Minor¨ªas catalanas
Quiz¨¢s ser¨ªa una buena idea pensar en c¨®mo dar o repartir el poder, en lugar de concentrarlo, o quitarlo
De todos los sistemas que conocemos para tomar decisiones, la democracia es quiz¨¢s el que permite vivir con m¨¢s tranquilidad a las minor¨ªas pol¨ªticas. Lo logra gracias a dos razones. Primera, porque les da la capacidad de dejar de serlo alg¨²n d¨ªa. Segunda, porque esa posibilidad contiene a la mayor¨ªa de cada momento. Es decir, les da una promesa cre¨ªble de obtener poder de veto. Es un equilibrio delicado, pues la tentaci¨®n para la mayor¨ªa de cada momento de asegurar su posici¨®n nunca desaparece. S¨®lo se mantiene gracias a que el poder est¨¢ apropiadamente distribuido, y el control cruzado es f¨¦rreo y constante.
A¨²n m¨¢s delicado resulta este mismo en un Estado descentralizado. Es f¨¢cil que se d¨¦ una situaci¨®n como la de Catalu?a: el independentismo se siente (y es) una minor¨ªa dentro de Espa?a. Pero ocupa la mayor¨ªa pol¨ªtica en su territorio. En ¨²ltima instancia, esta mayor¨ªa argumenta que, al ser una minor¨ªa sistem¨¢ticamente excluida en el Estado, est¨¢ legitimada para salir de ¨¦l unilateralmente. Emplean, de hecho, la desastrosa actuaci¨®n policial del pasado domingo como prueba. Pero, aunque esta exclusi¨®n fuese completamente cierta, ?qu¨¦ pasar¨ªa con la minor¨ªa pol¨ªtica en una hipot¨¦tica Rep¨²blica Catalana?
Es cierto que la ret¨®rica del Govern estos ¨²ltimos d¨ªas es enf¨¢ticamente inclusiva. Pero a la vez convive con la actuaci¨®n parlamentaria del 7 de septiembre, el refer¨¦ndum monopolizado por la mayor¨ªa, la tendencia de ciertos cargos por mencionar o listar traidores, o de algunos activistas por perseguir periodistas. Es decir: tal vez alguien en la minor¨ªa s¨ª tiene razones para desconfiar.
Una democracia que adem¨¢s es federal, donde el poder de veto est¨¢ repartido en cada territorio y tambi¨¦n en el nivel central, tiene la ventaja de que permite la convivencia porque ampl¨ªa la tranquilidad de las minor¨ªas. Los independentistas han sentido que, hasta ahora, carec¨ªan de dicho poder en Espa?a. Pero muchos no independentistas est¨¢n sintiendo exactamente lo mismo en Catalu?a. Quiz¨¢s ser¨ªa una buena idea pensar en c¨®mo dar o repartir el poder, en lugar de concentrarlo, o quitarlo. @jorgegalindo
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