Estos son los personajes que han incendiado Twitter en 2017

EL RELATO DE Espa?a en 2017 se podr¨ªa contar de hashtag en hash?tag. Ese palabro raro ¡ªque significa etiqueta en ingl¨¦s, y que sabe pronunciar hasta nuestra t¨ªa la del pueblo¡ª se ha convertido en el s¨ªmbolo de la comunicaci¨®n moderna. En Twitter, los hashtags informan sobre los temas m¨¢s seguidos en tiempo real (los famosos trending topics) por los usuarios, que son m¨¢s de 330 millones en todo el mundo; en Espa?a, una media aproximada de 11 millones. Recorrer lo acontecido en esta plataforma de microblogging a lo largo del a?o que se acaba puede esbozar un retrato apresurado de la sociedad espa?ola.

Empecemos por el tuit m¨¢s retuiteado (valga la redundancia): ¡°Por respeto a las v¨ªctimas y a sus familias por favor NO compartas im¨¢genes de heridos en el atropello de #Ramblas de Barcelona¡±. Era la tarde del 17 de agosto. La inspectora Carolina Gonz¨¢lez, community manager de la Polic¨ªa Nacional (con m¨¢s seguidores que el FBI), acababa de comer cuando vio en Twitter que ¡°algo raro estaba pasando en Barcelona¡±. A los 15 minutos, ?@?policia publicaba el primer mensaje. La informaci¨®n deb¨ªa ser ¨²til para el ciudadano: ¡°Hay que ser ¨¢gil y a la vez calmar a la poblaci¨®n¡±. Y advirti¨®: ¡°Si difundes ciertas fotograf¨ªas, interfieres en el trabajo de los agentes¡±. De ah¨ª la importancia del famoso mensaje.

De las 10 cuentas con m¨¢s menciones en Espa?a, 5 pertenecen a pol¨ªticos. Se habla de desafecci¨®n de los ciudadanos hacia sus representantes, pero esto refleja que ¡ªpara bien o para mal¡ª s¨ª que importa lo que escriban

De las 10 cuentas con m¨¢s menciones en Espa?a, 5 pertenecen a pol¨ªticos. Se habla de desafecci¨®n de los ciudadanos hacia sus representantes, pero esto refleja que ¡ªpara bien o para mal¡ª s¨ª que importa lo que escriban en los (ahora) 280 caracteres. M¨¢s en este a?o, con el desaf¨ªo independentista catal¨¢n y las primarias socialistas. El number one es Carles Puigdemont, seguido por Pedro S¨¢nchez, Mariano Rajoy, Pablo Iglesias y Gabriel Rufi¨¢n. A veces parece que Twitter defina la agenda pol¨ªtica. ¡°Si quieres saber de qu¨¦ habla la gente, te metes y lo ves¡±, dice Ignacio Urquizu, soci¨®logo y diputado del PSOE. El riesgo es que a los pol¨ªticos les pueden llegar a afectar tanto los comentarios como para que no sean capaces de tomar decisiones ni llegar a acuerdos. ¡°Hay que poner distancia. Las redes sociales influyen tanto que sesgan la pol¨ªtica¡±, reconoce Urquizu. ¡°Y tambi¨¦n hay cierta pereza intelectual que explica este auge: es m¨¢s f¨¢cil leer un par de tuits que un libro¡±.

Aunque tambi¨¦n se puede hacer ficci¨®n. Que se lo digan a Manuel Bartual, que arras¨® en verano con una inquietante historia sobre sus vacaciones narrada a base de tuits. ¡°Era la hora de la siesta. Me conect¨¦ y se me ocurri¨® matar as¨ª el tiempo. Nunca pens¨¦ que tendr¨ªa tanta repercusi¨®n¡±, dice Bartual, ilustrador y dise?ador gr¨¢fico de 38 a?os. Otro participante en el relato interactivo global fue Gerard Piqu¨¦, el deportista que m¨¢s debate ha generado en Espa?a. Al futbolista catal¨¢n se le puede aplicar el dicho (o el tuit): ¡°Cada vez que habla, sube el pan¡±. Y encantado con su audiencia est¨¢ @?diostuitero, un abogado que ha hecho del humor religi¨®n para colarse en el top 10. ¡°A la gente le hace gracia leer ¡®Dios te ha seguido¡¯. Es una experiencia religiosa¡±. Y tanto. Junto con otros como @norcoreano, ha fundado la Agencia Plop, donde ense?an a las empresas c¨®mo gestionar perfiles sociales. ?Cree @?diostuitero que lo que acontece en la plataforma nos retrata como sociedad? ¡°Para nada. Creo que cada vez es mayor la diferencia. Si se votara solo en Twitter, el presidente ser¨ªa Alberto Garz¨®n¡±. Puede que la red social sobredimensione la realidad, pero tambi¨¦n hay que reconocerlo: engancha. ?Feliz a?o tuitero!?