?Misioneros y ONG pueden trabajar unidos?
Organizaciones espa?olas y beninesas demuestran que es posible colaborar en el campo de la cooperaci¨®n impulsados por distintos motivos, sea la fe o el deseo de justicia social
La mayor¨ªa de los misioneros y las misioneras que trabajan en ?frica implementan gran cantidad de proyectos sociales o de desarrollo como parte de su labor evangelizadora. Estos abarcan todas las ¨¢reas del desarrollo humano: educaci¨®n, sanidad, promoci¨®n de la mujer, infancia, cuidado de los m¨¢s vulnerables y desprotegidos, derecho a la alimentaci¨®n, al agua, al saneamiento,¡
Este aspecto de su trabajo no se diferencia, pr¨¢cticamente en nada, del que hacen las ONG. Sin embargo, salvo contadas ocasiones, unos y otros, religiosos y profesionales de la cooperaci¨®n y el desarrollo, se miran con recelo y se acusan mutuamente de no ser eficaces u honestos en sus cometidos.
Normalmente, las ONG argumentan que el trabajo que llevan a cabo los misioneros est¨¢ viciado por la caridad y el paternalismo, y que, adem¨¢s, tiene como ¨²nico objetivo la conversi¨®n de los beneficiarios del programa, excluyendo y discriminando a los que no se adhieren a ellos, lo que no es verdad en la mayor¨ªa de los casos. Los religiosos, por su parte, suelen sostener que los agentes humanitarios pisan poco el terreno, que traen programas que casi nada tienen que ver con la realidad y el contexto donde quieren implementarse y que al primer signo de peligro, despu¨¦s de un corto tiempo o cuando el dinero se acaba, desaparecen de la zona y nunca m¨¢s se vuelve a saber de ellos ni de sus proyectos.
Los religiosos suelen sostener que las ONG? pisan poco el terreno y traen programas que casi nada tienen que ver con la realidad y el contexto
De cara a superar estas diferencias y plantear un trabajo com¨²n en aquellos puntos en los que tanto ONG como misioneros coinciden, encontramos argumentos de lo m¨¢s variados.
Para el misionero comboniano Juan Jos¨¦ Ten¨ªas, ¡°no se puede hacer evangelizaci¨®n sin hacer promoci¨®n humana, las dos cosas van mano a mano¡±.
La hermana Carmina Pardo, de la Congregaci¨®n Romana de Santo Domingo, tambi¨¦n tiene claro que en la Doctrina social de la Iglesia el tema del desarrollo es una realidad: ¡°Cada uno contribuye al bien de la humanidad, por lo que hacer un mundo m¨¢s justo da igual que sea en nombre de la caridad o del humanismo¡±.
Las ONG argumentan que el trabajo que llevan a cabo los misioneros est¨¢ viciado por la caridad y el paternalismo
El padre Alejandro Rodr¨ªguez Catalina, enfatiza: ¡°para nosotros que creemos en Jes¨²s, la Justicia es m¨¢s importante que la caridad. Por eso no todo vale, las mismas organizaciones que nos financian, incluyendo bancos y empresas, son tambi¨¦n asesinas, hay que saber elegir. Pero lo que est¨¢ claro es que nosotros no podemos dividir nuestra fe de la promoci¨®n humana¡±.
De forma similar se manifiesta Florent Koudoro, de la ONG Mensajeros de Paz - Ben¨ªn: ¡°Hay que tener muy claro que trabajamos por la Justicia y por eso mismo no todo vale, no podemos aceptar dinero sucio, por ejemplo¡±. Pero da un paso m¨¢s y defiende que ¡°hay que buscar la colaboraci¨®n entra las ONG y la Iglesia¡±.
Paulin Bosson, director de la ONG La Casa Grande-Allada, opina que si las dos instituciones trabajasen juntas ¡°se podr¨ªa llegar a muchas m¨¢s personas de las que se ayuda en la actualidad en Ben¨ªn¡±.
El Foro Ben¨ªn es una plataforma para facilitar la colaboraci¨®n
Por su parte, el padre Gad Aina, sacerdote de la di¨®cesis de Coton¨², cree que ¡°muchas veces las ONG y los donantes quieren imponer los proyectos sin pensar si eso es lo mejor para el pa¨ªs o la situaci¨®n que se vive¡±. A pesar de esto, afirma que las dos instituciones tienen que colaborar y para ello hay que buscar el punto intermedio. ¡°Nosotros, el clero local y los misioneros, si queremos ayudar a los m¨¢s pobres tambi¨¦n tenemos que adaptarnos a la forma de trabajo de las ONG¡±.
Estas afirmaciones se escucharon durante el Primer Encuentro Misioneros-ONG que tuvo lugar en la ciudad de Parakou, Ben¨ªn, los d¨ªas 22 y 23 de febrero, organizado por la Fundaci¨®n Salvador Soler, y que reuni¨® a organizaciones misioneras y ONG que trabajan en ese pa¨ªs.
El evento contaba entre sus objetivos con el deseo de convertirse en un punto de encuentro entre las actividades-actuaciones de las congregaciones religiosas y sus v¨ªnculos con las organizaciones no gubernamentales para el desarrollo; posibilitar y facilitar relaciones intercongregacionales; e identificar e impulsar espacios y oportunidades de trabajo en com¨²n en materia de proyectos entre las ONG y las contrapartes locales: formaci¨®n, financiaci¨®n, cooperaci¨®n t¨¦cnica, sostenibilidad y respeto y promoci¨®n de los derecho humanos.
Despu¨¦s de horas de reflexi¨®n y puesta en com¨²n, la asamblea concluy¨® que puede ser muy positivo que las ONG y la Iglesia colaboren, para lo cual es necesario compartir experiencias y pensar juntos en soluciones.
Para fomentar este compartir se ha creado el Foro Ben¨ªn, una p¨¢gina alojada en la web de la Fundaci¨®n Salvador Soler, que fue presentado por Ramiro Vi?uales el ¨²ltimo d¨ªa del encuentro. En ¨¦l todo el mundo puede informar, informarse y formarse sobre desarrollo y Ben¨ªn, comunicar noticias, eventos y novedades, buscar fondos, compartir experiencias y lecciones aprendidas de las mismas, aportar referencias, pedir consejo; en definitiva, un espacio virtual para una mayor y mejor calidad, eficacia e impacto de la cooperaci¨®n para el desarrollo en Ben¨ªn.
Este Primer Encuentro Misioneros-ONG Ben¨ªn fue clausurado por el C¨®nsul honorario de Espa?a en el pa¨ªs, Claude Karam, que anim¨® tanto a las ONG como a los misioneros a que, a pesar de sus diferencias, a que no cesen en su labor de ayuda y promoci¨®n del pueblo benin¨¦s.
Un problema de olores
Lo primero que sorprende al cruzar las puertas del hospital de Tangui¨¨ta, en Ben¨ªn, es la multitud de personas acampada bajo los mangos de la enorme explanada situada frente a los pabellones de consultas y habitaciones. Muchos hombres y mujeres duermen sobre esterillas aprovechando la sombra que los ¨¢rboles proporcionan mientras decenas de ni?os corretean entre los bultos humanos y las grandes bolsas de cuadros que contienen las pertenencias con las que se ha desplazado hasta all¨ª. Un poco m¨¢s all¨¢, grupos de mujeres cocinan. El gran recinto cubierto habilitado para esa labor se ha quedado peque?o y muchas plantan sus fogones fuera de ¨¦l. Se trata de familiares de las personas internadas en el hospital o de enfermos que esperan su turno para ser atendidos por los doctores.
El enorme complejo hospitalario de los Hermanos de San Juan de Dios surgi¨® como un dispensario en 1970, cuando lleg¨® hasta este apartado rinc¨®n del norte de Ben¨ªn el hermano y doctor Florencio Priuli. A lo largo de los a?os el establecimiento creci¨® seg¨²n las necesidades que iban apareciendo hasta convertirse en el hospital de referencia del pa¨ªs, al que, adem¨¢s, acuden pacientes desde las naciones vecinas: Nigeria, N¨ªger, Burkina Faso y Togo. 12 m¨¦dicos, 300 camas, 4.500 intervenciones quir¨²rgicas al a?o, 3.000 pacientes, de 14 etnias diferentes, que cruzan sus puertas cada d¨ªa¡ son algunas de las cifras que maneja el centro.
La forma de crecer y las dimensiones que ha alcanzado el hospital hacen dif¨ªcil su gesti¨®n, su mantenimiento y han generado problemas importantes de agua y saneamiento. Estos ¨²ltimos son muy evidentes porque un olor muy caracter¨ªstico procedente de los diversos grupos de letrinas recibe al visitante que cruza las puertas del recinto y le persigue por todos sus rincones.
"Las carencias en este sector presentan varios frentes", comenta Ramiro Vi?uales Ferreiro, coordinador de la Fundaci¨®n Salvador Soler, colaboradora del proyecto. El primero es el del abastecimiento de agua. El hospital cuenta con tres pozos sellados y uno superficial, que suele secarse durante la estaci¨®n seca. Todos est¨¢n conectados a un dep¨®sito de 35.000 litros que se llena dos o tres veces al d¨ªa. La anal¨ªtica realizada al agua all¨ª almacenada muestra una presencia importante de coliformes. El agua se distribuye por todo el hospital y es usada en los aparatos m¨¦dicos, por el personal sanitario y por los enfermos y sus familiares para beber, cocinar o para la higiene personal.
Esa agua se evac¨²a, en cada uno de los edificios, a trav¨¦s de unas fosas s¨¦pticas y pozos percolados que una vez llenos tienen que vaciarse. Esta operaci¨®n se lleva a cabo con un tractor que arrastra un dep¨®sito de 3.000 litros, el cual absorbe los l¨ªquidos que a continuaci¨®n son transportados a una zona del bosque que rodea al hospital sin ning¨²n tipo de control ni tratamiento.
Otro de los graves problemas que afectan al complejo es el de las letrinas. Cuenta con seis grupos que est¨¢n mal construidas y muchas carecen de ventilaci¨®n e iluminaci¨®n. Tambi¨¦n est¨¢n llenas. Posiblemente el desconocimiento, la verg¨¹enza (puertas que no cierran o que simplemente han desaparecido) o la superstici¨®n debida a la leyenda de que una vez un ni?o se cay¨® en ellas, hacen que no se utilicen. Pacientes y familiares realizan sus necesidades en bolsas de pl¨¢stico que luego tiran a las letrinas. El pl¨¢stico es la principal causa de la colmataci¨®n de estas instalaciones.
La soluci¨®n encontrada es vaciar las letrinas y tirar sus contenidos en el bosque, con lo que en ¨¦pocas de lluvia este se convierte en una laguna de aguas fecales germen de fiebres tifoideas y de mosquitos transmisores de la malaria (enfermedades que est¨¢n incrementando su prevalencia en la zona).
Ante tan grave situaci¨®n, el hospital pidi¨® ayuda a varias ONG espa?olas que trabajan en Ben¨ªn. Estas decidieron unirse para dar soluci¨®n a estos problemas de saneamiento trabajando conjuntamente. Algo que no siempre se consigue realizar en el mundo de la cooperaci¨®n.
Mensajeros de la Paz, Fundaci¨®n Salvador Soler, OAN International, Energ¨ªas Sin Fronteras (ESF) y el Grupo de Cooperaci¨®n de Sistemas de Agua y Saneamiento para el Desarrollo de la Escuela T¨¦cnica Superior de Ingenier¨ªa y Dise?o Industrial de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid (UPM) forman la parte espa?ola y como contraparte local est¨¢n los Hermanos de San Juan de Dios y las Religiosas Teatinas de la Inmaculada Concepci¨®n, que ayudan a gestionar el hospital.
Este convenio se materializ¨® en una primera visita de identificaci¨®n que tuvo lugar en agosto de 2016. Tras ella se hizo un informe y un plan de actuaci¨®n en el que se propuso atacar las deficiencias de forma integral: abastecimiento, saneamiento, gesti¨®n de residuos y sensibilizaci¨®n sobre el uso, cuidado y mantenimiento de las letrinas.
Una segunda visita, en febrero de 2017, ha permitido establecer una hoja de ruta y priorizar las intervenciones. En materia de abastecimiento se mejorar¨¢ la conexi¨®n de los pozos al dep¨®sito para que este siempre est¨¦ lleno. Adem¨¢s, se automatizar¨¢ esta funci¨®n lo que favorecer¨¢ que una vez lleno el mismo, el flujo de agua se pare por s¨ª mismo y no rebose como sucede en la actualidad.
Tambi¨¦n se proceder¨¢ al saneamiento del dep¨®sito. Esta acci¨®n consistir¨¢ en su vaciado, limpieza, recubrimiento y desinfecci¨®n, as¨ª su agua ser¨¢ apta para el consumo humano. Paralelamente, se construir¨¢ un nuevo grupo de letrinas mejoradas. Todo ello vendr¨¢ acompa?ado de un proyecto de sensibilizaci¨®n sobre el buen uso de las mismas. Finalmente, se pondr¨¢ en marcha la parte de gesti¨®n de residuos con una posible planta de secado de lodos extensiva.
Independientemente del proyecto que se quiere implementar en Tangui¨¨ta, lo relevante aqu¨ª es que distintas organizaciones se han puesto de acuerdo para compartir conocimientos, ahorrar costes y ser m¨¢s eficaces a la hora de dar soluci¨®n a un problema concreto. Algo que no suele ser normal en el campo de la cooperaci¨®n, donde lo que normalmente impera es el recelo y el protagonismo.
Adem¨¢s, esta iniciativa constituye una muy buena oportunidad para testar el encaje entre las teor¨ªas universitarias, aportadas por OAN, ESF y el grupo de la UPM, con la experiencia del terreno, que tienen los hermanos de San Juan de Dios y las religiosas teatinas, y la capacidad de gesti¨®n, organizaci¨®n, coordinaci¨®n y recaudaci¨®n de fondos de Mensajeros de la Paz y Fundaci¨®n Salvador Soler. Una buena noticia de la que ser¨ªa muy interesante conocer las conclusiones y lecciones que se sacan de ella
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