El reflejo de la guerra asoma en las telenovelas sirias
El conflicto se adue?a de las series y Turqu¨ªa ampl¨ªa su nicho en el mercado audiovisual ¨¢rabe
Atr¨¢s qued¨® el popular refr¨¢n que reza: ¡°Egipto escribe, el L¨ªbano distribuye e Irak lee¡±. Los conflictos y guerras han gangrenado la cultura de estos pa¨ªses, diezmando una boyante producci¨®n regional y amenazando con lacerar hasta la industria de las telenovelas. A El Cairo y Damasco, antiguas mecas de la producci¨®n audiovisual, les han salido competidores para distribuir demandadas sobredosis de tragedia, amores imposibles y ajustes de cuentas. Y se trata de un potencial de 300 millones de telespectadores ¨¢rabes.
Docenas de conocidos actores se han fugado de la peque?a pantalla siria, camuflados entre el r¨ªo de refugiados. Igual que los menguantes presupuestos de un mercado exhausto tras seis a?os de guerra y sanciones internacionales. Las telenovelas son el reflejo de los sue?os y temores de sus gentes, por lo que tambi¨¦n han cambiado. ?xitos imbatibles como Bab el Hara, que relata la vida de un barrio de Damasco en tiempos del mandato franc¨¦s, caen para dejar paso a teleseries protagonizadas por las tragedias inherentes de una guerra en curso. Regresaremos dentro de poco o Haz las maletas reflejan las vicisitudes de refugiados sirios en su ruta a L¨ªbano o Europa. Para unos se trata de desafiar tab¨²es. Para otros, de imponer una lectura de la guerra.
Mientras las productoras sirias se resisten a cerrar, las turcas se cuelan. Ankara ampl¨ªa su nicho de mercado al que tambi¨¦n insufla, a golpe de cap¨ªtulos, un soft power exportado por un pa¨ªs ansioso por volver a ser imperio. La tragedia sigue vigente, pero encarnada por exitosas mujeres de negocios, pasionales relaciones prematrimoniales o galanes que beben. Sin ser un fiel reflejo de la sociedad turca, la forma de vida transmitida ha logrado alimentar las exigencias de mujeres ¨¢rabes, remodelar los tup¨¦s de j¨®venes libaneses e incluso irritar a m¨¢s de un religioso. Las productoras sirias se resarcen especializ¨¢ndose en el doblaje. Y con ello exponen a audiencias ¨¢rabes a lejanas realidades como las de Isabel, ?guila Roja o Seis hermanas que una productora siria acaba de adquirir para su doblaje.
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