A las puertas de Europa
Es necesario apostar por una estrategia que aborde la migraci¨®n como un fen¨®meno estructural y no coyuntural
Contin¨²a la agon¨ªa de las 107 personas a bordo del barco Open Arms.Cuando todo apuntaba a su desembarco en el puerto de Algeciras, despu¨¦s de la negativa de Matteo Salvini a permitirles entrar en territorio italiano, la situaci¨®n es ya tan insostenible que aplazar unos d¨ªas m¨¢s el desembarco puede llevar a un drama humanitario del que todos seremos responsables por omisi¨®n. Los gobiernos europeos por su tard¨ªa e ineficaz reacci¨®n; la ciudadan¨ªa por mirar hacia otro lado. Y todo ello por no mencionar a aquellos que desde posiciones institucionales acusan a las ONG de fomentar el tr¨¢fico de personas.
La cuesti¨®n de fondo es mucho m¨¢s grave, ya que no existe la determinaci¨®n firme por parte de los Estados miembros [de la UE] de apostar por una estrategia que aborde la migraci¨®n como un fen¨®meno estructural y no coyuntural, y para ello es necesario ser consciente de su inevitabilidad en el contexto de globalizaci¨®n en el que vivimos y dejar de intentar arreglar situaciones extremas en funci¨®n de acuerdos adoptados deprisa y corriendo que a lo ¨²nico que llevan es a la utilizaci¨®n partidaria de una cuesti¨®n tan sensible como esta.
Quiz¨¢s el caso italiano, con Salvini, sea el esperp¨¦ntico modelo en el que observar la deriva que han tomado las pol¨ªticas europeas favoreciendo la criminalizaci¨®n de la ayuda, hasta el punto de acusar a las organizaciones del tercer sector de ayudar al enriquecimiento de las mafias, algo que Naomi Klein ha denominado la teor¨ªa del shock, que no es otra cosa que la difusi¨®n de rumores falsos que preparan a la ciudadan¨ªa para la progresiva implantaci¨®n de medidas restrictivas.
En todo caso, para evitar este uso partidario, es fundamental que los l¨ªderes europeos, que tienen la competencia en la materia, pongan la suficiente voluntad pol¨ªtica encima de la mesa para dise?ar una pol¨ªtica migratoria com¨²n que sea capaz de abordar esta cuesti¨®n de forma estructural. La externalizaci¨®n, la criminalizaci¨®n y la militarizaci¨®n de las fronteras es obvio que no solo no acaban con la migraci¨®n, sino que adem¨¢s la convierten en una cuesti¨®n pol¨ªtica que se utiliza con fines utilitarios. Es fundamental, por tanto, trabajar desde una perspectiva de derechos humanos con una aproximaci¨®n integral de la cuesti¨®n migratoria desde origen, tr¨¢nsito y destino de las personas en movimiento, evitando la adopci¨®n de medidas coyunturales que, en muchas ocasiones, no llevan si no a contradicciones como las del Gobierno espa?ol. Entre otras cuestiones, es imprescindible coordinar pol¨ªticas comunes en el marco europeo con el objetivo de obtener una pol¨ªtica coherente que, en lugar de generar problemas los solucione. Y todo ello teniendo siempre muy presentes las experiencias y pr¨¢cticas del pasado, para no adoptar medidas que no han dado los resultados esperados en la gesti¨®n de unos flujos ordenados, pero en las que nuestros gobiernos reinciden una y otra vez. Y quiz¨¢s el ejemplo m¨¢s ilustrativo sea Libia.
Ruth Ferrero-Turri¨®n es profesora de Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad Complutense de Madrid. Art¨ªculo elaborado por Agenda P¨²blica para EL PA?S
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