Stephen Ira, la doble lucha del hijo de Warren Beatty

Apenas hab¨ªa cumplido la mayor¨ªa de edad cuando Stephen Ira, el primog¨¦nito de Warren Beatty y Annette Bening, explic¨® en primera persona y de forma p¨²blica que era un hombre transg¨¦nero y gay en un v¨ªdeo subido a YouTube. Ante los ataques de los paparazis, el joven escritor (Los ?ngeles,1992) decidi¨® responder desde el activismo online con voluntad did¨¢ctica. Lleva a?os dando detalles de su vida, sin entrar en intimidades, en sus publicaciones digitales y a trav¨¦s de las redes sociales. Y ahora se ha sumado al rechazo por el autob¨²s de Hazte O¨ªr, que recorre estos d¨ªas las calles estadounidenses. Lejos de temer la exposici¨®n medi¨¢tica, lo que desea es que el foco se centre en el ¨¢ngulo adecuado, el de una correcta visibilidad de la comunidad transg¨¦nero.?

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Desde su infancia supo que abandonar una identidad equivocada y su nombre de nacimiento, Kathlyn, en el absoluto anonimato no era una posibilidad para el hijo de una de las parejas m¨¢s improbables y s¨®lidas de Hollywood. Se present¨® como Stephen ante su c¨ªrculo ¨ªntimo cuando cumpli¨® 14 a?os. Muy poco despu¨¦s, lo hizo ante el resto del planeta, en contra de su deseo,?en el tabloide The National Enquirer.?

Cuando a los 17 a?os se proclam¨® homosexual, de nuevo vio su segunda salida del armario expuesta en las p¨¢ginas de un peri¨®dico, The Daily Mail. Desde entonces ha intentado que su figura p¨²blica se relacione con el activismo. Primero, con su blog Supermattachine y luego, con su propia revista literaria, Vetch, intenta hacer visible su lucha y la de muchos otros. Nunca le ha temblado la voz ni los dedos ante el teclado a la hora de criticar p¨²blicamente a los poderosos. Hace m¨¢s de un lustro ya advert¨ªa del peligro de figuras como la del entonces empresario Donald Trump, hoy presidente de Estados Unidos, y rechazaba que la cadena de televisi¨®n ABC utilizara a la comunidad transg¨¦nero para el mero espect¨¢culo en sus programas.?

Tambi¨¦n fue uno de los primeros en hacer entender que aquellas personas que se sienten a gusto con el g¨¦nero sexual con el que nacieron tienen un nombre: cisg¨¦nero. Usar este t¨¦rmino, defiende desde sus escritos, sirve para reconocer la existencia de otras realidades igualmente v¨¢lidas, como es la de los hombres y mujeres transg¨¦nero.

¡°Escuchad lo que contamos sobre nuestra vida, sobre nuestro cuerpo. Llegad a conocernos, no solo a unos pocos de nosotros. Entended que no hay dos que seamos iguales. Es algo que ha existido toda la vida, simplemente la Historia nos ha eliminado hasta hace poco¡°, comenta Ira a EL PA?S a trav¨¦s de correo electr¨®nico poco despu¨¦s de lanzar su blog.

Una vida en titulares

Durante a?os aparecieron art¨ªculos que aseguraban que Ira no se hablaba con un "poco comprensivo¡° Warren Beatty. ?l responde que es con los medios de comunicaci¨®n con los que tiene continuos desencuentros. De ¨¦l se dec¨ªa que hab¨ªa huido del castrador hogar familiar en Los ?ngeles rumbo a Nueva York. Sin embargo, Ira explica que se traslad¨® para iniciar sus estudios universitarios de Artes Creativas en Sarah Lawrence, uno de los centros m¨¢s progresistas del pa¨ªs. Se public¨® que escond¨ªa sus apellidos tras el Ira de su abuelo por despecho a sus padres. ?l replica que es por respeto: "Estoy orgulloso de ser hijo de quien soy, dos personas que se dedican brillantemente al arte. No quiero que se haga de mis ideas pol¨ªticas un arma arrojadiza en su contra¡°, apuntaba en su blog ante todos sus lectores.?

Hasta hace hace pocos meses, su c¨¦lebre padre nunca le hab¨ªa mostrado apoyo en p¨²blico. En una entrevista, publicada en octubre de 2016 en la edici¨®n estadounidense de Vanity Fair, decidi¨® enfrentarse a esos rumores. ¡°Es un revolucionario, un genio y mi h¨¦roe, como el resto de mis hijos¡±, contest¨® el actor a los elogios que el periodista dedicaba a Ira. ?

Muchos, antes de esta rotunda declaraci¨®n de amor, hab¨ªan publicado todo tipo de informaciones que no hab¨ªan conseguido ning¨²n tipo de reacci¨®n por parte del veterano int¨¦rprete. ¡±Warren Beatty se niega a pagarle un pene a su hija¡° es una de las frases m¨¢s despiadadas que pueden leerse sobre Stephen Ira en las publicaciones digitales anglosajonas. Mientras tanto, el acoso de The National Enquirer se prolong¨® durante a?os. ¡°Fue el medio que me expuso a la fuerza¡°, explica.

Uno de los asuntos por los que Ira se siente m¨¢s agredido es el permanente inter¨¦s sobre los detalles de su proceso de reasignaci¨®n de g¨¦nero, que ¨¦l considera morboso e invasivo."Claro que necesitamos encontrar el modo de educar a la gente acerca de otras vivencias ajenas al est¨¢ndar, pero sin sacrificar nuestra privacidad. Para conseguir visibilidad no deber¨ªamos estar obligados a revelar nuestro historial m¨¦dico. Es innecesario tener que explicar d¨®nde y cu¨¢ndo se ha operado cada uno o la cantidad de hormonas que toma para que se le comprenda¡°, cuenta este adicto a las redes sociales, que a golpe de tuit debate sobre sexo o pol¨ªtica con sus seguidores con la misma naturalidad con la que presume de novio.