Mejor escondidos
La sinton¨ªa b¨¢sica de esta campa?a electoral es igual que una canci¨®n de Chenoa y Bisbal
Lo bueno de hacerse mayor es que ya viviste otra campa?a electoral protagonizada por Su¨¢rez Illana 15 a?os atr¨¢s y no te cogen desprevenido sus declaraciones absurdas. Esta es una ventaja de la que no disfruta Pablo Casado, el joven l¨ªder conservador que lo ha fichado como segundo de lista para el partido m¨¢s votado de Espa?a. Su antol¨®gica retah¨ªla contra el aborto arrancaba acusando a los neandertales de infanticidas. ?Alguien va a pedir perd¨®n a los neandertales o se van a aprovechar de que no tienen ni sindicato ni partido que los represente? Un momento, puede que est¨¦n muy bien representados en todos ellos. Sea como sea, urge reparaci¨®n. Para reafirmarse, Su¨¢rez Illana invoc¨® el ejemplo de Nueva York, que seg¨²n ¨¦l ha aprobado una ley del aborto que asesina a ni?os ya nacidos. Lo grave no es que lo dijera, es que para rectificar adujo que hab¨ªa tenido que informarse en varios despachos de aquella ciudad. Oh, vamos, seguro que existen formas menos alambicadas de disculparse. Llamas a un despacho y preguntas, ?es verdad que all¨ª abort¨¢is ni?os ya nacidos? Te cuelgan seguro. Le bastar¨ªa haber dicho que se hab¨ªa equivocado de Estado, que en Nueva York no hay pena de muerte, pero s¨ª la hay en Texas, Kansas, Colorado o Florida, donde se practica esa forma de aborto sobre los ya nacidos cuando se comportan con extrema gravedad. Tampoco los paridos tras gestaci¨®n que mueren ahogados en el Mediterr¨¢neo a diario merecen un cambio legislativo, porque su miseria, al parecer, es accidental.
Pese a todo, la enorme simpat¨ªa que despierta Su¨¢rez Illana en todos los espa?oles no va a terminar por estas salidas de tono. Es apuesto, es elegante y es hijo de su padre. Lo queremos y lo vamos a seguir queriendo, por m¨¢s que se empe?e ¨¦l en hacernos dudar. Los que ya tenemos una edad conoc¨ªamos que de tanto en tanto se le cruza el cable verde con el cable rojo. Y todos sabemos que cuando esos cables se te cruzan en el cerebro puedes acabar diciendo cualquier cosa. Queda disculpado, pues, sobre todo porque seguramente jam¨¢s se ha parado a analizar en profundidad lo que significa la ley del aborto. Para empezar, no es en los pa¨ªses con leyes m¨¢s restrictivas y prohibicionistas donde se disminuyen los abortos, m¨¢s bien al contrario. Pero para entender los seis o siete problemas irresolubles que padece el ser humano, lo primero es estudiarlos a fondo y con seriedad. Entre medias se cuela un eterno paternalismo sobre las mujeres, por el cual est¨¢ permitido legislar sobre su vida ¨ªntima hasta extremos insultantes de tutela, mientras los hombres disfrutan de un margen de libre albedr¨ªo mayor. Ya puestos, ?el desperdicio constante de espermatozoides no merecer¨ªa una ley de restricci¨®n para eyaculadores irresponsables?
La sinton¨ªa b¨¢sica de esta campa?a electoral que a¨²n no ha empezado es la de aquella canci¨®n popularizada por Chenoa & Bisbal titulada Escondidos cuyo estribillo dice: ¡°Escondidos, solos tu y yo?/ atrapados sin poder salir del interior?/ de tu interior?/ mientras que hacemos el amor. / Clandestinamente, intercambiamos el calor?/ indiscutiblemente, terminamos viendo el sol¡±. Si observan con atenci¨®n, los candidatos asoman, nos muestran su interior disfuncional y lo esconden otro ratillo. A eso se le llama intercambiar calor. Tambi¨¦n se le conoce como ducha escocesa. Agua caliente y luego fr¨ªa. Te abrasan, te congelan. Podr¨ªamos discutir, eso s¨ª, que al final vayamos a terminar viendo el sol. Algunos lo dudan.
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