Un polvor¨ªn social amenaza la conquista de Mercurio
Las protestas por los asesinatos y el paro en la Guayana Francesa, que ya bloquearon la base espacial europea el a?o pasado, planean sobre la misi¨®n al planeta m¨¢s pr¨®ximo al Sol
El primer sat¨¦lite franc¨¦s se llamaba Ast¨¦rix. Fue lanzado el 26 de noviembre de 1965 desde Hammaguir, una base espacial francesa al borde del desierto del S¨¢hara que fue evacuada apenas dos a?os despu¨¦s, cuando Argelia decidi¨® por las armas dejar de ser una colonia maltratada por Francia. El a?o pasado, algunas personas se acordaron de este ins¨®lito episodio de la descolonizaci¨®n. Una muchedumbre, capitaneada por decenas de hombres cubiertos con pasamonta?as, cort¨® las carreteras de acceso a la base de Kourou, el actual puerto espacial europeo, situado en plena selva sudamericana, en la Guayana Francesa. El centro, desde el que se han lanzado medio millar de sat¨¦lites desde hace medio siglo, permaneci¨® sitiado entre el 20 de marzo y el 22 de abril de 2017. La puerta europea al espacio se cerr¨® con un portazo.
¡°La situaci¨®n se ha calmado pero, si no se afronta con seriedad, las protestas pueden recomenzar¡±, afirma en voz baja el ingeniero guayan¨¦s Pepin Guillaume, a unos pocos metros de BepiColombo, la primera nave europea que estudiar¨¢ Mercurio, el planeta menos explorado del sistema solar. Guillaume es el director de operaciones de la misi¨®n, cuyo lanzamiento est¨¢ previsto para octubre de 2018. ¡°Nada ha cambiado realmente desde el a?o pasado, as¨ª que las razones que llevaron a las protestas siguen ah¨ª¡±.
Esas ¡°razones¡± son aplastantes. En Guayana, clasificada como una regi¨®n ultraperif¨¦rica de la UE, el 22% de la poblaci¨®n est¨¢ en paro, frente al 8,9% del conjunto de Francia. El PIB per c¨¢pita es de 15.813 euros, la mitad que en Francia y menos de un tercio que en la regi¨®n parisina. Y Guayana, con apenas 250.000 habitantes, es el territorio m¨¢s sangriento del pa¨ªs, con 42 homicidios en 2016. El puerto espacial europeo est¨¢ situado en un polvor¨ªn.
El 11 de febrero de 2017, a las tres de la tarde, un ladr¨®n entr¨® en una lavander¨ªa de Cayena, la capital de Guayana, y asalt¨® a Herv¨¦ Tambour, un hombre de 30 a?os que estaba lavando su ropa. Ante la resistencia de Tambour a entregar su collar de oro, el agresor le peg¨® dos tiros.?El asesinato fue la gota que colm¨® el vaso. Los ciudadanos tomaron las calles y una huelga general bloque¨® el pa¨ªs durante cinco semanas. El Gobierno de Fran?ois Hollande prometi¨® mil millones de euros en inversiones urgentes y apacigu¨® las protestas, pero el nuevo presidente, Emmanuel Macron, ha rebajado las expectativas. ¡°Yo no soy Pap¨¢ Noel, porque los guayaneses no son ni?os¡±, afirm¨® durante una visita en octubre.
¡°La crisis social ha empeorado. Todos los bar¨®metros est¨¢n en rojo: sanidad, seguridad, educaci¨®n, econom¨ªa, tr¨¢fico de drogas. Los conflictos sociales se han multiplicado desde la huelga del a?o pasado: profesores, m¨¦dicos, pescadores¡±, advierte la antrop¨®loga Isabelle Hidair-Krivsky, de la Universidad de Guayana.
El Centro Espacial Guayan¨¦s est¨¢ en la primera l¨ªnea de fuego. Su actividad representa el 16% del PIB de toda la regi¨®n. Da empleo directo a 1.700 personas e indirecto a otras 2.700, as¨ª que el 7% de la poblaci¨®n activa de Guayana est¨¢ vinculada al sector espacial. ¡°Si quieres que la sociedad escuche tus reivindicaciones, tocas donde hace da?o. Y aqu¨ª hace da?o¡±, resume el ingeniero italiano Stefano Bianchi, responsable del desarrollo de lanzadores en la Agencia Espacial Europea (ESA), la organizaci¨®n que ha pagado el viaje de EL PA?S a Kourou.
La ubicaci¨®n de la base no es casual. Tras la Guerra de Independencia de Argelia y el abandono forzoso del centro espacial al pie del S¨¢hara, el Gobierno del general Charles de Gaulle eligi¨® Guayana, su posesi¨®n en Sudam¨¦rica, como nueva lanzadera. Gracias a su situaci¨®n, apenas 500 kil¨®metros al norte del Ecuador, la rotaci¨®n de la Tierra ejerce de honda y suministra hasta un 30% m¨¢s de impulso que en otras bases espaciales. Sin ciclones ni terremotos, es un lugar perfecto para lanzar cohetes al espacio. Desde 1976, Kourou ¡ªhabitado por jaguares, monos y osos hormigueros¡ª es el puerto de despegue de la Agencia Espacial Europea.
¡°El centro espacial se construy¨® en 1965 sobre el emplazamiento del pueblo de Malmanoury, de donde 651 personas fueron desahuciadas. La mayor¨ªa eran aut¨®ctonas. La expropiaci¨®n de los primeros habitantes de Guayana es una imagen simb¨®licamente muy fuerte¡±, sostiene Hidair-Krivsky. La antrop¨®loga recuerda que los barrios de Kourou se distribuyeron con ¡°una jerarqu¨ªa socio-racial: ingenieros y profesores franceses de la Metr¨®poli en el centro y al borde del mar, los obreros extranjeros en la periferia y los amerindios en las aldeas pegadas a la carretera¡±. A juicio de Hidair-Krivsky, la imagen del centro espacial es ¡°muy negativa¡± en Guayana.
La ingeniera Charlotte Beskow, jefa de la oficina de la ESA en Kourou, no est¨¢ de acuerdo con esta supuesta mala prensa. Beskow da charlas por los colegios para mostrar el valor que tiene la base para Guayana. ¡°El a?o pasado los manifestantes nos cogieron de rehenes porque era muy f¨¢cil, pero el centro espacial no es el motivo de las quejas: es la educaci¨®n, es la seguridad¡±, argumenta.
¡°Yo creo que el sector espacial es una oportunidad para Guayana, pero somos un territorio en desarrollo, con una alta tasa de paro y una poblaci¨®n muy joven, lo que hace que haya necesidades inmensas. El espacio no puede cubrir todas las necesidades de la Guayana¡±, opina Lynda Obydol, una parisina de madre guayanesa que lleva 13 a?os trabajando en el centro espacial, para la empresa brit¨¢nica de servicios Serco. El problema, afirma, es el monocultivo del espacio. ¡°Las Antillas son muy dependientes del turismo y nosotros somos muy dependientes del sector espacial. Hay que desarrollar otras actividades econ¨®micas, pero aqu¨ª la gente tiene un poco de miedo al desarrollo econ¨®mico. Piensan que se va a destruir la naturaleza¡±, reflexiona.
Obydol recuerda la existencia de un pol¨¦mico proyecto, bautizado Monta?a de Oro, para extraer 85 toneladas de oro en una mina a cielo abierto en el interior de Guayana. Las empresas promotoras, la canadiense Columbus Gold y la brit¨¢nica Nordgold, prometen 750 empleos directos. ¡°Tenemos riqueza minera, ?por qu¨¦ no la explotamos? Necesitamos construir carreteras, escuelas, hospitales. Las necesidades son inmensas y no puede venir todo el dinero del Estado¡±, defiende.
El ingeniero Ulrich Reininghaus es el responsable del proyecto de BepiColombo en la ESA. La nave, embalada, aterriz¨® en mayo en la selva sudamericana procedente del Centro Europeo de Investigaci¨®n y Tecnolog¨ªa Espacial, en Noordwijk (Pa¨ªses Bajos). Est¨¢ destinada a entrar en la ¨®rbita de Mercurio el 5 de diciembre de 2025, para realizar el mapa m¨¢s preciso de su superficie e investigar la existencia de agua helada en sus cr¨¢teres. ¡°Tenemos una ventana de lanzamiento que empieza el pr¨®ximo 5 de octubre y termina el 28 de noviembre. Si hay huelga durante unos d¨ªas o unas semanas, no importar¨ªa mucho¡±, conf¨ªa Reininghaus, que vive la conquista europea de Mercurio con tranquilidad. ¡°Cuando lleguemos estar¨¦ ya jubilado, espero¡±.