As¨ª no, se?ores
Soy, en t¨¦rminos salariales, lo que hace un tiempo se acu?¨® como ¡°mileurista¡±. De mi n¨®mina se retienen, entre otras cantidades, un 8% en concepto de IRPF. En la mal llamada amnist¨ªa fiscal (resulta m¨¢s veros¨ªmil regalo o chollo fiscal), no solo no se sancion¨® a quienes incumpl¨ªan las normas tributarias sino que se les obsequi¨® con un premio: de media, pagaron un exiguo 3% del capital aflorado, que en este caso se mide no en miles de euros, sino en miles de millones de euros. Como colof¨®n a este desprop¨®sito, recientemente el TC la ¡°anul¨®¡±, gesto simb¨®lico pues no tiene efecto tributario alguno. A veces uno queda desorientado, sinti¨¦ndose personaje de sainete nacional: ?c¨®mo pretende el Ejecutivo del Partido Popular dar lecciones al contribuyente adoptando medidas como la anterior? M¨¢s bien le inducen a hacer lo contrario. Una vez m¨¢s, Hacienda no somos todos. Y ya van demasiadas.¡ª Borja Ib¨¢?ez C¨¢rcamo. Logro?o.
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