Terelu Campos: ¡°Ahora s¨¦ lo que es el miedo¡±
La comunicadora y personaje estrella de 'S¨¢lvame' y 'Las Campos' se debate entre el temor y la esperanza tras su reca¨ªda del c¨¢ncer de mama
Ocurre algo curioso. De pie, Terelu Campos parece lo que es: una mujer menuda mucho m¨¢s fr¨¢gil y menos rotunda de lo que aparece en pantalla. Sentada cara a cara, crece dos palmos. Carisma no le falta. Te hace c¨®mplice, te lleva a su terreno. Se cubre y se le ve todo al tiempo. La simpat¨ªa y la reserva. El sobrante y las carencias. La esperanza y el miedo. Hablamos en su camerino de Telecinco antes de entrar ella en directo y pintadas ambas como puertas, por lo que decidimos hacerle momos a un espejo estir¨¢ndonos las respectivas arrugas como broma para el v¨ªdeo. ¡°Nunca me he hecho nada, pero me quitar¨ªa todo esto¡±, dice, mes¨¢ndose lo blando de la sotabarba. Al d¨ªa siguiente, S¨¢lvame anunciaba que Terelu desaparec¨ªa de antena y reaparecer¨ªa el mi¨¦rcoles tras pasar por un recauchutado est¨¦tico. El circo, y la vida, y la bolsa contin¨²an.
?Qu¨¦ piensa al despertarse?
Que otra vez me duelen mucho los huesos por la medicaci¨®n contra el c¨¢ncer. Se me hab¨ªa olvidado que llevaba un a?o mejor, y ahora voy para atr¨¢s. Pero te resignas porque te va la vida en ello.
?Y al acostarse?
En dormir. Me cuesta la vida. Mi sue?o es dormir cuatro horas.
?Cu¨¢nto mide su coraza?
Varios dedos. Creo que se me ve m¨¢s gorda de lo que soy por toda la coraza que llevo puesta.
Bueno, y por los churros.
Si vieras por un agujerito lo que como, no lo creer¨ªas. Pero parece que la gente se lo pasa pipa vi¨¦ndome, y en la tele me como un churro y me cuentan veinte. No deja de ser un espect¨¢culo.
M¨¢s humana que divina
Teresa Lourdes Borrego Campos (M¨¢laga, 1965), Terelu para los siglos XX y XXI, vuelve a abrirse en canal en 'S¨¢lvame' y 'Las Campos' tras una reca¨ªda de su c¨¢ncer de mama, y ni confirma ni desmiente su colaboraci¨®n con la nueva temporada de la serie de culto 'Paquita Salas'. ¡°Soy una cajita de sorpresas¡±, advierte. O sea, que la veremos en pantalla.
La coraza no le impide mostrar sus complejos en pantalla.
M¨¢s de lo que yo quisiera y menos de lo que crees. Muestro exactamente lo que creo que le debo a mi oficio. Si pido a los dem¨¢s que se desnuden en mi programa, mi obligaci¨®n es acompa?arles.
?Ver¨ªa usted 'Las Campos' si no fuera una de las Campos?
S¨ª, porque me parece demencial y divertido. Mucha gente se ve reflejada, es parte de la gracia.
?No tiene sentido del rid¨ªculo?
Exacerbado, pero mis a?os en S¨¢lvame me han ense?ado a relativizar, nada es tan importante.
Se le acusa de rentabilizar su c¨¢ncer al cobrar por contarlo.
No es cierto. Hay algo que nadie te puede arrebatar, que es la tranquilidad de conciencia. Si supierais lo que me daban por contarlo en otro medio os escandalizar¨ªais. Ese dineral me hubiera arreglado la vida en un momento en que no sab¨ªa si iba a poder volver a trabajar, y no quise.
?Pasar de ser portada en 'Intervi¨²' a no mirarse en el espejo, como dijo, arrasa la autoestima?
S¨ª, pero porque te la arrasan los dem¨¢s. Cuando no tienes la seguridad que has tenido siempre, hay quien se te tira a la yugular. Y es muy triste que muchas veces somos mujeres las que nos tiramos a la de otras. Me cuesta decir esto, pero si supi¨¦ramos el poder que les damos a los hombres con eso, no nos lo har¨ªamos.
?Cu¨¢ntos latigazos se da al d¨ªa?
Muchos. Tengo la fusta bien peladita. Soy mi peor enemiga.
?Hay d¨ªas que no se aguanta?
Muchos. Y, si no me aguanto ni yo ?qui¨¦n va a aguantar a m¨ª?
Sin embargo, ha sido usted muy disfrutona de la vida. ?Ha renunciado a com¨¦rselo todo, y no hablo de churros?
Lo soy, y me lo he comido todo, s¨ª, pero, ?sabes? estoy en una etapa de absoluta tranquilidad. Hay veces en los que una mujer puede tener ansiedad por no tener pareja. Y de pronto, hay un momento de tu vida en que dices, ahora quiero mi cama para m¨ª, y mi sal¨®n para todo el mundo. Ahora quiero quererme yo un poco m¨¢s de lo que me he querido.
?Qu¨¦ no conocemos de Terelu que no hayamos visto en la tele?
Mi miedo. Yo viv¨ªa sin miedo hasta hace muy poco, y ahora s¨¦ lo que es el miedo de verdad. No lo tuve en mi primer c¨¢ncer, s¨ª preocupaci¨®n e incertidumbre, pero no miedo. Ahora, s¨ª. Miedo a que esto se acabe. Miedo al sufrimiento de quienes quieres. Lucho, porque el miedo paraliza, y tengo que tomar decisiones.
?En su c¨¢ncer manda usted?
Totalmente. Mandan los m¨¦dicos, manda la ciencia, manda mi cuerpo. Pero ser¨¦ yo quien tome decisiones. Apoyada, pero yo sola.
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