No morder la mano de quien te da de comer

Es mucho m¨¢s que una frase hecha. Los nuevos acontecimientos sucedidos en Venezuela han vuelto a poner en evidencia en Espa?a a los l¨ªderes de Podemos. Una vez m¨¢s, Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, ??igo Errej¨®n y el resto de los representantes de la formaci¨®n morada han respondido con evasivas a los atropellos del r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro contra la maltrecha democracia venezolana. Mientras medio mundo denunciaba la decisi¨®n del Tribunal Supremo de Caracas de arrogarse las funciones de la Asamblea Nacional, el portavoz internacional de Podemos, Pablo Bustinduy, se limitaba a hablar de ¡°crisis de legitimidades¡±.

No es la primera vez, ni ser¨¢ la ¨²ltima, que Podemos defiende las tropel¨ªas de la dictadura de facto venezolana. En Madrid, en Bruselas o en Estrasburgo, los l¨ªderes de la izquierda radical espa?ola se han negado sistem¨¢ticamente a condenar el encarcelamiento del l¨ªder opositor venezolano Leopoldo L¨®pez (condenado a 13 a?os de prisi¨®n por instigar manifestaciones en 2014), a quien no consideran un preso pol¨ªtico, sino un pol¨ªtico preso. Todo lo que venga de Caracas hay que explicarlo bajo la ¨®ptica de la revoluci¨®n bolivariana, insisten unos pol¨ªticos que mamaron esa ideolog¨ªa y abrevaron en el pesebre de Hugo Ch¨¢vez durante a?os.

Los l¨ªderes de Podemos tienen muy claro que nunca morder¨¢n la mano de quien les ha dado de comer durante toda su trayectoria pol¨ªtica. El chavismo les entreg¨® dinero y les ilumin¨® intelectualmente hasta hace muy poco. No hace falta acudir a las decenas de v¨ªdeos que circulan por las redes sociales en los que Iglesias, Monedero y Errej¨®n alaban a los l¨ªderes que llevaron a Venezuela a la ruina (produce verg¨¹enza observar los halagos al l¨ªder bolivariano, mientras portan un brazalete con la bandera del pa¨ªs). El chavismo est¨¢ presente en su ideolog¨ªa y en su propio programa electoral; sobre todo, tras la victoria de Iglesias en Vistalegre II.

El partido que lidera la izquierda radical en Espa?a (aliado con Izquierda Unida y diversos partidos regionales) nunca criticar¨¢ lo que haga el Gobierno venezolano (sea lo que sea), porque est¨¢ hipotecado con ellos econ¨®mica y doctrinalmente. No se trata solo de protegerse frente a posibles informaciones de financiaci¨®n del r¨¦gimen chavista a la fundaci¨®n de la que naci¨® Podemos. Es algo m¨¢s hondo: les cuesta renunciar a sus creencias m¨¢s profundas que se plasman en su propia estrategia.

Cuando Iglesias habla de asaltar los cielos, lo hace al m¨¢s puro estilo bolivariano. Y el camino m¨¢s corto pasa por deslegitimar las instituciones democr¨¢ticas del pa¨ªs. Eso es lo que buscan en Podemos. Por eso, no hay que quedarse en el debate sobre el decoro en el Parlamento. Hay que pensar que lo que buscan con la provocaci¨®n y las performances continuas es devaluar la casa de los representantes de los ciudadanos, en su campa?a contra lo que llaman la trama, que no es otra cosa que el establishment que quieren destruir para crear el suyo propio.