La prueba de oto?o

Despu¨¦s de las expectativas de cambio generadas en 2015 y del frustrante espect¨¢culo de impotencias que nos ofreci¨® 2016, la pol¨ªtica espa?ola ha entrado en un punto de recomposici¨®n a expensas de lo que ocurra en el oto?o caliente catal¨¢n.

Se est¨¢ recuperando la normalidad del eje derecha-izquierda, pero con escasas posibilidades de configurar una alternativa de izquierdas a corto plazo. El PP sigue varado por la corrupci¨®n, marcado a fuego por el caso B¨¢rcenas que nunca se quitar¨¢ de encima por su negativa a afrontar responsabilidades pol¨ªticas. Ciudadanos va ajustando su espacio como centro que, como nos ense?a la tradici¨®n, siempre cae del lado de la derecha. El PSOE busca recomponer su identidad en la izquierda y Podemos va encontrando acomodo en el entramado institucional. Pero todos estos equilibrios est¨¢n a expensas de lo que ocurra en Catalu?a.

Por muy sensatos consejos que env¨ªe The New York Times, por mucho que los casos de Quebec y de Escocia ense?en que el refer¨¦ndum puede ser la tumba del independentismo, Rajoy no va a permitirlo. El presidente es un genuino representante de una idea castellana del poder para la que el solo hecho de haber sentado el precedente, aun ganando, es ya una derrota.

Si la estrategia del Gobierno de responder a cualquier iniciativa del independentismo con intimidaciones y querellas ¡ªque ha provocado ya que los aspirantes a fabricar las urnas se hayan asustado, quedando el concurso desierto¡ª tiene ¨¦xito y el refer¨¦ndum resulta inviable, se abrir¨¢n dos escenarios: que el Gobierno catal¨¢n renuncie a ¨¦l y tras una convocatoria electoral se abra paso una salida razonable, que en ning¨²n momento el Gobierno espa?ol ha dado se?ales de querer facilitar; o que el Gobierno catal¨¢n siga manteniendo viva la llama del refer¨¦ndum hasta el final, obligando al Gobierno espa?ol a la escalada judicial, hasta llegar a la confrontaci¨®n el d¨ªa 1 de octubre que, a falta de urnas, bien puede producirse en la calle.

Podemos, con el apoyo al refer¨¦ndum, es el ¨²nico que ha avanzado hacia el reconocimiento del independentismo que es el paso previo a la distensi¨®n

Cualesquiera que sean las dimensiones del choque, tambi¨¦n en este caso habr¨¢ que encontrar una salida, aunque la radicalizaci¨®n del escenario invite al desquite.

Es por eso, que la cuesti¨®n catalana es hoy el principal problema pol¨ªtico de Espa?a. O se rompe el ciclo de la retroalimentaci¨®n del conflicto o los destrozos pueden ser considerables. Podemos, con el apoyo al refer¨¦ndum, es el ¨²nico que ha avanzado hacia el reconocimiento del independentismo que es el paso previo a la distensi¨®n.

Cuando Rajoy dice a los suyos que ¡°sabe lo que tiene que hacer en Catalu?a¡± y que ¡°seguro que lo har¨¢¡± est¨¢ insinuando que no descarta el programa de m¨¢ximos. Una v¨ªa que no resolver¨¢ nada, pero puede dejar heridas sensibles y un deterioro notable de la imagen internacional. La sacudida afectar¨¢ a todos y el independentismo seguir¨¢ ah¨ª.