Las horas m¨¢s oscuras de Nadiuska, el mito er¨®tico de los setenta
Problemas psiqui¨¢tricos han llevado a la actriz a permanecer recluida en un centro. Los m¨¦dicos aseguran que no pueden dar informaci¨®n ya que se lo impide la ley de protecci¨®n de datos
La que fuera considerada sex symbol por excelencia de la Transici¨®n espa?ola, protagonista de los primeros desnudos de las revistas er¨®ticas m¨¢s importantes de la ¨¦poca del destape, pasa ahora sus d¨ªas en un centro psiqui¨¢trico de Ciempozuelos, en Madrid. Nadiuska, cuyo verdadero nombre es Roswicha Bertasha, tiene 65 a?os y lleva los ¨²ltimos ¡ªnadie sabe, a ciencia cierta, cu¨¢ntos¡ª internada con las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Coraz¨®n de Jes¨²s.
La actriz y modelo fue diagnosticada de esquizofrenia hace 20 a?os y, desde entonces, su vida ha sido un constante devenir. Cuentan que su estancia en el centro psiqui¨¢trico es tranquila, que est¨¢ calmada pero que apenas recibe visitas de familiares y amigos.
EL PA?S se ha puesto en contacto con el centro y sus m¨¦dicos aseguran que no pueden dar informaci¨®n ya que lo impide la Ley de Protecci¨®n de Datos, pero dicen que, "en el hipot¨¦tico caso de que fuera cierta su estancia", no es beneficioso para la paciente el revuelo medi¨¢tico que se forma a?o tras a?o a las puertas de la cl¨ªnica. ¡°Este es un centro abierto. Los pacientes tienen salidas a la calle y ver a la prensa apostada en la puerta del centro les puede alterar¡±, se?alan desde la direcci¨®n.
De madre polaca y padre ruso, la actriz y modelo que de peque?a estudi¨® ballet cl¨¢sico lleg¨® a Espa?a en 1971, con solo 19 a?os. Fue Dami¨¢n Rabal, hermano del actor Paco Rabal y uno de los representantes m¨¢s influyentes de la ¨¦poca, quien supo ver que su belleza ex¨®tica y su mirada felina le abrir¨ªan todas las puertas de una Espa?a que comenzaba a aceptar el erotismo y el destape. En 1972 debut¨® como actriz en la comedia Soltero y padre en la vida de Javier Aguirre y, tras participar en dramas o en aventuras de serie B, en 1975 protagoniz¨® uno de sus primeros t¨ªtulos er¨®ticos: Zorrita Mart¨ªnez, de Vicente Escriv¨¢. A ellos le siguieron muchos otros en los que comparti¨®escenas con grandes actores como Alfredo Landa, Jos¨¦ Sacrist¨¢n o Jos¨¦ Luis L¨®pez V¨¢zquez.
Su desnudo para la revista Fotogramas en 1976 fue censurado y retirado de los quioscos, pero no impidi¨® que Nadiuska mostrara su cuerpo desnudo en otras publicaciones como Playboy o Intervi¨², donde protagoniz¨® varias portadas, la ¨²ltima en 1997. Se la lleg¨® a catalogar como la nueva Brigitte Bardot y fue una de las int¨¦rpretes m¨¢s taquilleras de la ¨¦poca. Su carrera en el cine internacional se complet¨® al encarnar a la madre de Conan, el b¨¢rbaro, teniendo por hijo a un jovenc¨ªsimo Jorge Sanz (entonces con 12 a?os) y compartiendo cr¨¦ditos con Arnold Schwarzenegger en la cinta de 1982.
En esos a?os, su presencia en las fiestas m¨¢s exclusivas o la anulaci¨®n de su matrimonio de conveniencia ¡ªse cas¨® con un enfermo mental para conseguir la nacionalidad espa?ola¡ª mantuvieron su popularidad intacta, pero su nivel de trabajo en la interpretaci¨®n descendi¨®. Prob¨® suerte como empresaria: abri¨® un restaurante, se dedic¨® a la exportaci¨®n de carne congelada e incluso se recicl¨® como dise?adora de bisuter¨ªa. Negocios que fracasaron paulatinamente y que, sumado a su desaparici¨®n en la gran pantalla ¡ªsu ¨²ltima pel¨ªcula fue junto a Chiquito de la Calzada en Br¨¢cula, Condemor 2¡ª, hicieron que comenzara su declive.
A finales de los a?os noventa, Nadiuska sufri¨® graves problemas econ¨®micos y comenz¨® a tener trastornos ps¨ªquicos. Ingres¨® durante tres a?os en un centro, donde fue diagnosticada de esquizofrenia. Cuando recibi¨® el alta, fue desahuciada de su apartamento. Por entonces era habitual verla vagabundear por las calles de Madrid. ¡°Me alimento de los cubos de basura y ya me he intoxicado dos veces¡±, lleg¨® a contar en varias entrevistas. Su deterioro f¨ªsico ya era m¨¢s que notable.
Atr¨¢s quedaron las curvas infinitas y los intensos ojos verdes que protagonizaban las fantas¨ªas er¨®ticas de gran parte de los espa?oles. Su belleza, que tantos ¨¦xitos y triunfos le hab¨ªa otorgado, se volvi¨® su gran enemiga y Nadiuska se convirti¨® en un juguete roto que dorm¨ªa en los portales de los? cines que un d¨ªa estrenaron sus pel¨ªculas. Ahora, a sus 65 a?os, vive arropada por esta congregaci¨®n religiosa que cuida discretamente a la que un d¨ªa fue la musa del destape.
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