Florencia Kirchner, una enfermedad bajo sospecha

Parte del destino de Argentina se define en Cuba. Y no se trata de esperar alguna decisi¨®n trascendental entre ambos Gobiernos. La encrucijada argentina se llama Florencia Kirchner, tiene 29 a?os y est¨¢ enferma. Desde el 7 de marzo, Florencia est¨¢ ingresada en un centro m¨¦dico de la isla con un cuadro de p¨¦rdida de peso y estr¨¦s y un ¡°linfedema ligero de miembros inferiores¡±, una patolog¨ªa que refiere a ¡°una acumulaci¨®n de l¨ªquido en los tejidos blandos¡±. Una suma de dolencias que impide a Florencia Kirchner volver a Argentina, donde la justicia la reclama en dos causas por presunto enriquecimiento il¨ªcito.

El apellido de Florencia es la clave: sus padres son los expresidentes argentinos N¨¦stor Kirchner y Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. Y del estado de salud de la joven depende que su madre decida si se presenta o no como candidata en las elecciones presidenciales del 27 de octubre pr¨®ximo.

Florencia Kirchner era apenas una adolescente cuando N¨¦stor Kirchner muri¨® de repente el 27 de octubre de 2010, v¨ªctima de un infarto. Ella y su hermano mayor, M¨¢ximo, heredaron entonces la fortuna y los negocios de su padre. Esa herencia ha sido maldita para Florencia. Sin pedirlo, pas¨® a formar parte del directorio de dos empresas familiares, Hotesur y Los Sauces, hoy investigadas como pantallas de una presunta asociaci¨®n il¨ªcita para lavar el dinero de sobornos millonarios. Dos jueces quieren que Florencia est¨¦ en Buenos Aires para declarar en esas causas, que ya est¨¢n listas para el juicio oral y p¨²blico.

La salud de Florencia Kirchner se ha politizado, sin duda contra la voluntad de la paciente. La hija de N¨¦stor y Cristina siempre ha preferido mantener un perfil bajo. Est¨¢ casada con Camilo Vaca Narvaja, hijo de uno de los fundadores del grupo guerrillero Montoneros, y tiene una hija de tres a?os. Pero es raro que aparezca en p¨²blico, conceda entrevistas o emita alguna opini¨®n en la prensa. Florencia ha dedicado su vida al cine. Estudi¨® en Nueva York y ya ha dirigido dos largometrajes. Su viaje a Cuba, justamente, fue para participar en un festival en La Habana. Pese a su origen, decidi¨® no dedicarse a la pol¨ªtica, y por ello su situaci¨®n judicial es hoy m¨¢s endeble que la de su madre y la de su hermano. La primera es senadora y el segundo es diputado. Ambos tienen, por lo tanto, fueros parlamentarios que, si bien no impiden que la justicia los investigue, los protegen de la c¨¢rcel. Florencia, sin beneficio alguno, es el eslab¨®n d¨¦bil de la familia. Por eso su hospitalizaci¨®n ha generado tantas opiniones.

Un pa¨ªs dividido

La mitad de Argentina cree que el ingreso de Florencia en Cuba es una estrategia del kirchnerismo para salvarla de la justicia, forzando un exilio en un pa¨ªs que no tiene acuerdo de extradici¨®n con Argentina. La otra mitad considera, en cambio, que Florencia es v¨ªctima de la misma persecuci¨®n pol¨ªtica que, dice, padece su madre, hoy procesada en 11 causas por presunta corrupci¨®n. Cristina Kirchner denunci¨® semanas atr¨¢s que la enfermedad que ¡°devast¨®¡± el cuerpo de su hija, era producto del acoso de los jueces. En un v¨ªdeo que grab¨® con voz en off y fotos de su hija, pidi¨® que la dejen en paz. ¡°Les pido a los que nos odian, o que nos ven como enemigos, que por favor se metan conmigo, pero no con ella, no m¨¢s con ella, por favor¡±, dijo.

Por ahora, los jueces han permitido que Florencia siga en Cuba, mientras esperan que las pruebas presentadas por los m¨¦dicos de La Habana justifiquen la prohibici¨®n de viajar en avi¨®n que han recomendado los facultativos. Desde la isla incluso han pedido a Buenos Aires que para cualquier movimiento judicial esperen el alta definitiva de la paciente, sin fecha prevista. El Gobierno de Mauricio Macri ha propagado la idea de que la aventura cubana forma parte de una estrategia de evasi¨®n. ¡°Si ella est¨¢ tranquila y no hizo nada il¨ªcito, est¨¢n todas las garant¨ªas necesarias en el proceso judicial para que se pueda presentar. Politizarlo, irse a otro pa¨ªs y no volver, genera un poco m¨¢s de sospechas¡±, dijo Marcos Pe?a, jefe de ministros de Macri.

El desenlace de esta novela latina tiene en vilo a la pol¨ªtica argentina, porque de ¨¦l depende la decisi¨®n electoral de Cristina Kirchner. La expresidenta tiene tiempo hasta junio para pronunciarse sobre si disputa o no la presidencia a Macri, una carrera en la que ahora es favorita en las encuestas. Es por eso que la salud de Florencia est¨¢ en los pensamientos de Cristina, pero tambi¨¦n en la agenda de los jefes de campa?a de la Casa Rosada.