Una oferta imposible de rechazar y otras lecciones de ¡®El Padrino¡¯

Casi medio siglo despu¨¦s de su estreno, Robert de Niro logr¨® reunir recientemente en Nueva York a una parte importante del reparto original de El Padrino, Al Pacino, James Caan, Robert Duvall, Diane Keaton y Talia Shire. Francis Ford Copola relat¨® que la Paramount no cre¨ªa en el proyecto porque pensaba que una pel¨ªcula sobre mafiosos no iba a encontrar su p¨²blico.

Desde que los agentes del FBI irrumpieron en 1957 en la famosa reuni¨®n de Apalachin, donde se encontraban los principales representantes de las grandes familias del crimen organizado, la presencia de la Mafia en EE?UU qued¨® al descubierto. Pero en los a?os setenta no se hablaba con tanta libertad sobre el tema como ahora. La Mafia era todav¨ªa bastante invisible. De hecho, el poderoso director del FBI durante 40 a?os, Edgar J. Hoover, no ten¨ªa entre sus prioridades la persecuci¨®n de la Cosa Nostra, sino el desenmascaramiento paranoico de la infiltraci¨®n comunista. Hoover falleci¨® en 1972, justo el a?o en el que se estren¨® El Padrino. Nada volver¨ªa a ser igual.

Como ocurre con otras obras maestras, pese a la improvisaci¨®n, a las resistencias del estudio, a la capacidad para el caos de Francis Ford Coppola, el resultado fue una obra maestra y tal vez la pel¨ªcula m¨¢s influyente de la historia. El Padrino se estudia en las escuelas de negocios y es utilizada por los pol¨ªticos. El lunes mismo, el portavoz del PP, Pablo Casado, se?al¨® que "esperaba que la familia Pujol no se hubiese inspirado en ese tipo de obras", refiri¨¦ndose a El Padrino. En una antigua entrevista, la fallecida guionista y escritora estadounidense Nora Ephron confes¨® que, desde tiempos inmemoriales, su plan de Navidad era ver El Padrino I en Nochebuena y El Padrino II en Fin de A?o. Consideraba que mantener frescas las lecciones de la familia Corleone era imprescindible para la vida cotidiana.

El Padrino nos sigue enganchando porque es el relato de un hombre que llega con lo puesto a Am¨¦rica y consigue levantar un imperio, aunque pagar¨¢ un precio enorme por ello. Lo tiene todo: amor, traici¨®n, amistad, familia, cr¨ªmenes, poder... Pero, sobre todo, nos apasiona porque no importa la situaci¨®n en la que nos encontremos: las secuencias y las frases de la saga de la familia Corleone siempre nos proporcionar¨¢n una respuesta.

Saber qui¨¦n es el Clemenza de cualquier organizaci¨®n, ser consciente de que aquel que te convoque para la cita es el traidor, tener la capacidad de hacer ofertas que no se puedan rechazar, reconocer la diferencia entre las cosas personales y los negocios... Las ense?anzas que aportan los Corleone siempre son aprovechables. Una de las m¨¢s importantes, especialmente ¨²til en estos tiempos revueltos de guerras internas entre luz y taqu¨ªgrafos, sigue siendo cuando su impulsivo hijo Sonny lleva la contraria a Vito Corleone en p¨²blico. Cuando acaba la reuni¨®n, el patriarca le echa una bronca tremenda y luego le reprocha: "Nunca dejes que nadie de fuera de la familia sepa lo que est¨¢s pensando".