Estabilidad bancaria

La magnitud de la crisis financiera sufrida entre 2008 y 2012 fue de tal intensidad que oblig¨® a las reguladores financieros a tomar medidas excepcionales para prevenir el desmoronamiento de los sistemas financieros nacionales. Por esa raz¨®n resulta tan importante aclarar el papel del Banco de Espa?a durante ese periodo. Pero no es solo el Banco el que ganar¨ªa autoridad moral e influencia sobre el mercado financiero con una explicaci¨®n detallada de los aciertos y errores cometidos durante la crisis; otras instituciones, bien sean pol¨ªticas como el Congreso o estrictamente financieras como la CNMV, deber¨ªan revisar sus actuaciones durante la convulsi¨®n econ¨®mica mundial m¨¢s grave desde el crash de 1929.

El estallido de la crisis, fechado oficialmente en la desaparici¨®n de Lehman Brothers, provoc¨® un estrangulamiento grave en el mercado interbancario. A partir de ese momento, la situaci¨®n de la operativa de los bancos espa?oles qued¨® profundamente alterada. Una situaci¨®n de emergencia exige normas de supervisi¨®n y control excepcionales. El an¨¢lisis de las decisiones de supervisi¨®n tomadas durante la crisis deber¨ªan tener en cuenta el car¨¢cter de situaci¨®n de supervivencia y el choque que supuso para los reguladores ¡ªtambi¨¦n para el BCE, para la Reserva Federal, para el Banco de Inglaterra y para el Banco de Jap¨®n¡ª una crisis sin precedentes.

Al Banco de Espa?a le corresponde ahora recomponer esquemas claros y efectivos de inspecci¨®n y control de las entidades financieras. Los bancos espa?oles, a pesar de los costes de saneamiento del Banco Popular, que probablemente ser¨¢n suficientes para presentar unos balances s¨®lidos en 2017, est¨¢n hoy en mejor situaci¨®n que los bancos alemanes (en su conjunto) o los italianos, por poner dos ejemplos significativos en Europa. Lo cual da pie a una interpretaci¨®n ambivalente: si bien la reforma financiera en Espa?a debi¨® haber sido m¨¢s r¨¢pida y m¨¢s profunda desde el primer momento, hoy el mercado financiero espa?ol est¨¢ correctamente estabilizado. y eso es m¨¦rito tambi¨¦n del regulador.

El papel de las instituciones econ¨®micas y financieras durante la crisis sigue a la espera de un balance global, acaso porque este pa¨ªs carece de entidades independientes que estudien con rigor la actuaci¨®n de las instituciones al margen de presiones partidistas. La tribuna del gobernador del Banco de Espa?a, Luis M. Linde ¡ªpublicada ayer en este peri¨®dico¡ª, muestra la envergadura de las tensiones que la crisis traslad¨® a la econom¨ªa real y el complejo y dram¨¢tico panorama al que tuvo que enfrentarse el regulador para evitar la quiebra de numerosos entidades financieras que ya ven¨ªan lastradas por la burbuja crediticia e inmobiliaria.

Su intervenci¨®n clarifica su voluntad de proteger el inter¨¦s general. De lo que no se trata es de una b¨²squeda hist¨¦rica de culpables institucionales, ni de una relaci¨®n de hechos y decisiones (que ya fueron relatados en el Congreso), sino de saber con exactitud qu¨¦ errores se cometieron, qu¨¦ aciertos pueden aprovecharse y c¨®mo pueden definirse pol¨ªticas de supervisi¨®n m¨¢s eficaces para pr¨®ximas convulsiones econ¨®micas y bancarias.