As¨ª ser¨¢ el primer d¨ªa de trabajo de Donald Trump

Mucha gente no lo sabe, pero la capital de Madagascar es Mogadiscio. No, espera, no es Mogadiscio. ?Dodoma? No. ?Par¨ªs? Tampoco. Bueno, ya me acordar¨¦. Otra cosa que tampoco sabe mucha gente es que yo fui uno de los asesores de campa?a de Donald Trump. Yo le aconsej¨¦ que se peinara raro, para desviar la atenci¨®n de su cara. Y del resto del cuerpo. Y de la gente que ten¨ªa alrededor. Tambi¨¦n le dije: "?brete una cuenta de Twitter, que es muy divertido. La gente es muy graciosa".

Hace apenas unos d¨ªas estuve con ¨¦l en Nueva York, donde me explic¨® sus planes para la presidencia mientras com¨ªamos gatitos calientes. No quedaban perros.

¡ªPensaba que ganar las elecciones era como ganar el concurso de Miss Universo.

¡ª?C¨®mo, se?or Presidente?

¡ªS¨ª, que ganas y ya est¨¢. Pero resulta que no, que luego te toca trabajar. Cuatro a?os, adem¨¢s. As¨ª no tiene gracia. Que trabaje el que pierda, que para eso ha perdido.

¡ªVisto as¨ª...

¡ªQuer¨ªa irme de crucero por el Mediterr¨¢neo. Me han dicho que en los cruceros puedes conocer a muchas mujeres. Ten¨ªa curiosidad: no he visto a ninguna en mi vida.

¡ªPero si usted est¨¢ casado.

¡ª?Yo?

¡ªS¨ª.

¡ª?Con una mujer?

¡ªS¨ª.

¡ª?Seguro? Yo creo que no. Me acordar¨ªa, vaya. ?T¨² conoces a mujeres?

¡ªA alguna.

¡ª?Y c¨®mo son?

¡ªPues as¨ª de altas, m¨¢s o menos.

¡ªD¨¦jalo, no me chafes la sorpresa. Volviendo al trabajo, lo primero que har¨¦ cuando llegue a Washington ser¨¢ hacer Am¨¦rica m¨¢s grande. Mira esto.

¡ªEs un mapamundi.

¡ªF¨ªjate en EEUU. No llega ni a los diez cent¨ªmetros de ancho. Es un pa¨ªs peque?¨ªsimo. ?No cabe nadie! Ni nosotros: estamos en un bar, fuera del pa¨ªs, que est¨¢ aqu¨ª, en este papelito de nada.

¡ªEso es un mapa.

¡ªDeber¨ªa ser m¨¢s grande, para que cupi¨¦ramos todos. Podr¨ªamos empezar con una Am¨¦rica de tres o cuatro metros de largo. Eso s¨ª, no hay forma de que quepan los inmigrantes.

¡ªPero que solo es un mapa.

¡ªNo, es f¨ªsica. Por cierto, s¨¦ que lo que voy a decir es pol¨ªticamente incorrecto, pero entre los inmigrantes hay muchos negros. Y entre los negros tambi¨¦n hay cantidad de negros. Mucho hablar de igualdad, pero luego ellos no ponen nada de su parte. Si quieres igualdad, s¨¦ igual, s¨¦ blanco. No es tan dif¨ªcil. Yo soy blanco todos los d¨ªas.

¡ªEso es verdad.

¡ªHablando de colores, otra cosa que har¨¦ el primer d¨ªa es pintar la Casa Blanca de dorado. As¨ª impondr¨¢ m¨¢s respeto. Pero la seguiremos llamando Casa Blanca, para desorientar a los terroristas. Ir¨¢n los t¨ªos con sus bombas, buscando la Casa Blanca y uno dir¨¢: "Es ah¨ª". Y otro le contestar¨¢: "No seas est¨²pido, esa casa es dorada. Eso ser¨¢ la Casa Dorada". Y el otro: "Pero¡­". Y el segundo otra vez: "Ni pero, ni pera. Que pareces tonto. A ver si nos centramos. Busca una casa blanca. No es tan dif¨ªcil. Saca Google Maps". Y el primero: "Es que no me quedan datos". ?Es buena idea o no?

¡ªSupongo.

¡ª?T¨² crees que me dir¨¢n algo si invado un pa¨ªs peque?ito? Andorra, por ejemplo. Nadie se dar¨¢ cuenta, ?verdad? Quiz¨¢s dentro de unos a?os, cuando llegue otro presidente. En plan: "Un momento, ?qu¨¦ hace Andorra aqu¨ª? ?Qui¨¦n compr¨® esto? ?Has sido t¨², Margaret? ?Has comprado un pa¨ªs peque?o lleno de quesos de bola? ?Margaret, te he dicho mil veces que no compres pa¨ªses peque?itos sin consultarme!". No s¨¦ qui¨¦n es Margaret. Es una persona que me he inventado. Decidido, voy a invadir Andorra. Eso lo puedo hacer despu¨¦s de comer. Y mientras, quemar¨¦ la bandera de Estados Unidos.

¡ª?C¨®mo?

¡ªYo s¨ª puedo. Soy el presidente. La bandera es m¨ªa.

¡ªCreo que no va as¨ª.

¡ªT¨² qu¨¦ sabr¨¢s. ?Eres el presidente de EEUU? No, ?verdad? Pues a callar. Dir¨¦ que ha sido un accidente y que tenemos que hacer una nueva. En lugar de estrellas quiero poner 50 planetas Saturno. Saturno mola un mont¨®n. Tiene anillos. Es como de ciencia ficci¨®n, ?sabes? Saturno parece algo que te encontrar¨ªas en el espacio. Ah, mira, esa es otra cosa que puedo hacer antes de terminar el d¨ªa.

¡ª?El espacio?

¡ªS¨ª. Voy a enviar a un hombre a la Luna. Estoy casi seguro de que en la Luna hay marcianos.

¡ªYa se hizo. En 1969.

¡ª?En 1969? No digas tonter¨ªas. Recuerdo perfectamente c¨®mo era 1969. Gran parte del pa¨ªs a¨²n estaba en blanco y negro. Habl¨¢bamos en lat¨ªn. Los relojes eran de arena, incluso los de pulsera. A la Luna, dice¡­ Menudo ignorante. Mira, creo que no fue buena idea nombrarte asesor.

¡ª?Qu¨¦ hace, se?or presidente?

¡ªEstoy construyendo un muro con patatas fritas. No quiero volver a verte.

¡ªPero se?or presidente¡­

¡ªEres feo.