Carta a Polly
QUERIDA POLLY: Nacer mujer es nacer dentro de la lucha m¨¢s antigua de la humanidad. Cada vez que una mujer ¡ªuna generaci¨®n de mujeres¡ª se planta, no deja que nada la obligue a callar, protesta y levanta la voz, la vida de nuestras hijas se vuelve un poco m¨¢s f¨¢cil./
Quiero que lo recuerdes.
Como madre, mi deber es hacer que tu camino sea un poco menos dif¨ªcil que el m¨ªo. Como mujer, mi deber es asegurar que el camino de la pr¨®xima generaci¨®n sea un poco menos dif¨ªcil que el m¨ªo y el de mis coet¨¢neas.
Ha habido avances, sin duda. Todos esos siglos de sangre, sudor y l¨¢grimas ya han dado fruto para muchas generaciones.
T¨² tienes la suerte de haber nacido en un pa¨ªs, en una cultura, que ha progresado mucho. En el que muchos se han despertado, en el que cada vez son m¨¢s los que saben ver las injusticias de la sociedad y no consentirlas.
Es el resultado de los incansables esfuerzos de las generaciones anteriores para lograr un mundo m¨¢s tolerable.
Pero no debemos olvidar que no hace ni 100 a?os que las mujeres suecas obtuvieron el derecho al voto.
Cada vez que una mujer se planta, no deja que nada la obligue a callar, protesta y levanta la voz, la vida de nuestras hijas se vuelve un poco m¨¢s f¨¢cil.
Y aunque los hombres y las mujeres sean iguales ante la ley y, en teor¨ªa, tengan los mismos derechos civiles, ver¨¢s que la realidad no es tan sencilla.
Los hombres se tomar¨¢n contigo libertades que no se tomar¨ªan si fueras uno de ellos.
Te dir¨¢n c¨®mo se supone que debes comportarte y qu¨¦ aspecto debes tener.
Opinar¨¢n sobre tu cuerpo; reivindicar¨¢n su derecho a opinar sobre tu cuerpo.
Te dir¨¢n c¨®mo actuar para satisfacerles y cumplir sus expectativas de c¨®mo debe ser una mujer.
A lo largo de tu vida, muchas personas, muchos hombres entre ellas, afirmar¨¢n que el feminismo no es necesario, que todo est¨¢ bien tal como est¨¢. Y que no debes quejarte, sobre todo si tienes la suerte de haber nacido en Suecia. Desde luego, en comparaci¨®n con Arabia Saud¨ª, Suecia es un para¨ªso para las mujeres. Pero vamos a echar un vistazo a esa realidad en la que has nacido.
Todos los d¨ªas hay mujeres amenazadas, violadas y agredidas cuando intentan hacerse o¨ªr. Los hombres se toman la libertad de enviarles fotos de sus genitales. Las llaman ¡°putas¡±. Cuando un hombre llama puta a una mujer, no la est¨¢ deshonrando solo a ella. Est¨¢ deshonr¨¢ndote a ti, a m¨ª, a tu hermana, a tu abuela y a los miles de mujeres que han participado ¡ªalgunas incluso sacrificaron la vida¡ª en la lucha para lograr que t¨² puedas decidir a qui¨¦n amas y qu¨¦ quieres ser. Tanto si te encuentras con ese tipo de palabras y de acciones como si no, Polly, esta sigue siendo tambi¨¦n tu lucha.
Nunca cierres los ojos o mires hacia otro lado.
Esta ser¨¢ siempre tu lucha.
Ese es el pacto; esa es la solidaridad.
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