Toque de atenci¨®n a T¨²nez por su lucha antiterrorista
Organizaciones internacionales denuncian los abusos en el trato con los sospechosos
En un plazo de un par de semanas, tres organizaciones internacionales (la ONU, Amnist¨ªa Internacional y Abogados Sin Fronteras) han publicado sendos informes cr¨ªticos con la pol¨ªtica antiterrorista de las autoridades tunecinas. En sus textos, lamentan que en T¨²nez, el ¨²nico pa¨ªs ¨¢rabe que ha sido capaz de culminar su tr¨¢nsito a un sistema democr¨¢tico, los cuerpos de seguridad y los tribunales hayan violado los derechos humanos de los sospechosos de pertenecer a grupos terroristas, lo que representa una marcha atr¨¢s hacia los tiempos del dictador Ben Al¨ª. El Gobierno tunecino, por su parte, ha respondido a las cr¨ªticas asegurando que se trata de ¡°casos aislados¡±.
Ben Emmerson, un alto cargo de la ONU especializado en pol¨ªtica antiterrorista, abord¨® en su visita al pa¨ªs magreb¨ª el tratamiento a los nacionales retornados de zonas de conflicto. ¡°Me han informado que unos 1.500 individuos se hallan involucrados en procesos por actos terroristas. Menos de un 10% han sido sentenciados, y el resto se ven privados de libertad durante largos periodos sin haberlos encontrado culpables de ninguna ofensa¡±, afirm¨® en un comunicado en el que tambi¨¦n se declaraba ¡°particularmente preocupado¡± por la situaci¨®n en la c¨¢rcel de Mornaguia, a la que tuvo acceso.
En su informe, Amnist¨ªa Internacional relata un mayor n¨²mero de violaciones de los derechos humanos, facilitados por el hecho de que el pase se halle en estado de emergencia desde hace casi un a?o y medio. Entre las decenas de abusos recogidos, figura las redadas indiscriminadas en determinados barrios, normalmente sin autorizaci¨®n judicial; los arrestos arbitrarios en base a la apariencia y sin orden; los malos tratos a familiares de los sospechosos para que proporcionen informaci¨®n sobre ellos; y la tortura en los centros de detenci¨®n y c¨¢rceles.
Despu¨¦s de haber padecido tres sanguinarios atentados terroristas en 2015, una parte de la sociedad tunecina parece dispuesta a condonar los excesos de la polic¨ªa en aras de la seguridad.
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