Salvar Madrid Central

Pensar que se puede mejorar el tr¨¢fico en Madrid y reducir, a la vez, la contaminaci¨®n permitiendo que los coches particulares circulen sin restricciones por el centro es una contradicci¨®n en los t¨¦rminos. El problema reside en que, seg¨²n numerosas declaraciones realizadas durante la campa?a electoral, se trata de una de las prioridades del nuevo alcalde la ciudad, el popular Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida. Revertir Madrid Central, el ¨¢rea de tr¨¢fico restringido que el anterior Consistorio de Manuela Carmena decret¨® en una parte significativa del casco urbano, ser¨ªa sin embargo un tremendo error. La capital se convertir¨ªa en la primera ciudad europea en anular una medida de este tipo; Espa?a puede enfrentarse a multas de la Comisi¨®n Europea ¡ªBruselas fren¨® un proceso sancionador porque consideraba que Madrid Central era una medida eficaz¡ª, y, lo que es m¨¢s grave, tendr¨¢ efectos nocivos sobre la salud de los ciudadanos.

Es demasiado pronto para conocer los efectos que Madrid Central, instaurado en diciembre, puede haber tenido sobre el comercio y la restauraci¨®n. Sin embargo, es un hecho que ha descendido la contaminaci¨®n: el mes pasado, 14 de las 24 estaciones de la capital presentaron los niveles m¨¢s bajos de poluci¨®n de la ¨²ltima d¨¦cada. La restricci¨®n cumple sus objetivos. Adem¨¢s, se enmarca dentro de un movimiento que afecta a muchas grandes ciudades europeas: 280 han tomado medidas similares. Oslo, por ejemplo, anunci¨® en mayo la legislaci¨®n m¨¢s radical de Europa contra el tr¨¢fico privado.

Pese a que Mart¨ªnez-Almeida se pas¨® la campa?a despotricando contra Madrid Central, todav¨ªa no est¨¢ claro cu¨¢l es el futuro de la zona de bajas emisiones porque los tres partidos que apoyan la nueva mayor¨ªa en la capital no piensan lo mismo y, lo que resulta todav¨ªa m¨¢s confuso, el pacto PP-Ciudadanos dice una cosa (¡°Crear nuevas ¨¢reas de prioridad residencial aportando soluciones alternativas¡±) y el acuerdo PP-Vox, otra (¡°Acabaremos con la pol¨ªtica de prohibiciones y restricciones de los ¨²ltimos 4 a?os de Madrid Central¡±). Su objetivo a corto plazo ser¨¢ no poner multas a partir del 1 de julio, lo que significa mantener temporalmente la zona, pero a la vez dejarla sin efecto.

Anular una medida solo porque la puso en marcha un Ayuntamiento de diferente signo ideol¨®gico representa una forma miope de entender la pol¨ªtica, en este caso, adem¨¢s, con efectos sobre la salud y en contra del signo de los tiempos. Madrid Central va mucho m¨¢s all¨¢ de la capital porque apuesta por construir una sociedad que se aleje de los combustibles f¨®siles y que incentive nuevas f¨®rmulas de movilidad urbana dentro de la lucha contra el cambio clim¨¢tico, objetivos que comparten millones de ciudadanos europeos.