Presos primarios

No me recupero de la noticia de que el presidente de la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol, ?ngel Mar¨ªa Villar, y su hijo Gorka han entablado amistad con el expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio Gonz¨¢lez y su hermano Pablo, en la exclusiva c¨¢rcel de Soto del Real. O sea, la prisi¨®n madrile?a es m¨¢s bien un centro I+D donde se desarrollan ideas, nuevas conexiones, nuevas empresas. Me encanta que la noticia nos presente esta amistad como una ¡°gu¨ªa¡±, es decir, que los hermanos Gonz¨¢lez ayudan a aclimatarse a la c¨¢rcel a los presos primarios, que es como se llama a los reci¨¦n llegados. Una labor tan solidaria como interesada, porque en todos los realities vemos c¨®mo los veteranos se pegan a los nuevos para sacarles informaci¨®n de fuera.

Lo que pasa es que la informaci¨®n no para. El marqu¨¦s de Gri?¨®n se casa en secreto y lo desvela un portad¨®n de ?Hola! Yo se lo hubiera dado a los 18 a?os de Andrea Janeiro. Y Yoko Ono se suma a la causa secesionista de Catalu?a. Ella que siempre es se?alada como la causa de la separaci¨®n de los Beatles, el grupo favorito de Eduardo Mendoza. Imagino que los presos primarios hablan de esto y propongo que ese ecosistema de talento que es Soto del Real deber¨ªa acortar el nombre y llamarse Soto, en plan club. Empieza a dar la sensaci¨®n de que si no pasas por Soto es que llevas una vida aburrida y sin adrenalina. Unos amigos que ya veranean felices en la sierra madrile?a me dijeron que si Miguel Blesa hubiera ido a Soto a¨²n estar¨ªa entre nosotros. De la c¨¢rcel se dicen muchas cosas. Cuando sali¨® en libertad Mario Conde asegur¨® que dejaba atr¨¢s a personas muy verdaderas. Y Sof¨ªa Loren, que cumpli¨® c¨¢rcel en 1981, dej¨® esa frase c¨¦lebre de que en la prisi¨®n hab¨ªa conocido ¡°a la ¨²nica gente que merec¨ªa la pena de toda mi vida¡±. Ah¨ª queda eso.

Sin embargo, lo que ha dicho el presidente Mariano Rajoy es: ¡°Lo importante es cuidar la imagen¡±, d¨ªas antes de comparecer como testigo en el juicio del caso G¨¹rtel. Entend¨ª que se refer¨ªa a lo que llevar¨ªa vestido para la audiencia. Soy de esas personas que creen que lo que vistas determina c¨®mo sale el d¨ªa. Por ejemplo, la ma?ana que aprobaron la ley del matrimonio gay fui al Congreso vestido de blanco de pies a cabeza y as¨ª me tropec¨¦ con el propio Rajoy, que me mir¨® como si estuviera burl¨¢ndome del tradicional traje de novia. El d¨ªa de su declaraci¨®n, Rajoy me demostr¨® que la imagen que quiere cuidar es la suya como estadista veterano, y consigui¨® enviarnos el mensaje de que sabe m¨¢s por viejo que por presidente de su partido. Una perfilada imagen de persona responsable de s¨ª misma, pero no de la gente que trabaja en su entorno. ?Es un individualista! Su evasiva comparecencia me record¨® a la de la infanta Cristina en el juicio del caso N¨®os y coincide con lo que Rajoy, como una meiga visionaria, ya hab¨ªa adelantado sobre Cristina: ¡°Le ir¨¢ bien¡±. Eso, me imagino, es ¡°cuidar la imagen¡±. Ir, sentarte, aguantar y luego marcharte. Do?a Cristina us¨® la puerta principal, don Mariano eligi¨® el garaje, una manera de marcar las diferencias entre la aristocracia y la democracia.

Como tambi¨¦n lo es la siempre buena noticia de que en Marivent, el palacio de veraneo de la Familia Real, se haya llenado con mucha gente repoblando los espacios vac¨ªos, medio habitados por risas de anta?o. La reina Sof¨ªa hace de gu¨ªa en ese palacio y se ha adelantado a los Reyes para ver a sus nietos mayores reunidos en los jardines y patios. Da la impresi¨®n que la Reina em¨¦rita ha querido rodearse de sus nietos como respuesta a la reciente paella de Ar¨¦valo y el Rey em¨¦rito con Bert¨ªn. Pero, haya gustado o no, la gran paella de Ar¨¦valo fue una iniciativa privada.

Ay, Espa?a, unos veranean en los patios de las c¨¢rceles, otros, como los nietos de la reina Sof¨ªa, juegan a wakeboard en Mallorca. El wakeboard es un deporte de los ochenta, cuando Marivent era trending topic. Mezcla de g¨®ndola y esqu¨ª acu¨¢tico sobre una tabla. Aunque no es un planazo, me hace pensar en esos presos primarios paseando en Soto, sinti¨¦ndose regular cuando ven a personas que conocieron en sitios mejores, practicando deportes estivales en sus televisores comprados en el economato de la c¨¢rcel.