Los ping¨¹inos que han tumbado a dos ministros
Un proyecto minero en Chile que prev¨¦ producir 12 millones de toneladas de hierro al a?o para China desata un terremoto pol¨ªtico por su cercan¨ªa a una reserva marina ¨²nica en el mundo
¡°Yo he comido ping¨¹ino, en escabeche¡±, grita el pescador Salvador Vergara, de 49 a?os, para hacerse o¨ªr sobre el estruendo del motor de su embarcaci¨®n. ¡°Con cebollita est¨¢ exquisito¡±, recuerda. Vergara circunnavega la isla chilena de Choros, en el coraz¨®n de la Reserva Nacional Ping¨¹ino de Humboldt, el ¨²ltimo gran basti¨®n de la especie en el planeta. En 1990, cuando se cre¨® la reserva, estos peque?os ping¨¹inos, con una franja negra en el pecho, se serv¨ªan estofados o en escabeche y estaban al borde de la extinci¨®n. Hoy se han recuperado hasta llegar a los 16.000 ejemplares y su fuerza es tal que han conseguido algo inaudito: la dimisi¨®n de dos ministros.
Vergara vive en Punta de Choros, una tranquila comunidad de pescadores en la costa del norte de Chile. Es un lugar ¨²nico en el mundo. Por sus aguas pasa la corriente de Humboldt, una autopista submarina que arrastra nutrientes desde la Ant¨¢rtida hasta el Ecuador. Ante las tres islas que forman la Reserva Nacional Ping¨¹ino de Humboldt, el agua de las ricas corrientes profundas asciende hasta la superficie, regalando un banquete para multitud de especies oce¨¢nicas. En la reserva viven delfines nariz de botella, chungungos (unas diminutas nutrias) y leones marinos. Y por sus aguas pasa el gigante del mar: la ballena azul, de hasta 180 toneladas, acompa?ada por ballenas de aleta y jorobadas. Pero este para¨ªso, seg¨²n alerta Vergara, est¨¢ amenazado. ¡°Vivimos de la pesca y del turismo. Si viene Dominga, estaremos de brazos cruzados¡±, sostiene.
Dominga es un proyecto de la empresa chilena Andes Iron para levantar una gigantesca mina a cielo abierto, capaz de producir cada a?o 12 millones de toneladas de concentrado de hierro y 150.000 toneladas de concentrado de cobre, que abastecer¨ªan al voraz mercado chino a trav¨¦s de un nuevo puerto con un muelle de 1,2 kil¨®metros. La palabra Dominga est¨¢ pintada en todas las paredes de Punta de Choros: ¡°Defendamos el mar del proyecto asesino Dominga¡±, ¡°No a Dominga: Punta de Choros no se vende¡±. Camino de los pueblos del interior, a tan solo unos kil¨®metros de la costa, el discurso sufre una metamorfosis. Sobre el asfalto de la Carretera Panamericana ¡ªque cruza Chile de norte a sur¡ª cuelgan carteles de los puentes: ¡°Miner¨ªa y medio ambiente pueden coexistir, S? a Dominga¡±, ¡°Contra la desnutrici¨®n, s¨ª a Dominga¡±.
La Comuna de La Higuera, a la que pertenece la reserva de ping¨¹inos, est¨¢ partida en dos. La poblaci¨®n de la costa vive de la pesca y de los 80.000 turistas que visitan cada a?o el paraje. La mina, denuncian, acabar¨ªa con su modo de vida. Los habitantes del interior, m¨¢s empobrecidos, ven el proyecto minero como una tabla de salvaci¨®n. En la Comuna de La Higuera, con 4.600 habitantes, el porcentaje de poblaci¨®n en situaci¨®n de pobreza supera el 22%, casi el doble que en el resto del pa¨ªs. La mina de hierro, con una inversi¨®n de 2.500 millones de d¨®lares, dar¨ªa trabajo a unas 1.500 personas durante su vida ¨²til, unos 27 a?os.
¡°Obviamente, podr¨ªa haber un derrame de hidrocarburos o de aceites, podr¨ªan introducirse especies ex¨®ticas invasoras, y esto podr¨ªa afectar a la nidificaci¨®n de este ping¨¹ino y a la vida de los mam¨ªferos marinos¡±, alerta Pablo Arr¨®spide, administrador de la Reserva Nacional Ping¨¹ino Humboldt. ¡°La reserva es un motor econ¨®mico bastante importante para la regi¨®n, ya que el turismo ha crecido exponencialmente en estos ¨²ltimos a?os¡±, celebra.
¡°La minera Dominga ha pasado a ser una amenaza constante, con hostigamiento, con presiones a nuestros asociados, ofreci¨¦ndoles algunos beneficios, como motores y botes, y pr¨¢cticamente dividiendo a nuestra comunidad. Ha hecho un trabajo de dividir para poder reinar¡±, asegura el pescador ?scar Avilez, mientras pasea por una playa cubierta por conchas de loco, un suculento molusco local. Avilez es portavoz de la Cooperativa Pesquera Punta Norte. Su organizaci¨®n, con 150 asociados, exporta cada a?o un mill¨®n de unidades de loco, principalmente al mercado asi¨¢tico, seg¨²n sus cifras.
Encaramado a una barca azul y rodeado por sus dos hijas y un peludo cachorro de perro, Josu¨¦ Ramos, presidente de la Cooperativa Los Choros, tambi¨¦n es tajante: ¡°Nosotros como pescadores estamos en contra de este proyecto de la minera Dominga, porque ellos contemplan un megapuerto. Y en Chile la historia de los megapuertos que abastecen a las mineras tiene puras cat¨¢strofes a nivel nacional¡±.
El ge¨®logo Armando Si?a, vicepresidente de Andes Iron, sonr¨ªe cuando escucha las cr¨ªticas hiperb¨®licas a su proyecto. ¡°Primero que nada, estamos a 30 kil¨®metros de la Reserva Nacional Ping¨¹ino de Humboldt. Es una distancia bastante considerable¡±, explica en el paraje deshabitado en el que se levantar¨ªa la mina. La empresa ha organizado una campa?a publicitaria con el eslogan ¡°El mejor proyecto minero del mundo¡±. Al puerto de Dominga, argumenta Si?a, solo llegar¨ªan 56 barcos al a?o, sin cargar ni descargar combustible. ¡°A 10 kil¨®metros de la costa ya hay una ruta de navegaci¨®n por la que pasan 1.600 buques al a?o¡±, asegura.
La Reserva Nacional Ping¨¹ino de Humboldt se ha convertido en el epicentro de una guerra mundial: la que libran el desarrollo econ¨®mico y la conservaci¨®n del medio ambiente. En agosto de 2017, hubo sangre en esta batalla. Tras una serie de veredictos contradictorios de las diferentes autoridades medioambientales, la mina Dominga lleg¨® al Comit¨¦ de Ministros. El Gobierno de la socialista Michelle Bachelet rechaz¨® el proyecto, pero dos ministros ¡ªRodrigo Vald¨¦s, de Hacienda, y Luis Felipe C¨¦spedes, de Econom¨ªa¡ª anunciaron su dimisi¨®n inmediata como se?al de protesta. "Algunos no tienen el crecimiento dentro de las prioridades m¨¢s altas y les cuesta, a veces, tener una compatibilizaci¨®n de eso con otros objetivos que son muy importantes tambi¨¦n", declar¨® Vald¨¦s.
¡°Todo esto ha causado un gran revuelo en Chile, porque en el fondo se interpreta que este rechazo tiene razones m¨¢s bien pol¨ªticas que t¨¦cnicas o ambientales¡±, afirma el directivo de Andes Iron. La organizaci¨®n de conservaci¨®n marina Oceana ha aireado los v¨ªnculos entre el proyecto minero y la familia del pol¨ªtico conservador Sebasti¨¢n Pi?era, rival de Bachelet y nuevo presidente de Chile desde el 11 de marzo de 2018. La propia minera ha reconocido que la familia Pi?era ¡°particip¨® pasivamente¡± en los inicios del proyecto, en 2010, a trav¨¦s de un fondo de inversi¨®n. Hoy, el 75% de Andes Iron pertenece a la familia del empresario chileno Carlos Alberto D¨¦lano, amigo desde hace 40 a?os de Pi?era.
El futuro de la mina, y de la Reserva Nacional Ping¨¹ino de Humboldt seg¨²n los m¨¢s agoreros, depende ahora de la Justicia. En abril, el Tribunal Ambiental de Antofagasta anul¨® la decisi¨®n de rechazar el proyecto, ante la existencia de irregularidades en el procedimiento. Pero los abogados de Oceana y de otras organizaciones de ecologistas y pescadores presentaron el 16 de mayo un recurso de casaci¨®n ante la Corte Suprema solicitando un nuevo rechazo a la mina Dominga.
Magaly B¨¢ez, una joven de la Comuna de la Higuera, resume la desesperaci¨®n de los partidarios de la mina: ¡°Mi padre es pescador y yo estoy a favor del proyecto Dominga, porque nosotros necesitamos un desarrollo en la comuna. Hemos estado abandonados m¨¢s de 40 a?os por el Gobierno. Y vemos una oportunidad de desarrollo y de trabajo para la gente, para nosotros y para nuestros hijos¡±.