El barco que cuesta 100 millones tiene hasta campo de golf
Daniel Snyder, propietario de la embarcaci¨®n, es el propietario del equipo de f¨²tbol americano Washington Redskins, un club denunciado por abusos sexuales
El empresario Daniel Snyder es el ¨²ltimo multimillonario en comprar uno de esos yates que se parecen m¨¢s a una mansi¨®n flotante que a un barco. Su ¨²ltima adquisici¨®n, de 92 metros de eslora, a la que ha llamado Lady S, est¨¢ valorada en 100 millones de d¨®lares (88 millones de euros) tiene helipuerto, cuatro salas VIP, campo de golf, pistas de baloncesto, voleibol y f¨²tbol y la joya de la corona, un cine de dos pisos con tecnolog¨ªa IMAX ¡ªofrece la mejor experiencia de imagen y sonido¡ª que nunca antes hab¨ªa sido instalado en una embarcaci¨®n.
Para hacer realidad su capricho de tener el primer cine de lujo flotante, Snyder ha tenido que desembolsar 3 millones de d¨®lares extra (m¨¢s de 2¡¯6 millones de euros), seg¨²n detalla el Daily Mail. Jan-Bart Verkuyl, director ejecutivo de Feadship ¡ªempresa constructora del yate¡ª ha dicho al diario The Guardian que el dise?o de este barco ha sido ¡°especial e inusual¡± por contar con un requisito tan excepcional como un cine IMAX, motivo por el cual todo el barco ¡°fue dise?ado alrededor del propio cine¡±.
Uno de los retos ha sido lograr aislamiento ac¨²stico. Ni pod¨ªan escucharse los motores del barco dentro del cine ni deb¨ªa escaparse el sonido de la sala de cine al resto de estancias. La experiencia cinematogr¨¢fica ten¨ªa que ser perfecta. Parece que as¨ª ha sido y, a falta de unas ¨²ltimas pruebas en el mar y unos ajustes finales, ser¨¢ entregado a su due?o en primavera y a partir de entonces tendr¨¢ que abonar alrededor de 10 millones de d¨®lares anuales (8¡¯8 millones de euros) por su mantenimiento.
Synder se suma as¨ª a la moda cada vez m¨¢s extendida entre los multimillonarios de contar con su cine IMAX privado. La empresa que los dise?a, de hecho, ya tiene toda una l¨ªnea de negocio dedicada a construir este tipo de cines en residencias privadas, llamada IMAX Private Theatre, que los instala por un precio que oscila entre 400.000 y un mill¨®n de d¨®lares (entre 352.000 y 879.000 euros).
El yate no es la primera ostentaci¨®n en el mundo de las embarcaciones del empresario estadounidense, de 54 a?os, casado y con tres hijos. Con una fortuna de 1.200 millones de d¨®lares (m¨¢s de 1.000 millones de euros), en 2011 se compr¨® The Lady Anne, uno de los 100 yates m¨¢s grandes del momento, valorado en 70 millones de d¨®lares, seg¨²n The Washington Post.
Su fortuna tiene d¨¦cadas. La amas¨® con su propia compa?¨ªa de telecomunicaciones, Snyder Communications, que vendi¨® en 1996. Tres a?os despu¨¦s compr¨® el equipo de f¨²tbol americano Washington Redskins, la segunda franquicia m¨¢s valiosa de la NFL, la liga deportiva en la que compite, seg¨²n la revista Forbes. Su gesti¨®n no ha escapado a la pol¨¦mica. El equipo fue uno de los investigados por la periodista Amanda Hess, que denunci¨® el trato infrahumano al que son sometidas las cheerleaders que trabajaban por aquel entonces para el Washington Redskins.
Public¨® que deb¨ªan presentarse a los ¡°test de meneo¡±, una prueba en la que la chica se sit¨²a frente a su entrenadora y se agita para que esta compruebe que sus pechos, nalgas y brazos est¨¢n firmes. Tambi¨¦n deb¨ªan pasearse en bikini por casinos, sentarse en la falda de se?ores con dinero en torneos de golf, participar como ganchos en atracciones de feria y mantener unos est¨¢ndares de higiene y belleza que se especifican en un manual. Se les dec¨ªa cu¨¢ntas veces y en qu¨¦ establecimientos deb¨ªan hacerse la manicura (se lo pagaban ellas), c¨®mo mantener su higiene vaginal e incluso con qu¨¦ frecuencia cambiarse los tampones. El a?o pasado, cinco animadoras denunciaron haber sido sometidas a vejaciones por parte de directivos del Washington Redskins durante un viaje a Costa Rica en 2013 y ni el club ni se propietario se pronunciaron al respecto.
Adem¨¢s de por los esc¨¢ndalos sexuales, el equipo siempre ha estado rodeado de pol¨¦mica por su nombre. Redsking (pieles rojas) hace referencia a los americanos nativos y es un t¨ªtulo que muchos consideran racista, pero que Snyder siempre ha defendido. Ya en 2013 advirti¨® que ¡°nunca¡± cambiar¨ªa su nombre y anim¨® desafiante a ¡°ponerlo en may¨²sculas¡±.
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