Charlene, desatada en un bar de M¨®naco celebrando la victoria de Sud¨¢frica

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A tenor de la naturalidad con la que Charlene de M¨®naco se muestra con sus amigos y fuera de los actos oficiales del Principado, hay dos princesas: una la que se muestra hier¨¢tica y seria junto a su marido, el pr¨ªncipe Alberto, y otra la que bromea, baila y se r¨ªe cuando est¨¢ fuera de palacio y en compa?¨ªa de sus amigos. A tenor de un v¨ªdeo que circula por redes sociales, la exnadadora Sudafricana lo pas¨® en grande en un bar de M¨®naco el pasado s¨¢bado viendo la final del Mundial de Rugby que gan¨® su pa¨ªs natal frente a la selecci¨®n de Inglaterra.

En las im¨¢genes se puede ver a Charlene de M¨®naco ataviada, con la camiseta de la selecci¨®n Sudafricana y con el pelo recogido, acompa?ada por su hermano Gareth Wittstock y compartiendo su alegr¨ªa por la victoria con la concurrida clientela del Slammers Bar de M¨®naco, un establecimiento situado en el n¨²mero 6 de la rue Suffren Reymond, habituado a organizar conciertos en directo o transmitir eventos deportivos en sus televisiones para animar a sus clientes. All¨ª se plant¨® Charlene de M¨®naco con su hermano y amigos para ver el partido de rugby mientras su esposo lo segu¨ªa en directo desde la tribuna del mismo estadio en el que se celebraba en Yokohama, una peque?a localidad pr¨®xima a Tokio, Jap¨®n.?

La princesa, que no ha abandonado el gusto por los deportes despu¨¦s de contraer matrimonio, no trat¨® de pasar desapercibida sino que fue presentada y jaleada por los asistentes mientras ella respond¨ªa emocionada y lanzando besos a las personas que se encontraban en el bar. El pr¨ªncipe Alberto acudi¨® solo a la entronizaci¨®n del emperador Naruhito de Jap¨®n celebrada el pasado 23 de octubre con la presencia de autoridades y representantes de todas las casas reales europeas. Pero Charlene s¨ª estuvo de manera oficiosa en el pa¨ªs del sol naciente con motivo de la Copa Mundial de Rugby donde asisti¨®, junto a los dos hijos mellizos de la pareja y su marido, a uno de los partidos que disput¨® el equipo sudafricano. Despu¨¦s debi¨® regresar a M¨®naco mientras su esposo se qued¨® en Jap¨®n y asisti¨® a la final que gan¨® Sud¨¢frica, el pa¨ªs en el que naci¨® su esposa.?

La ausencia de Charlene de M¨®naco en la entronizaci¨®n de Naruhito volvi¨® a generar especulaciones sobre el estilo de matrimonio que mantiene la pareja monegasca. La princesa se prodiga poco en los actos oficiales de M¨®naco y en los ¨²ltimos meses se ha comentado mucho que ha estado pr¨¢cticamente desaparecida de la vida del Principado. La ¨²ltima imagen conocida de la princesa Charlene se remonta al d¨ªa 11 de septiembre, cuando acompa?¨® a sus hijos, los mellizos Jaime y Gabriela, de cuatro a?os, a su primer d¨ªa en su nuevo colegio, un centro p¨²blico pr¨®ximo a palacio. Justo cinco d¨ªas antes hab¨ªan aparecido todos juntos en un p¨ªcnic que ya se ha convertido en tradici¨®n anual, y como suele ser costumbre en este tipo de apariciones, Charlene de M¨®naco se mantuvo seria y distante. Durante el mes de agosto no se les capt¨® juntos en ninguna imagen y en julio solo hicieron acto de presencia como pareja en la gala de la Cruz Roja. En junio participaron en dos actos, por un festival de televisi¨®n. En mayo, otros dos, por la F¨®rmula Uno. Otro en marzo. Uno, dos actos m¨¢ximo al mes.?Desde ese inicio del curso escolar nada se ha vuelto a saber de la princesa Charlene de forma oficial.

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