Sin enchufes no hay coche el¨¦ctrico
Se abre una excelente oportunidad para acelerar la transici¨®n hacia el transporte sostenible
China se ha convertido recientemente en el quinto pa¨ªs que dice que eliminar¨¢ gradualmente los coches propulsados por combustibles f¨®siles. Al igual que Inglaterra, Francia, Noruega e India, China considera esta medida una v¨ªa para cumplir los objetivos del Acuerdo de Par¨ªs. Los cinco, est¨¢n fomentando por todos los medios posibles la incorporaci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos libres de emisiones en combinaci¨®n con la generaci¨®n de energ¨ªa renovable.
Ahora que se ha resuelto el reto tecnol¨®gico de la movilidad el¨¦ctrica y que en los pr¨®ximos tres a?os se comercializar¨¢n muchos nuevos veh¨ªculos el¨¦ctricos, la atenci¨®n debe centrarse en la manera de proporcionar la infraestructura de recarga necesaria, combinada con una adecuada integraci¨®n de energ¨ªas renovables.
Los pa¨ªses firmantes del Acuerdo de Par¨ªs ya tienen de su lado el peso de las nuevas tecnolog¨ªas para impulsar una incorporaci¨®n m¨¢s r¨¢pida de los coches el¨¦ctricos. A medio plazo, los veh¨ªculos el¨¦ctricos no costar¨¢n m¨¢s que los convencionales, y la reducci¨®n de los costes operativos ya hace que a muchos compradores les parezcan m¨¢s atractivos.
En la UE solo existen unas 120.000 estaciones de recarga que no se encuentran en viviendas privadas
La tecnolog¨ªa m¨¢s importante de cualquier coche el¨¦ctrico son las bater¨ªas que lo impulsan. Su precio es cada vez m¨¢s asequible, y son cada vez m¨¢s eficientes. Gracias a la ¨²ltima generaci¨®n de bater¨ªas, la gama de veh¨ªculos ha ampliado su autonom¨ªa hasta algo m¨¢s de 300 kil¨®metros. Adem¨¢s, la nueva tecnolog¨ªa ha reducido los tiempos de recarga hasta apenas 14 minutos, un espectacular avance desde la recarga que duraba toda la noche, impidiendo la incorporaci¨®n generalizada de la anterior generaci¨®n de coches el¨¦ctricos.
El mayor reto pendiente para la incorporaci¨®n de coches accionados por bater¨ªas es la escasez de estaciones de recarga. Para que el coche el¨¦ctrico se convierta en una forma mayoritaria de transporte personal, los consumidores necesitan tener la seguridad de saber que, independientemente de cu¨¢nto se alejen de casa, encontrar¨¢n una estaci¨®n de recarga del mismo modo que ahora tienen la certeza de que encontrar¨¢n una gasolinera. En este punto es donde los dirigentes deben dar un gran paso adelante en cuanto a movilidad el¨¦ctrica.
Muchos dirigentes entienden los beneficios medioambientales, de salud y econ¨®micos que la incorporaci¨®n generalizada de coches el¨¦ctricos podr¨ªa generar. Por ello muchos gobiernos ofrecen ayudas y descuentos a los consumidores que adquieran veh¨ªculos que cumplan los requisitos. Pero es igualmente esencial promover la inversi¨®n en la infraestructura energ¨¦tica necesaria.
Hasta la fecha, el progreso ha sido lento. En la Uni¨®n Europea solo existen unas 120.000 estaciones de recarga que no se encuentran en viviendas privadas, seg¨²n el Observatorio Europeo para los Combustibles Alternativos, y en Estados Unidos, donde se han vendido m¨¢s de 500.000 coches completamente el¨¦ctricos o h¨ªbridos, apenas hay 16.000 puntos de recarga que no sean viviendas.
Detr¨¢s de los esfuerzos mundiales por deshacerse de los coches accionados por combustibles f¨®siles, se da una paradoja en la historia.
A los alumnos se les ense?aba que Karl Benz invent¨® el primer autom¨®vil en 1885 en la ciudad alemana de Mannheim. Es menos conocido que otros inventores de toda Europa ya estaban desarrollando por entonces los primeros coches el¨¦ctricos.
Durante los primeros 20 a?os de existencia del sector de la automoci¨®n, los veh¨ªculos con bater¨ªa se vendieron mejor que los accionados por combustibles f¨®siles como los Benz. Eso cambi¨® cuando se introdujeron los principales cambios, como el encendido autom¨¢tico, que ayudaron a situar en posici¨®n de ventaja a los veh¨ªculos de gasolina. Lo mismo ocurri¨® con las emergentes empresas petrol¨ªferas, que recibieron un incentivo directo por construir redes de gasolineras que vendieran combustibles f¨®siles a un mercado masivo.
Los nuevos avances en la tecnolog¨ªa de las bater¨ªas est¨¢ cambiando ahora la situaci¨®n de nuevo a favor de los veh¨ªculos el¨¦ctricos. No obstante, es necesario un impulso de las pol¨ªticas p¨²blicas para garantizar un paso ordenado a los coches el¨¦ctricos.
Ya hay anuncios que indican que los gobiernos est¨¢n yendo en la direcci¨®n correcta, sin embargo, todav¨ªa hay muchas cosas que se pueden hacer como aplicar desgravaciones fiscales para las inversiones en sistemas de recarga, establecer est¨¢ndares internacionales, financiar la investigaci¨®n de nuevas tecnolog¨ªas, o incluso ordenar la instalaci¨®n de estaciones de carga en algunas gasolineras existentes.
Los avances tecnol¨®gicos han permitido esta oportunidad hist¨®rica de hacer funcionar el mundo sin consumir la Tierra. Cuanto m¨¢s r¨¢pido consigamos hacerlo, y cuanto antes limpiemos nuestras ciudades de contaminaci¨®n y liberemos a nuestra atm¨®sfera de gases de efecto invernadero, mejor.
?Ulrich Spiesshofer es presidente y consejero delegado de ABB Ltd.
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