Otra llamada a Maduro

La reacci¨®n oficial al atentado contra Nicol¨¢s Maduro del pasado 4 agosto muestra que, m¨¢s que esclarecer unos hechos sobre los que hay mucha confusi¨®n, la voluntad del r¨¦gimen venezolano es proseguir la persecuci¨®n pol¨ªtica contra l¨ªderes de la oposici¨®n. Una estrategia que ha sido denunciada y condenada ya en numerosas ocasiones por organismos internacionales. El diputado opositor Juan Requesens, recluido en el penal de Helicoide, ha sido acusado de siete cargos: traici¨®n a la patria, terrorismo, asociaci¨®n para delinquir, posesi¨®n de armas y municiones y homicidio en grado de frustraci¨®n. Llama la atenci¨®n que todos estos cargos ¡ªque la Fiscal¨ªa, controlada por el Gobierno, est¨¢ preparando para celebrar un juicio en las pr¨®ximas semanas¡ª se sustenten en una prueba que no va a ser utilizada: un v¨ªdeo autoinculpatorio del propio Requesens, difundido ampliamente por el Gobierno de Maduro, cuya obtenci¨®n cuestionan familiares y oposici¨®n, que piden sea investigado por la justicia internacional. Adem¨¢s, hay otras seis personas detenidas por los mismos hechos cuyos procesos, sin embargo, han quedado separados del expediente incoado al diputado opositor.

Se trata, en suma, de un c¨²mulo de irregularidades en el procedimiento ¡ªentre los que se incluye la detenci¨®n extrajudicial y la violaci¨®n de la inmunidad parlamentaria¡ª que han caracterizado los juicios a pol¨ªticos opositores al r¨¦gimen. Todo esto se produce en un ambiente de caos econ¨®mico y de precariedad material de las que decenas de miles de venezolanos tratan de escapar hasta el punto de haber provocado una crisis de refugiados en Sudam¨¦rica, algo totalmente impensable hace pocos a?os. La huelga general convocada para ma?ana por la oposici¨®n ¡°contra la hiperinflaci¨®n y el hambre¡± es la en¨¦sima llamada de atenci¨®n a Maduro para que abandone su obcecaci¨®n de seguir en el poder a cualquier precio y permita que Venezuela vuelva a la senda democr¨¢tica.