Es posible otra Europa

"Si fue falsa la esperanza, los temores tambi¨¦n pueden mentir¡±. En estos momentos, Europa entera est¨¢ sacudida por tormentas, desde el Brexit hasta Ucrania y desde el populismo polaco hasta el desaf¨ªo de Italia a la UE. Pero varias de esas crisis son tambi¨¦n oportunidades. Es posible otra Europa.

Para empezar, el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, sigue articulando su ambiciosa visi¨®n de una UE m¨¢s fuerte en un mundo cada vez m¨¢s poseuropeo. Es cierto que a veces se parece m¨¢s al legendario ni?o holand¨¦s que tap¨® una fuga de un dique con el dedo que a Napole¨®n marchando a trav¨¦s de los Alpes, pero el lado bueno de esas situaciones es que su equipo est¨¢ aprendiendo a ser m¨¢s realista sobre sus objetivos. Por ejemplo, han dejado de lado sus sue?os de un movimiento En Marche en toda Europa para las elecciones de mayo en favor de un objetivo m¨¢s modesto, una agrupaci¨®n parlamentaria de los dem¨®cratas liberales actuales y las nuevas fuerzas de Macron. Un grupo as¨ª tendr¨ªa posibilidades de ser el segundo mayor en el Parlamento europeo.

Las perspectivas de los liberales proeuropeos han mejorado al elegir el Partido Popular Europeo (PPE) al conservador b¨¢varo Manfred Weber como spitzenkandidat para la presidencia de la Comisi¨®n Europea. En calidad de jefe parlamentario del PPE, Weber se ha empe?ado de forma injustificable en mantener al l¨ªder neoautoritario h¨²ngaro, Viktor Orb¨¢n, y su partido Fidesz, en el grupo. Weber no tiene la experiencia de gobierno que necesita la persona encargada de presidir la Comisi¨®n en un periodo especialmente complicado. De modo que su candidatura aumenta las posibilidades de que el nuevo presidente sea alguien distinto, m¨¢s brillante, din¨¢mico y experimentado.

El Reino Unido del Brexit est¨¢ superando a todos los pa¨ªses en caos y confusi¨®n, pero tambi¨¦n en este caso la crisis oculta una oportunidad

La fragmentaci¨®n de la pol¨ªtica alemana y el consiguiente ocaso del mandato de Angela Merkel como canciller tambi¨¦n pueden tener un aspecto positivo. Dado que es muy probable que los socialdem¨®cratas abandonen, en alg¨²n momento del pr¨®ximo a?o, una gran coalici¨®n a la que jam¨¢s deber¨ªan haberse incorporado, tenemos la perspectiva de un nuevo Gobierno alem¨¢n. El favorito actual para ser l¨ªder de los democristianos y canciller, Friedrich Merz, es m¨¢s conservador que Merkel, pero no cabe dudar de su compromiso europeo y atlantista. Annegret Kramp-Karrenbauer (conocida como AKK), su principal rival y la sucesora que preferir¨ªa Merkel, es suficientemente liberal como para encabezar una coalici¨®n Jamaica,de democristianos (color negro), dem¨®cratas liberales (amarillo) y verdes (por supuesto). Con cualquiera de estas variantes, Berl¨ªn tendr¨ªa un Gobierno interesado en ofrecer una respuesta m¨¢s sustancial a Macron.

En los tres ¨²ltimos a?os, el Gobierno polaco, del partido Ley y Justicia (PiS), ha intentado llevar el pa¨ªs a toda velocidad por la senda de Hungr¨ªa, de la democracia liberal a un autoritarismo h¨ªbrido. Pero la UE est¨¢ defendiendo el Estado de derecho en Polonia como nunca lo ha hecho en Hungr¨ªa. En las recientes elecciones a los gobiernos locales, el PiS sufri¨® un duro rev¨¦s, aunque no una derrota. En 2019, Polonia tendr¨¢ elecciones europeas y legislativas nacionales. A diferencia de Hungr¨ªa, Polonia sigue teniendo unas condiciones ¡ªpor ejemplo, verdadero pluralismo de medios de comunicaci¨®n¡ª que dan a los partidos de la oposici¨®n una oportunidad razonable de ganar. Muchos piensan que, si la oposici¨®n obtiene buenos resultados, es posible que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, regrese para presentarse como candidato a la presidencia nacional en 2020.

Pese a la dura competencia, el Reino Unido del Brexit est¨¢ superando a todos en caos y confusi¨®n en la situaci¨®n pol¨ªtica; pero tambi¨¦n en este caso, la crisis oculta una oportunidad. Si el acuerdo de Theresa May sobre la retirada cae derrotado en la votaci¨®n que llevar¨¢ a cabo el Parlamento brit¨¢nico en diciembre, aumentar¨¢ de forma considerable la probabilidad de que la C¨¢mara vuelva a poner la decisi¨®n en manos del pueblo con otro refer¨¦ndum. A pesar de los riesgos y las dificultades, una segunda consulta tendr¨ªa m¨¢s de un 50% de probabilidades de que los brit¨¢nicos votaran por permanecer en la UE. Qu¨¦ impulso tan extraordinario dar¨ªa ese resultado al proyecto de cooperaci¨®n de Europa desarrollado desde 1945.

El elemento com¨²n de todas estas crisis y oportunidades concretas est¨¢ en el peligro que corre la propia existencia de este proyecto, y los europeos son cada vez m¨¢s conscientes de ello. Despu¨¦s de d¨¦cadas de integraci¨®n europea, estamos presenciando la desintegraci¨®n europea. Y eso mueve los corazones y pone en marcha a la gente.

No tengo nada que ver con el doctor Pangloss. No creo que haya muchas probabilidades de que se produzca ninguno de estos posibles giros favorables. Pero no son imposibles. Parafraseando la letra del himno nacional polaco, Europa no est¨¢ perdida todav¨ªa, mientras estemos con vida.

Timothy Garton Ash es catedr¨¢tico de Estudios Europeos en la Universidad de Oxford.

Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia.