Quir¨®n Fashion Week
Alguien subray¨® que Letizia llevara precisamente esa prenda de manga larga en agosto para saludar al rey en su convalecencia. ¡°Oye, pues a lo mejor la us¨® para poner a prueba los 'bypass¡±
La estancia del Rey em¨¦rito Juan Carlos I en la cl¨ªnica Quir¨®n de Pozuelo ha convertido la entrada del centro en una inesperada pasarela de moda, debido al desfile de visitas de sus familiares. Por lo que sea no pod¨ªan presentarse todos de sopet¨®n, son muchos y adem¨¢s el ingreso del monarca fue para implantarle tres bypass. Al llegar de forma coreogr¨¢fica se cre¨® esa atm¨®sfera de fashion week tan terap¨¦utica. Cada atuendo, tanto de reyes como de princesas, reinas (em¨¦ritas y futuras), infantas y exduquesas, todo sirvi¨® para entender c¨®mo se visten y sienten los reales en estas visitas cortas de hospital.
El primer pase de esta semana de la moda fue el de la em¨¦rita con su hijo, el Rey, ambos con trajes chaqueta realmente sosos, aunque la reina Sof¨ªa aplic¨® peque?as dosis de amarillo a su conjunto. Como no dejaba de ser una visita hiperp¨²blica a un hospital privado al d¨ªa siguiente aumentaron la raci¨®n de estilo. Sof¨ªa se cubri¨® de azul mediterr¨¢neo, un ligero recuerdo de ese palacio de Marivent que ya nadie ocupa excepto ella y su hermana, Irene. Letizia hizo su aparici¨®n, semiconjuntada con su marido, ambos con mocasines azul marino y ella, no ¨¦l, con la m¨ªtica blusa de lunares que se convirti¨® en fetiche debido al rifirrafe de reinas en Palma de Mallorca. Alguien subray¨® que Letizia llevara precisamente esa prenda de manga larga en agosto para saludar al rey en su convalecencia. ¡°Oye, pues a lo mejor la us¨® para poner a prueba los bypass¡±, suger¨ª, recordando la cara de desagrado del exjefe de Estado cuando Letizia impidi¨® en p¨²blico la maniobra de la em¨¦rita para hacerse una foto con sus niet¨ªsimas. Felizmente los bypass resistieron porque Letizia y el Rey regresaron a la Quir¨®n Fashion Week incorporando a sus hijas. Leonor aprovech¨® para estrenar un maravilloso vestido de Mango con aires ¨¦tnicos y mangas amplias con las que supo jugar como una adiestrada modelo, marcando el estilo heredado de su madre. Seguramente alguien en Zarzuela recet¨® que esta era la ocasi¨®n para propiciar el cambio hacia la madurez estil¨ªstica de la joven princesa.
Y entonces lleg¨® la traca final, el desfile de desfiles: el protagonizado por la exduquesa de Palma, Cristina de Borb¨®n, con tres de sus hijos, vestidos como si fueran los representantes veraniegos de una rep¨²blica protestante, proponiendo una inyecci¨®n de minimalismo con p¨ªldoras de pijismo calvinista. Algo muy pr¨®ximo a la filosof¨ªa de la marca sueca COS. ¡°Pareciera como si la desgracia del marido en la c¨¢rcel estuviese encajada¡±, me susurraron en el programa matinal de TVE, al tiempo que comentaban que la esposa de Urdangarin evit¨® hablar con la prensa. Se limit¨® a un homeop¨¢tico ¡°muy bien, gracias¡±, con ese mismo tono que emple¨® durante el juicio del caso N¨®os. En cualquier caso, lo interesante era la unificada imagen de grupo. El look es correct¨ªsimo y, aunque no tributan aqu¨ª, todos llevan pulsera con la bandera de Espa?a. Ojal¨¢ supi¨¦semos vestir as¨ª: mezclando con naturalidad el buen algod¨®n de esos colores neutros de campi?a limpia y cuentas saneadas.
Otras familias reales han tenido sus desfiles y diferencias. Meghan Markle y Kate Middleton ya no ocultan el abismo que las separa. Meghan y su esposo Enrique volaron a la Costa Azul en el avi¨®n privado de Elton John y como presumen de ser superambientalistas les llovieron cr¨ªticas por viajar emitiendo CO2 de esa manera privilegiada. Elton intent¨® defenderlos aduciendo que su avi¨®n emite much¨ªsimo menos carbono que cualquier otro pero a la gente le molest¨® ese decir una cosa y hacer la contraria.
Tres d¨ªas despu¨¦s, para viajar a Escocia y visitar a otra reina, Isabel II, Kate, su marido, hijos y ni?era espa?ola, tomaron un vuelo lowcost de 75 euros el billete. La prensa los fotografi¨® en la pista arrastrando equipaje y churumbeles como cualquier otro turista. Fue un golazo, de Kate y de su equipo, que trabajan con creatividad sobretodo en el apartado de ¡°fastidiar a Meghan todo lo que podamos¡±. Meghan podr¨ªa llegar a saturarse de su papel de duquesa rica que tiene que actuar como pobre para la opini¨®n publica. Podr¨ªa sucederle lo mismo que a Grace Kelly en M¨®naco que, harta, se deprimi¨®. Meghan que no es tan buena actriz como Grace; cuando se aburra, lo ¨²ltimo en lo que pensar¨¢ ser¨¢ en las emisiones de carbono. Ojal¨¢ aproveche la siguiente Quir¨®n Fashion Week para conseguir un buen bypass.
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