadas.
- R. Y eso busca la nueva campa?a de MSF bajo el lema #Yomequedo: recordar que hay muchas necesidades sanitarias que atender en un contexto de guerra ?Cu¨¢les son sus razones para quedarse?
Mi raz¨®n principal para quedarme es saber que si no est¨¢ MSF, no habr¨¢ nadie que cuide de los civiles. En muchos conflictos, en muchas situaciones extremas, como Siria, Yemen o Sud¨¢n del Sur no hay nadie m¨¢s. Qui¨¦n va a ser el testigo de lo que est¨¢ sucediendo all¨ª, qui¨¦n va a tender la voz de los civiles que nada tienen que ver con el conflicto. En Yemen, se est¨¢ aprovechando el pa¨ªs para declararse la guerra dos pa¨ªses como Arabia Saud¨ª e Ir¨¢n. Los civiles nada tienen que ver con esa guerra pero son los que sufren todas sus consecuencias. Si no estamos nosotros para denunciarlo, se convierten autom¨¢ticamente en personas invisibles, olvidadas, abandonadas.
- P. Como invisibles son muchas de las necesidades m¨¦dicas de la poblaci¨®n ?Es la salud mental una enfermedad olvidada?
- R. Los problemas que genera un conflicto y una guerra en la psique de las personas son enormes y no siempre f¨¢ciles de detectar; pero s¨ª claves para la regeneraci¨®n de sus vidas. Uno de los componentes de los programas m¨¦dicos de MSF es llegar a los ni?os: ven cosas horribles y su vida queda completamente rota. Hasta que no llega la ayuda psicol¨®gica, no llegan los buenos resultados.
- P. Tras quince a?os con MSF en pa¨ªses como Siria, Sud¨¢n del Sur y Liberia, ?tambi¨¦n tendr¨¢ razones positivas para seguir trabajando?
- R. La experiencia de Sierra Leona y de Liberia en 2004 son una buena raz¨®n para quedarme y para el optimismo. Estos dos pa¨ªses avanzan poco a poco hacia una paz duradera y nuestra presencia se ha reducido al m¨¢ximo. Sin embargo, en Sud¨¢n del Sur lejos de desmontar nuestros programas hemos tenido que rehabilitar hasta los m¨¢s b¨¢sicos por la llegada de la violencia. En general no soy optimista con la evoluci¨®n del mundo: cada vez hay m¨¢s guerras y son m¨¢s cruentas, tambi¨¦n con el personal humanitario. En lo profesional, es una satisfacci¨®n contar con un equipo de gente cada vez m¨¢s motivado.
Mi raz¨®n? para quedarme es saber que si no est¨¢ MSF, no habr¨¢ nadie que cuide de los civiles
- P. ?En ese contexto surgen nuevos modos de trabajo como la teleasistencia?
- R. Buscamos modelos alternativos a la intervenci¨®n cl¨¢sica que ten¨ªa MSF en su origen. Lo hemos comprobado en Siria donde se ha vuelto imposible tener presencia f¨ªsica permanente en la zona norte y donde seguimos atendiendo a los civiles a trav¨¦s de las nuevas tecnolog¨ªas. Adem¨¢s en Barcelona contamos con el apoyo y la disponibilidad continua de personas que en cualquier momento pueden ayudarnos para informar a un paciente o resolver una consulta tambi¨¦n a trav¨¦s de la tecnolog¨ªa.
?Suponen estos avances tambi¨¦n buenas razones para quedarse?
- R. Hemos ganado mucho en el tratamiento de los pacientes y queremos avanzar mucho m¨¢s. Hemos aprendido mucho en cirug¨ªa de guerra y hemos ganado mucho en rapidez para instalarnos all¨ª donde nos necesitan con urgencia. Y s¨ª, todos estos avances facilitan el trabajo y que todos queramos seguir en terreno. Pero la raz¨®n principal para seguir en terreno y para seguir con el trabajo humanitario es el dolor de la gente, el riesgo de abandono total de todos los civiles. De todos modos, no hace falta irse muy lejos para ver este horror: de Grecia llegan estos d¨ªas im¨¢genes terribles de la situaci¨®n de los desplazados. Y por eso, yo me quedo.
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