Ley D¡¯Hondt
No es probable que cuando se redact¨® la Constituci¨®n se pensara que los partidos nacionalistas fueran determinantes para la gobernabilidad de Espa?a, sino que se les quiso dar un acomodo en la pol¨ªtica nacional con el fin de tener en cuenta y asumir las diferentes sensibilidades regionales. Pero, 40 a?os despu¨¦s se est¨¢ demostrando que no es as¨ª. Estos partidos est¨¢n utilizando su presencia en el Parlamento para presionar al Gobierno de turno. Se aprovechan de las ventajas que les da la ley electoral, y tienen m¨¢s esca?os que otros partidos con representaci¨®n nacional. Modif¨ªquese la ley y que todos los partidos tengan las mismas posibilidades. H¨¢gase del Senado una C¨¢mara de representaci¨®n auton¨®mica, y que estos partidos puedan ejercer sus funciones y derechos. Hay que conseguir que todos juguemos el mismo partido y con las mismas reglas.¡ª Miguel ?ngel Torinos Gonz¨¢lez. Valladolid.
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