La reconquista

Cada vez que bailan La bicicleta o Chantaje tienen que saber que se est¨¢n moviendo a ritmo de vallenato y salsa. Suena a reguet¨®n, autotune y pop. Es la argucia perfecta en el plan de la m¨²sica colombiana, en concreto de Shakira, para reconquistar el mundo.

El ¨¦xito de esta estrategia radica en su sencillez. Los sonidos del acorde¨®n, la flauta de millo, la caja o la guacharaca no necesitan argumento en el Caribe. Con el primer golpe, la cadera de un coste?o comienza a sumar revoluciones. Para atacar las nalgas del resto del mundo hay que ser m¨¢s pillo. La cantante colombiana, con una parroquia de m¨¢s de 32 millones de seguidores en Instagram, solo necesita unos cuantos aliados y un v¨ªdeo de pocos segundos para captar el inter¨¦s. Con la ayuda de Carlos Vives hemos aprendido, casi sin darnos cuenta, que la Arenosa es el apodo de Barranquilla y que el Tayrona es un parque natural en Santa Marta. Agarrada a Maluma ha conseguido que fuera de su pa¨ªs tambi¨¦n se baile en pareja. Ya hasta parece un mal sue?o la canci¨®n machista del joven de Medell¨ªn.

Desde hace un par de semanas, Shakira publica fotos con otro artista en sus redes. Se llama Prince Royce y sus temas en YouTube suman m¨¢s de 50 millones de reproducciones. La canci¨®n que perge?an lleva por t¨ªtulo D¨¦j¨¤ vu, para que se entienda en todas partes. Es bachata, como se puede comprobar por los bailes que ha ido mostrando en redes. Yo ya estoy practicando. Lo reconozco.