Felicity Huffman quiere redimirse ayudando a reclusas y v¨ªctimas de tr¨¢fico sexual
La actriz de 'Mujeres Desesperadas', que pas¨® 11 d¨ªas en prisi¨®n por una trama de sobornos universitarios, trabajar¨¢ con mujeres que est¨¦n en la c¨¢rcel y una vez fuera de ella
Solo 11 d¨ªas han sido suficientes para que Felicity Huffman conozca lo dura que puede resultar una prisi¨®n. Ese es el tiempo que la actriz conocida por su papel de Lynette Scavo en la serie de ABC Mujeres Desesperadas ha pasado en la c¨¢rcel. En realidad fue condenada a 14 d¨ªas entre rejas, pero solo tuvo que cumplir 11. Huffman se declar¨® culpable en una trama de sobornos universitarios en la que se vio salpicada: trat¨® de conseguir que su hija entrara en una prestigiosa escuela mediante el pago de 15.000 d¨®lares para manipular las notas de la joven en el examen de acceso.
Adem¨¢s de esas dos semanas en prisi¨®n, la actriz y esposa del tambi¨¦n actor William H. Macy tiene que pagar una multa de 30.000 d¨®lares (27.000 euros), pasar un a?o en libertad condicional y prestar 250 horas de servicios a la comunidad. Y precisamente esas horas quiere dedicarlas a la atenci¨®n de mujeres presas. Huffman se ha quedado impresionada por las condiciones que viven las reclusas y quiere dedicarles tiempo y atenci¨®n.?
Seg¨²n explica en exclusiva?el medio estadounidense?Page Six, Huffman quiere implicarse con ellas tras conocer en su propia piel las "duras" condiciones de la c¨¢rcel federal de Dublin (California). "Su experiencia es que estas mujeres se quedan atr¨¢s", ha asegurado una fuente cercana a la familia. "Est¨¢n abandonadas. No hay ning¨²n apoyo para ellas ni dentro de la instituci¨®n ni cuando salen. Eso le ha roto el coraz¨®n", ha afirmado dicha fuente.?
El medio tambi¨¦n ha querido consultar con los responsables de la Oficina Federal de Prisiones. Ellos explican: "Aunque la filosof¨ªa de la oficina es que la preparaci¨®n para la libertad comienza desde el primer d¨ªa de encarcelamiento, en realidad se intensifica durante los 18 meses previos a obtener la libertad". Entre las actividades en las que se centra esta preparaci¨®n est¨¢n "la redacci¨®n de curr¨ªculos y la b¨²squeda y retenci¨®n de empleo". Antes de alcanzar la libertad por completo, algunos presos pasan a centros de rehabilitaci¨®n "para ayudarlos a adaptarse a la vida en comunidad y a encontrar un trabajo", explican.?
La experiencia de la int¨¦rprete en la prisi¨®n de Dublin ¡ªcon m¨¢s de mil presas en el pabell¨®n principal y otras 175 en el sat¨¦lite en el que ha estado Huffman¡ª ha sido "dura", seg¨²n informa su entorno, porque por el momento ella no ha dado entrevistas ni se ha pronunciado sobre el asunto. La c¨¢rcel est¨¢ considerada una de las mejores de EE UU (para la revista Forbes, es la s¨¦ptima m¨¢s "agradable" del pa¨ªs) y en ella se permiten las clases de yoga y zumba. Las presas tienen que cumplir tareas de distinto calibre entre cinco y seis horas al d¨ªa.
Huffman ha empezado ya su programa de servicios a la comunidad y ha decidido implicarse con The Teen Project, una asociaci¨®n con la que lleva colaborando un par de a?os que ayuda a mujeres sin hogar y que han sido v¨ªctimas de trata. En esa colaboraci¨®n la acompa?a su hija Georgia. Seg¨²n las fuentes del portal estadounidense, Huffman es una voluntaria m¨¢s, sin ning¨²n trato de favor espec¨ªfico. "He creado fuertes v¨ªnculos con algunas de las j¨®venes", explican. "La organizaci¨®n se centra en las segundas oportunidades, por lo que sus miembros han dado un gran apoyo al trabajo de Felicity". Aunque sus horas obligatorias acabar¨¢n a principios de 2020, la intenci¨®n de la actriz es seguir colaborando m¨¢s tiempo con estas fundaciones.
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