Hablamos con Brisa Fenoy, una artista hecha a medida para la generaci¨®n ¡®trap¡¯

Cualquiera dir¨ªa que detr¨¢s de esa mujer con ojos de reto, se esconde una voz dulce con unos tintineos de emoci¨®n m¨¢s que evidentes cuando coge el tel¨¦fono. Su camino en la m¨²sica no empieza ahora. Su primer coqueteo con un pentagrama fue con seis a?os en clases particulares y de ah¨ª al conservatorio, donde aprendi¨® a tocar el piano. Ten¨ªa doce cuando compuso su primera canci¨®n que hablaba, c¨®mo no, de amor. Del coraz¨®n roto surgi¨® la necesidad de desahogarse componiendo. A pesar de la sacudida del tiempo, todav¨ªa se le rescata en la voz cuando habla de su m¨²sica una tierna emoci¨®n, y es que con el despegue de su carrera musical, Brisa ha podido completar parte de su crucigrama vital. ¡°Me he dado cuenta de que todas mis decisiones, como la de ir al conservatorio -que en su momento quiz¨¢s no me apetec¨ªa- han surtido efecto, todo ha servido para algo. Ahora mismo, pase lo que pase, incluso si me muero ma?ana, siento que he hecho lo correcto¡±.

Tiene en la rec¨¢mara un disco, pero de ese conjunto de canciones, de momento s¨®lo ha ense?ado Ella, un sencillo que ya recopila 37 mil visualizaciones en Youtube (s¨®lo en las primeras horas ya sum¨® 3000) y vol¨® directo a la lista viral de Spotify, coloc¨¢ndose en el puesto 15. Todav¨ªa no hay fecha de salida de su primer disco, pero s¨ª ha dado algunas pinceladas, como la canci¨®n Ahora, que todav¨ªa no se ha mostrado al p¨²blico pero que habla de la importancia de vivir el momento. Eligi¨® Ella como carta de presentaci¨®n porque ¡°cuando escribo una canci¨®n hago sondeos entre mis amigos, mi familia, etc. Resultaba ser la favorita de todos, sin importar edades o dem¨¢s diferencias era siempre la preferida¡±, dice.

Se la conoce como ¡°la modelo que quiere ser cantante¡±. De ah¨ª, de su profesi¨®n paralela como modelo, nace el gusto por lo est¨¦tico, algo que queda totalmente plasmado en el videoclip de Ella. Es precisamente ah¨ª donde se ven sus estilismos, escogidos uno a uno concienzudamente, y que combinan la ropa deportiva, las capuchas, las gafas de sol y los pa?uelos. Ah¨ª est¨¢n tambi¨¦n las medias de rejilla, una corona de la Virgen, mordazas y piernas de Barbie; todos ellos s¨ªmbolo de las cadenas que impiden a las mujeres ser ellas mismas. La mujer es, por lo tanto, pieza sagrada de su m¨²sica. Ante la pregunta de qu¨¦ piensa de aquellos que apoyan la idea de que el fenimismo actual es simplemente una moda, contesta: ¡°es una excusa que toman. Hay gente que no quiere eso, no les conviene que exista esa lucha as¨ª que buscan desprestigiarlo. De todas formas yo busco que exista la igualdad, y con igualdad me refiero a entre hombres y mujeres, entre lesbianas o bisexuales; me da igual. Defiendo que todos somos iguales¡±.

Cada artista se diferencia y tiene su singularidad. Yo creo que aportar¨¦ cosas que otros no puedan, igual que otros aportar¨¢n cosas que yo no pueda. Cada uno cubre un vac¨ªo que al menos una persona apreciar¨¢, dice. Su aportaci¨®n y su apuesta est¨¢ en un estilo musical que tiene una mezcla de flamenco, m¨²sica ¨¢rabe y electr¨®nica. Fruto, por supuesto, de influencias de las que se inspira como Lana del Rey o Calle 13 y de una producci¨®n pr¨¢cticamente propia, y es que aunque Brisa aprendi¨® a lomos de un piano cl¨¢sico, con apenas 20 a?os ya se hab¨ªa montado su peque?o estudio donde aprendi¨® a producir su m¨²sica.

Dice que su misi¨®n en la vida es mandar un mensaje con su m¨²sica y transformar el dolor en canci¨®n. Lo que est¨¢ claro es que Brisa Fenoy no entiende de jaulas sino de vuelos y Ella ha sido es la toma de pista para un gran despegue.