Una hora m¨¢s
El tiempo no existe. El tiempo son solo las cosas que nos pasan
Dijo un d¨ªa un panadero: Dios cre¨® el tiempo, pero dej¨® que nosotros fabric¨¢ramos las horas. Y el panadero durante una hora hizo un pan gallego, crujiente y perfumado en su horno de le?a. Dijo un d¨ªa una maestra: Dios cre¨® el tiempo, pero dej¨® que durante una hora de clase ella abriera la mente de sus alumnos y les trazara en la pizarra la ruta hacia la isla del tesoro. Dios cre¨® el tiempo, pero un cirujano solo necesit¨® una hora para extirpar un c¨¢ncer al paciente y salvarle la vida. Dios cre¨® el tiempo, pero el artista aprovech¨® una hora de inspiraci¨®n para culminar una obra de arte. En una hora pint¨® Leonardo da Vinci la inquietante y ambigua sonrisa de la Gioconda y Vel¨¢zquez inici¨® el impresionismo desde el pa?uelo de la infanta Margarita. Dios cre¨® el tiempo, dijo el fontanero, quien lleg¨® a casa y en una hora arregl¨® el grifo, el calentador y la cisterna. Dios cre¨® el tiempo, dijo el poeta, pero quiso que escribiera que no hab¨ªa que afligirse por aquellas horas felices de esplendor en la hierba porque su belleza permanece siempre en el recuerdo. Dios cre¨® el tiempo, pero Otis Redding sentado en el muelle de la bah¨ªa dej¨® que transcurrieran las horas viendo entrar y salir los barcos. Dios cre¨® el tiempo, pero Hamlet en solo una hora pudo decidir entre ser o no ser. Dios cre¨® el tiempo, pero Gary Cooper esper¨® esa hora fat¨ªdica en el reloj de la estaci¨®n para enfrentarse solo ante el peligro. En algunos relojes medievales de sol se halla grabada esta inscripci¨®n: todas las horas hieren, la ¨²ltima mata. Ciertamente la ¨²ltima hora nos va a matar, pero hoy habr¨¢ una hora m¨¢s en todos los relojes. Einstein ha demostrado que la eternidad est¨¢ incluida en una sola hora, esa que a uno lo puede hacer inmortal. El tiempo no existe. El tiempo son solo las cosas que nos pasan, por eso pasa tan deprisa cuando a uno no le pasa nada.
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