As¨ª gan¨® Vettel el Gran Premio de Montecarlo
Ray-Ban present¨® su colaboraci¨®n con Ferrari el d¨ªa grande de su piloto estrella
Yates pantagru¨¦licos inundan las aguas del puerto y miles de personas ¨Cunos en bermudas, otros con trajes de marca¨C abarrotan tierra firme. Es el gran premio de F¨®rmula 1 de M¨®naco, que este a?o ha celebrado sus 75 aniversario.
Es un circuito infernal, urbano, tachonado de muros y curvas imposibles, pero, posiblemente, el m¨¢s excitante de la temporada. El m¨¢s lento, s¨ª, como reconoc¨ªan los pilotos Ferrari Kimi Raikkonen y Sebastian Vettel un d¨ªa antes del gran premio, pero que requiere una t¨¦cnica y una habilidad sobresalientes. El famoso t¨²nel te encierra, de repente, en la oscuridad, pero, como nos cont¨® Vettel, ¡°como utilizo unas gafas estupendas no tengo problema al volver a ver la luz¡±.
Esas gafas se llaman Ray-Ban. La casa patrocina, por segundo a?o, al equipo Ferrari. La firma ¨®ptica comenz¨® su colaboraci¨®n el pasado a?o en el circuito de Silverstone (Inglaterra). ¡°Tenemos los mismos valores de superaci¨®n, e incluso los mismos colores, el rojo, como se puede ver en los dos nuevos modelos que hemos hecho para Ferrari. Tradici¨®n e innovaci¨®n al mismo tiempo, pasi¨®n, por supuesto, y tambi¨¦n romper los l¨ªmites, cada uno en su campo, as¨ª que est¨¢bamos destinados a juntar nuestros valores y apoyarnos. As¨ª que hemos creado ocho modelos diferentes con el sello de Ferrari y Ray¨CBan, y en el futuro haremos enriquecer esta nueva colecci¨®n¡±, explica Chiara Occulti, Luxottica Group Brand and Communication Management SVP.
¡°Por una parte la nueva colecci¨®n mantiene los iconos de la marca y de otra parte la innovaci¨®n habitual que aplicamos en nuestras lentes¡±, confiesa Federico Buffa, Luxottica Group R&D Product Development Director. ¡°Los ocho nuevos modelos representan exactamente las formas que nos han hecho ser una marca ic¨®nica, las redondas (de aviador), la Wayfarer, con colores nuevos, cuero y nuevos materiales. Otros tres modelos est¨¢n m¨¢s ligados a las nuevas tecnolog¨ªas, con fibra de carbono, inyecci¨®n de materiales derivados de la investigaci¨®n aeroespacial, polarizaci¨®n, antirreflejos¡ Hemos empleado tecnolog¨ªa de ¨²ltima generaci¨®n para las gafas de Ferrari, como hacen ellos con sus coches. De hecho, los pilotos las testaron en primera persona antes de lanzarlas y nos dijeron sus sugerencias¡±. Como solt¨® Vettel, ¡°lo principal para m¨ª es la garant¨ªa de sus lentes, los cristales, que sean efectivos contra la luz¡±.
La carrera comenz¨® a las dos de la tarde. Calor, mucho calor. Minutos antes, el circuito bull¨ªa: ¨¢ticos abarrotados (?cu¨¢nto costar¨¢n alquilarlos?), gradas a reventar, famosos y famosas deambulando por los pit lanes, efluvios de cremas protectora, Flavio Briatore charlando por ah¨ª, Bernie Ecclestone haciendo lo propio y Pierre Casiraghi y su mujer, Beatrice Borromeo, observando la puesta a punto del b¨®lido de Sebastian Vettel.
Al final gan¨® Sebastian Vettel, el alem¨¢n sonriente. La carrera, como siempre en M¨®naco, tuvo sus paradas, sus accidentes, y la complicaci¨®n de adelantar en semejante circuito. Vettel lo consigui¨® y gan¨® a su compa?ero de escuder¨ªa (Ferrari). Alegr¨ªa para Il Cavallino Rampante y para Ray Ban. ?El ambiente? Ya lo hemos comentado. Es como un decorado de cuento, en el que chicas despampanantes (en bikini o vestidas de boda) y chicos musculosos y guapetones (no todos, ?eh?) acuden y vibran con sus ¨ªdolos de las carreras. Champ¨¢n a raudales, yates m¨¢s grandes que una casa en la calle Serrano de Madrid, pieles morenas, fiestas nocturnas interminables y precios de esc¨¢ndalo. Se?ores, esto es el circo de M¨®naco.
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