Aprender a ser un tr¨ªo
UN DI?LOGO entre dos no deber¨ªa suponer mayor dificultad. Habla uno. El otro escucha. Y se invierten los papeles. Pero cuando en el intercambio entra un tercero, el asunto se complica. M¨¢s a¨²n cuando el contenido de la conversaci¨®n nace de la improvisaci¨®n y la m¨²sica sustituye a las palabras. Le Trio Joubran, compuesto por tres la¨²des ¨¢rabes, empez¨® siendo un d¨²o formado por los int¨¦rpretes, compositores y hermanos palestinos Samir y Wissam. En 2004 se incorpor¨® el m¨¢s peque?o de los Joubran, Adnan. La pareja tuvo que aprender a escucharse. A ser un terceto de la¨²des, una agrupaci¨®n no muy habitual. ¡°Nuestra forma de componer es distinta. En un piano, el m¨²sico toca la melod¨ªa con una mano y la armon¨ªa con la otra. Nosotros no somos tres pianistas con un mismo instrumento. Somos tres pianos. Tres caracteres y tres personalidades distintas¡±, detalla Samir.
Reivindican la cultura ancestral palestina, pero siempre mirando adelante. Lo explica Wissam: ¡°Somos la cuarta generaci¨®n de una familia de m¨²sicos y lutieres. Nuestro instrumento tiene cientos de a?os. Pero nosotros creemos que la tradici¨®n no es algo que siempre repites¡±. Ti?en sus composiciones con pop, rock o jazz, y han tocado en templos de cl¨¢sica como la ?pera de la Bastilla, en Par¨ªs. Le Trio Joubran trabaja para construir una conversaci¨®n a tres con altas pretensiones que desvela Adnan. ¡°La m¨²sica es un lenguaje que todo el mundo entiende. Cuando tocas, puedes llegar incluso a aquellos que son incapaces de ponerse de acuerdo. Su poder es la capacidad de conmover¡±.?
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