Frenazo al crecimiento

Las se?ales de alarma por el coste econ¨®mico de la crisis secesionista en Catalu?a empiezan a ser intensas y continuadas. Mientras el Gobierno reconoc¨ªa (de forma poco argumentada) en su plan presupuestario que el coste para el crecimiento ser¨ªa de tres d¨¦cimas de PIB ¡ªla previsi¨®n del crecimiento para 2018 bajaba del 2,6% al 2,3%¡ª, la Autoridad Fiscal Independiente calcula el coste de la crisis en una horquilla de entre cuatro d¨¦cimas y 1,2 puntos de PIB, en funci¨®n del tiempo que dure la crisis pol¨ªtica; podr¨ªa costar a los espa?oles hasta 13.400 millones. La Airef est¨¢ en lo cierto; no es lo mismo una crisis de corta duraci¨®n que pueda resolverse en uno o dos meses que un conflicto que se enquiste durante 2018.

Por el momento, el impacto econ¨®mico del proc¨¦s se manifiesta en perjuicios para la econom¨ªa nacional. El Tesoro P¨²blico pag¨® ayer un marginal positivo por la emisi¨®n de bonos a tres a?os y tuvo que pagar m¨¢s caras las obligaciones a 10 a?os y los bonos a 30. En Catalu?a, los indicadores econ¨®micos caen con rapidez. El mercado inmobiliario est¨¢ pr¨¢cticamente estancado, el consumo desciende de forma alarmante (el ministro de Econom¨ªa anunci¨® ayer que las ventas en las grandes superficies catalanas desde el 1 de octubre han ca¨ªdo el 20%) debido al penoso clima de incertidumbre y las reservas tur¨ªsticas en toda la comunidad aut¨®noma se desploman a tasas del 15%. El deterioro de la econom¨ªa catalana tendr¨¢ un efecto de segunda vuelta sobre la espa?ola. Pero la contracci¨®n del consumo y la huida de las inversiones afectar¨¢ primero y con m¨¢s intensidad a Catalu?a.

La situaci¨®n es de alerta econ¨®mica. El Gobierno tendr¨ªa que explicar cu¨¢les son los plazos previsibles para la estabilizaci¨®n y resoluci¨®n de la crisis y disponer de acciones econ¨®micas para distintos escenarios en funci¨®n del tiempo. Porque no es evidente que estemos ante una crisis que se resuelva antes de 2018.