Derecho a migrar

Son los desequilibrios y las diferencias socioecon¨®micas y pol¨ªticas entre pa¨ªses ¡ªclaramente percibidas cotidiana y personalmente por quienes desean partir, incluso arriesgando la propia vida, en busca de un trabajo digno¡ª los que dan lugar a movimientos migratorios que dif¨ªcilmente pueden ser calificados de voluntarios. Migraciones forzadas y efecto huida de los pa¨ªses de origen, para ser contrarrestados, requieren medidas que equilibren la distribuci¨®n de la riqueza y garanticen la participaci¨®n equitativa en los beneficios de la globalizaci¨®n. Pero nadie asume el compromiso internacional imprescindible para reducir los niveles de pobreza en el mundo y que deje de considerarse este un objetivo como algo ut¨®pico, que en realidad creemos de todo punto irrealizable. La lucha contra la pobreza, la democratizaci¨®n de las sociedades, la creaci¨®n de trabajo decente all¨ª donde viven las personas no son producto de mentes ingenuas, sino objetivos necesarios hacia los que hay que tender para que la migraci¨®n voluntaria, como opci¨®n personal, se convierta en un nuevo derecho humano cumplidos los tres primeros lustros del siglo XXI.¡ª Luis Fernando Crespo Zorita. Alcal¨¢ de Henares (Madrid).