Une y perder¨¢s
En una democracia, la pol¨ªtica debe permanecer blindada al terrorismo
Es tentador relacionar los atentados en Catalu?a con el proceso soberanista. Pero utilizar la tragedia terrorista para tratar de calmar los ¨¢nimos en otras dimensiones pol¨ªticas es una idea desastrosa.
En una democracia, la pol¨ªtica debe permanecer blindada al terrorismo. Los asesinos ganan si alteran nuestra vida. No podemos permitir que modifiquen lo que queremos, pero tampoco lo que no queremos. El terrorismo solo puede cambiar nuestra forma de combatirlo. Tras cada atentado, debemos ajustar las pol¨ªticas de seguridad y prevenci¨®n. Como, en su momento, hacer m¨¢s estrictos los controles en los aeropuertos o, ahora, poner barreras anticamiones.
Pero el resto de ¨¢reas de acci¨®n p¨²blica deben quedar inmunes. Y ello es dif¨ªcil en el actual formato de discusi¨®n pol¨ªtica, donde la reacci¨®n a las declaraciones del adversario da titulares inmediatos. Cuando lo que importa es conseguir muchos ¡°me gusta¡± en las redes sociales, lo que nos define es lo que nos disgusta. La estrategia medi¨¢tica ganadora es empaquetar todo lo que despreciamos dentro del mismo mensaje y as¨ª asegurarnos que este reverbera con fuerza entre los nuestros.
Los recientes atentados en Catalu?a son un ejemplo notorio. Muchos han intentado asociar la locura del terrorismo con todas las cuestiones que les desagradan de la sociedad catalana: el proceso soberanista, la turismofobia, o simplemente que los Mossos cobren m¨¢s que la Guardia Civil. En el otro extremo, muchos secesionistas han encontrado en la gesti¨®n del atentado razones para justificar la independencia de Catalu?a.
De hecho, la fortaleza del secesionismo reside en su maleabilidad intelectual. El independentismo es una m¨¢quina que convierte cualquier elemento de la realidad ¡ªdel retraso de los trenes y las huelgas aeroportuarias a los actos terroristas¡ª en munici¨®n para la causa secesionista. Unir terrorismo y secesionismo es darles m¨¢s materia prima.
Los movimientos rupturistas, sean m¨¢s o menos violentos, se alimentan de mezclar y agitar los problemas. Solo as¨ª pueden imponerse a las opciones que buscan reformas graduales. No caigamos en su trampa. @VictorLapuente
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.