La sentencia no est¨¢ escrita
Seg¨²n la radiotelevisi¨®n de la Generalitat, el Supremo emitir¨ªa condenas de rebeli¨®n a mansalva sin esperar a las fases que han comenzado esta semana
?Est¨¢ escrita la sentencia? Protagonistas y partidarios del proc¨¦s dicen que est¨¢ redactada ya antes de empezar la vista.
As¨ª se propaga en la radiotelevisi¨®n de la Generalitat. Intenta, es obvio, deslegitimar al tribunal. Este no esperar¨ªa a culminar las decisivas fases que empezaron este lunes, con la documental, para sentenciar. Emitir¨ªa condenas de rebeli¨®n a mansalva.
No prev¨¦n siquiera que la Fiscal¨ªa pueda modificar sus peticiones provisionales. Igual yerran. La vista ha perfilado ya detalles clave: no ha surgido evidencia de que el exconseller Joaquim Forn diese ¨®rdenes concretas a los mossos de violar la legalidad; las pruebas sobre malversaci¨®n apuntar¨ªan seguramente a dos departamentos; Jordi Cuixart no tuvo papel en los hechos de Badalona, reci¨¦n sobrese¨ªdos en la Audiencia de Barcelona.
Los sabiondos har¨ªan bien en leer una acertada declaraci¨®n: ¡°Todav¨ªa no sabemos dos cosas muy relevantes de la sentencia: el contenido y cu¨¢ndo saldr¨¢¡±. Es nada menos que ?de Carles Puigdemont! (Ara, 19 de mayo).
De lo escuchado hasta ahora en las Salesas podr¨ªan estilizarse al menos cuatro hechos relevantes.
Primero, muchos testigos exageraron los da?os recibidos y minimizaron los producidos por su ¡°parte¡±: fuesen manifestantes, mossos, polic¨ªas o guardias civiles. Eso no desacredita del todo sus deposiciones, ni su parte de verdad, salvo si mintieron flagrantemente. Veremos ma?ana la contraposici¨®n de v¨ªdeos.
Segundo, ha sorprendido a observadores que conoc¨ªan el proc¨¦s de segunda mano la afluencia de testigos de las defensas de alta calificaci¨®n profesional (ingenieros, directivos de empresa...), gentes que se personaron en los colegios el fin de semana, o en la madrugada del 1-O, a hacer m¨¢s o menos de boy-scout. Atentos a la digesti¨®n que de este hecho hacen los magistrados: si con ello ven m¨¢s grave lo sucedido o m¨¢s atenuado.
Tercero, este es un juicio a unos dirigentes y no una comisi¨®n parlamentaria sobre la conducta de los distintos cuerpos. A la causa le interesan los hechos concretos de violencia (aunque no generalizados) de los ciudadanos seguidores de aquellos. Exhibir¨¢n distinto peso seg¨²n qui¨¦n los inici¨®, si ellos o los agentes.
Y cuarto, como sus declaraciones expresaron contradicciones insalvables (y no salvadas despu¨¦s), se espera con inter¨¦s la decisi¨®n sobre la petici¨®n de careo entre el coronel Diego P¨¦rez de Cobos y el comisario Ferran L¨®pez. Acreditar¨ªa m¨¢s claramente el rol de los mossos y su papel ante el Govern.
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