Un edificio que muestra las costuras

Eficaz y silencioso, as¨ª describen los socios de Estudio Hago, Antonio ?lvarez-Cienfuegos y Emilio Delgado Martos, el proyecto que ampli¨® el Museo de Bellas Artes de Badajoz (MUBA). El museo, uno de los m¨¢s antiguos de la ciudad, surgi¨® de las donaciones que hac¨ªan los artistas locales tras recibir ayudas para poder trabajar. As¨ª, en 1920, la primera exposici¨®n mostr¨® 58 pinturas. Y hoy, obras de Ortega Mu?oz, Juan Barjola o Francisco de Zurbar¨¢n conviven con lienzos de otros artistas nacionales como Guti¨¦rrez Solana, Sorolla o Eduardo Rosales.

Por eso resulta did¨¢ctico fijarse en esta intervenci¨®n que, de un lado, se anuncia marcando un lugar ya muy marcado: el centro hist¨®rico de Badajoz, y que, a la vez, vertebra el futuro crecimiento del barrio ahondando en el juego pl¨¢stico-espacial que describe e imagina nuevas conexiones entre los edificios existentes.

Trato de explicarme: el proyecto quiere ser un eje vertebrador, una intervenci¨®n estrat¨¦gica que haga dialogar los contenedores de la ciudad ¡ªlos edificios¡ª con su vida ¡ªel uso y la cultura¡ª. Por eso es el patio el que adquiere protagonismo en su intervenci¨®n. Ese vac¨ªo es el nexo que relaciona hasta cuatro edificios y que evidencia esa uni¨®n. Ese hilo conductor est¨¢ subrayado por un material ¡ªel cemento pretensado perforado¡ª que, como un estampado escrito en clave, env¨ªa el mensaje de que la novedad puede ser una propuesta. As¨ª, el nuevo edificio tiene forma de L y reacciona frente a un inmueble protegido al que suma un marco inusual en el que las esculturas de Juan de ?valos o de Pedro Torre-Isunza adquieren nueva vida: se vuelven m¨¢s cercanas, m¨¢s accesibles. Hasta m¨¢s comprensibles.

Delgado y ?lvarez-Cienfuegos abrieron su estudio en Madrid despu¨¦s de formarse en numerosos frentes. El primero se doctor¨® en humanidades tras acabar arquitectura. El segundo, tras estudiar en Sevilla, trabaj¨® con Cruz y Ortiz, Campo Baeza o N¨²?ez Ribot, suficientes estudios como para contrastar pareceres antes de decidirse a actuar.

Con esa preparaci¨®n, se entiende que el proyecto del MUBA sea una obra de reacci¨®n. Los edificios protegidos y las medianeras generan la misma respuesta: respeto y contenci¨®n. Pero tambi¨¦n las mismas propuestas: un nuevo punto de partida para unir, reinventar sin despreciar y potenciar lo existente.

Coste de la intervenci¨®n seg¨²n los arquitectos (PEM), 1.088, 85 euros por metro cuadrado.