Antes
Admirables los que est¨¢n en el tiempo sin pensar en ¨¦l
Antes de que todo esto se termine. Antes de que cierren la casa y vendan los muebles y regalen los libros. Antes de que se repartan los cosm¨¦ticos y los zapatos. Antes de que arrojen las cacerolas a la basura. Antes de que vac¨ªen las alacenas, de que se lleven las especias, los fideos. Antes de que se terminen los d¨ªas felices y las tardes de domingo. Antes de la ¨²ltima de las madrugadas. Antes del final de la angustia. Antes de que se acaben el sexo sin amor y el amor sin sexo. Antes de que la ropa se pudra en los placares. Antes de que descuelguen los cuadros y cubran los sillones con lienzos y cierren las ventanas para siempre. Antes de que quemen las fotos. Antes de que se resequen los felpudos, de que se oxiden las cortinas en sus rieles. Antes de que se terminen la curiosidad, los huesos, el h¨ªgado y las c¨®rneas. Antes de que se sequen todas las plantas del balc¨®n. Antes de que no haya m¨¢s nieve, ni colores, ni tr¨®picos. Antes del final de todas las selvas, de todos los mares, de todos los reflejos en el agua. Antes del ¨²ltimo poema. Del final de las veredas y las calles. Del fin de todos los paseos. Antes del adi¨®s a todos los aeropuertos y todos los aviones y todas las ciudades y todos los caf¨¦s con vidrios empa?ados. Antes de la cancelaci¨®n de todas las discusiones, de todos los argumentos, de todas la furias, de todos los desprecios. De todas las met¨¢licas ansiedades. Antes del fin de los gritos, de la desolaci¨®n y de la culpa. Antes de la ¨²ltima agenda, del ¨²ltimo viernes, del ¨²ltimo bar, del ¨²ltimo baile. Antes de que se apaguen todas las c¨²pulas y todas las pantallas. Antes de que las polillas se coman los restos de la lana y de la almohada. Antes del final de las mascotas. Antes, mucho antes: hay que vivir. ?Pero c¨®mo? ?C¨®mo? ¡°Qu¨¦ admirable?/ el que no piensa ¡®la vida huye¡¯?/ cuando ve un rel¨¢mpago¡±, escribi¨® Basho. Admirables los que est¨¢n en el tiempo sin pensar en ¨¦l.
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