Accidentado inicio del nuevo juicio a Bill Cosby

Algunas cosas no han cambiado. El mismo tribunal, el mismo juez, la misma v¨ªctima y el mismo acusado. Pero el segundo juicio contra Bill Cosby por drogar y abusar sexualmente hace 14 a?os de Andrea Constand en su mansi¨®n a las afueras de Filadelfia es diferente, por el ¨ªmpetu del movimiento #MeToo, por las nuevas testigos que usar¨¢ la acusaci¨®n en su contra y porque tiene como abogado a Tom Mesereau, el mismo que defendi¨® a Michael Jackson. Y mucha tensi¨®n.

Cosby, que mantuvo siempre su inocencia pese a las acusaciones hechas p¨²blicas por 60 mujeres, es la primera celebridad que se enfrenta a un juicio en la era de #TimesUp. Al entrar al tribunal, la polic¨ªa arrest¨® a una mujer en topless que se abalanz¨® sobre ¨¦l mientras una decena de manifestantes gritaban Women?s Lives Matters (la vida de las mujeres importa). Despu¨¦s se supo que se trataba de una mujer que hab¨ªa participado a?os atr¨¢s en La hora de Bill Cosby, serie protagonizada por el actor. "El objetivo era que se sintiera inc¨®modo", explic¨®, "es lo que hizo durante d¨¦cadas con las mujeres". Por su parte, Andrea Constand, cuyas declaraciones sostienen la acusaci¨®n contra el actor y a quien conoci¨® cuando trabajaba para el equipo de baloncesto de la Universidad de Temple, se ausent¨®.

Bill Cosby entr¨® minutos despu¨¦s en la sala con semblante serio, vistiendo traje marr¨®n oscuro con rayas rosadas y corbata p¨²rpura. La intenci¨®n del juez Steven O?Neill era ir directo a los argumentos iniciales de las partes. Pero tuvo que aplazar la vista unas horas porque la defensa pidi¨® que se retirada a un miembro del jurado al que otro integrante escuch¨® decir que el acusado era culpable.

La defensa ya prob¨® durante la preparaci¨®n del juicio con todo tipo de t¨¢cticas para dilatarlo. Intent¨® que el juez se apartara del proceso alegando que su mujer es una empleada social y activista de un grupo que iba a organizar una protesta contra Cosby. Y despu¨¦s, durante la selecci¨®n del jurado, argument¨® incluso que se estaban excluyendo a hombres blancos mayores de 50 a?os de edad.

Son dos detalles que evidencian la vulnerabilidad de Bill Cosby en la era del #MeToo. En el proceso de selecci¨®n de jurado la semana pasada sus abogados ya trataron de filtrar al m¨¢ximo todos los miembros que pudieran estar influidos por el movimiento #MeToo o por el innumerable n¨²mero de casos de abusos que afloraron en el mundo del entretenimiento, en una clara presi¨®n para buscar a personas imparciales.

Los doce estar¨¢n aislados en un hotel cercano al tribunal, no podr¨¢n usar las redes sociales ni seguir las noticias. ¡°Esperamos que sean imparciales y justos¡±, coment¨® el portavoz del comediante, Andrew Wyatt, ¡°queremos que borren todo lo que hayan podido escuchar fuera del tribunal¡±. El juicio podr¨ªa dura un mes, advirti¨® el magistrado, que declar¨® el anterior nulo tras cinco d¨ªas de deliberaciones.

Bill Cosby tendr¨¢ que afrontar en la repetici¨®n del juicio las declaraciones de cinco mujeres que est¨¢n dispuestas a testificar en su contra. Las cinco comparten historias similares, que seg¨²n la acusaci¨®n corroboran el relato de Andrea Constand de que fue incapacitada antes de que la penetrara con sus dedos. As¨ª quieren demostrar que es un depredador sexual, que sigui¨® un patr¨®n planificado.

En el primero juicio, que se declar¨® nulo en junio, lo hizo una. Y la defensa, de momento, ha logrado tres argumentos que sirven para sustentar su estrategia de presentar a la v¨ªctima como una mentirosa: Subir¨¢ al estrado Marguerite Jackson, una antigua compa?era de trabajo a la que Constand cont¨®, antes de acudir a la polic¨ªa, que esperaba sacarle suficiente dinero al actor como para poder montar un negocio. Tambi¨¦n podr¨¢ exponer ante el jurado los t¨¦rminos del acuerdo extrajudicial que Cosby pact¨® con Constand en 2006, desconocidos hasta ahora, y tambi¨¦n ha evitado que se pueda utilizar el testimonio que hizo el actor en el proceso civil admitiendo que en 1970 facilit¨® una sustancia a una joven de 19 a?os antes de tener sexo con ella, una pieza importante para la acusaci¨®n en un juicio sin pruebas.

Cosby se enfrenta a 10 a?os de c¨¢rcel por cada uno de los tres cargos presentados en su contra. Los consultores legales admiten que el #MeToo provoc¨® un cambio de actitud del p¨²blico hacia los casos de abuso sexual y eso puede hacer que haya miembros del jurado que sean hostiles hacia la estrella. Pero admiten que igualmente puede provocar que se tenga simpat¨ªa hacia ¨¦l, si entienden que se le acusa injustamente.