Ultra pero no tonta
Le Pen promete abandonar la moneda ¨²nica cuando los franceses detestan esa opci¨®n
¡°La mejor forma de cumplir la palabra empe?ada es no darla jam¨¢s¡±. Marine Le Pen debiera haber tenido muy presente ese m¨ªtico consejo de Napole¨®n antes de hablar del euro. Cuenta la ¡°candidata del pueblo¡± a los franceses que deben abandonar la moneda europea porque es perjudicial ¡°para el empleo, la competitividad y el poder adquisitivo¡±.
La neofascista aclara con sal gorda que el euro ¡°es la moneda de los banqueros¡±, como si el franco que quiere resucitar hubiera sido la moneda de los pobres. Sus compatriotas no compran tal mercanc¨ªa. Siete de cada diez no quieren dejar la eurozona. Son franceses, pero saben sumar y leer.
La hija del filonazi Le Pen basa su programa para Francia en ¡°la reconquista de la soberan¨ªa monetaria¡±. Sin esa soberan¨ªa, es inaplicable el 70% de su programa: impuestos especiales a las importaciones y a los trabajadores extranjeros, vuelta a las fronteras, contratos p¨²blicos solo para empresas francesas¡
Por eso, su fobia al euro se ha vuelto contra ella en un pa¨ªs que s¨ª quiere mayoritariamente la moneda ¨²nica. Consciente de ello, dulcifica su promesa tras ¡°escuchar las inquietudes de los franceses¡±.
No cuela, porque los avisos ya han sido muy claros. A la vez que la prima de riesgo ha subido por ¡°el peligro Le Pen¡±, el Instituto Montaigne ha cifrado entre el 2,3% y el 9% el retroceso del PIB si Francia vuelve al franco. El gobernador del Banco de Francia, Fran?ois Villeroy de Galhau, sostiene que el producto nacional perder¨ªa 30.000 millones al a?o.
La deuda p¨²blica de Francia (el 100% del PIB) debe devolverla en euros. Los productos que import¨® el a?o pasado costaron 48.000 millones m¨¢s que los que export¨®. Las importaciones, m¨¢s caras, minar¨¢n el poder adquisitivo de los franceses, la industria se resentir¨¢ y de la m¨¢quina de crear parados saldr¨¢n 500.000 para empezar, seg¨²n ese instituto.
Para la l¨ªder ultra, la avalancha de datos es solo una ¡°conjura de expertos¡±. Mejor no leer. Basta con tener fe ciega en ella cuando se inventa que salir del euro significa m¨¢s industria, m¨¢s trabajo y un ¡°proteccionismo inteligente¡± que nadie ha sabido ver.
Si gana, prometi¨®, en seis meses habr¨¢ un refer¨¦ndum para salir del euro. Y dejar¨¢ el El¨ªseo si, como es l¨®gico, el no es mayoritario. Por tanto, su mandato durar¨ªa solo medio a?o.
Es un consuelo para los europe¨ªstas, pero no hay que hacerse ilusiones. Marine es ultra, pero no tonta. As¨ª que ha cambiado las reglas en medio del partido. Acaba de decir que el refer¨¦ndum se har¨ªa, como m¨ªnimo, en un plazo de dos a?os. Y que no se asuste nadie, a?ade, porque ella es ¡°europea¡±.
Ya es tarde. Debiera haber hecho caso antes a Napole¨®n.
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