El mayor legado de Roxette: un villancico convertido por casualidad en una de las baladas m¨¢s famosas de los noventa
Marie Fredriksson, voz del d¨²o, ha muerto a los 61 a?os. Recordamos la historia de 'It must have been love', su mayor ¨¦xito y una canci¨®n que sigue sonando en las emisoras
Marie Fredriksson (?ssj?, Suecia, 1958-2019) ha muerto a los 61 a?os, v¨ªctima de un tumor cerebral contra el que luchaba desde 2002. El nombre de Fredriksson dir¨¢ poco para el oyente casual, pero si decimos que era la voz de Roxette, cualquiera podr¨¢ tararear al instante alg¨²n tema de estos suecos que se convirtieron en la formaci¨®n m¨¢s exitosa de la historia de su pa¨ªs por detr¨¢s de ABBA y por delante de Ace of Base. Sus ventas se estiman en 75 millones de ¨¢lbumes.
La canci¨®n fue un ¨¦xito moderado en Suecia que parec¨ªa destinada a sonar de vez en cuando en las navidades suecas y poco m¨¢s. Hasta que en 1990 los llamaron de una productora cinematogr¨¢fica
Roxette, o sea, el d¨²o compuesto por Per Gessle (voz secundaria y compositor de todos sus ¨¦xitos) y Fredriksson (cuya voz se convirti¨® en una de las m¨¢s famosas a finales de los ochenta y a lo largo de los noventa), eran unos maestros artesanos de la canci¨®n de tres minutos y el estribillo arrollador. De hecho, su recopilatorio de grandes ¨¦xitos publicado en 1993 tiene uno de los mejores t¨ªtulos de la historia del pop: Don¡¯t bore us, get to the chorus (¡°No nos aburras, empieza con el estribillo¡±).
Roxette eran famosos en su Suecia natal, pero la historia de c¨®mo llegaron a reinar en las radios de Estados Unidos es una de esas que podr¨ªa ser el segundo acto de un musical. Un estudiante estadounidense de intercambio en Suecia en 1988 se enamor¨® de The Look, un sencillo que escuchaba insistentemente en la radio de aquel pa¨ªs, se compr¨® un ejemplar del single y se lo llev¨® a su casa en Minneapolis durante las vacaciones de Navidad. Le dio el disco a un amigo pinchadiscos de una cadena local, la KDWB 101.3 FM, y, tras emitirla unas cuantas veces, los oyentes empezaron a llamar preguntando qu¨¦ grupo cantaba aquella canci¨®n tan pegadiza de menos de cuatro minutos que segu¨ªa el ABC de lo que debe ser un ¨¦xito: una melod¨ªa que en su aparente sencillez esconde casi una ecuaci¨®n matem¨¢tica y unas letras que a¨²nan amor, moda, ambig¨¹edad (¡°camina como un hombre, golpea como un mazo¡±, cantan sobre una mujer) y unos cuantos ¡°la, la, la¡± para que se pueda cantar tranquilamente en un karaoke o en un coche.
The Look lleg¨® al n¨²mero uno en Estados Unidos. Fue el primero de cuatro sencillos del d¨²o en conseguirlo, pero probablemente su canci¨®n m¨¢s conocida, y la que atesora m¨¢s reproducciones en Spotify (150 millones) y en YouTube (casi 433 millones), es It must have been love, que form¨® parte de la banda sonora de Pretty woman y ha quedado para la posteridad como una de las baladas m¨¢s populares de los a?os noventa, todav¨ªa ultrapopular en cualquier emisora de radio especialista en la nostalgia.
El segundo v¨ªdeo de 'It must have been love'. Existe uno anterior para la versi¨®n original de la canci¨®n, publicada en Suecia en 1987.
La historia de It must have been love (¡°Debi¨® de ser amor¡±) tambi¨¦n se alarga en el tiempo durante cuatro a?os y tiene un camino de sorpresas inesperadas. La canci¨®n vio la luz por primera vez en 1987 como un villancico. La multinacional EMI pidi¨® al grupo, seg¨²n ellos mismos contaron en el libreto del recopilatorio Don¡¯t bore us, get to the chorus, que compusiesen ¡°una canci¨®n inteligente para la Navidad¡±. El resultado fue, m¨¢s que inteligente, un tanto devastador: el tema habla de alguien a quien han roto el coraz¨®n justo el d¨ªa de Navidad. Comienza con campanillas navide?as y en la letra hay referencias como: ¡°Es un d¨ªa de Navidad duro, prefiero so?ar¡±.
La canci¨®n fue un ¨¦xito moderado en Suecia: parec¨ªa destinada a sonar de vez en cuando en las navidades suecas y poco m¨¢s. Hasta que en 1990, ya tras su primer ¨¦xito con The Look, los llamaron de la productora cinematogr¨¢fica Touchstone, que estaba rodando una comedia rom¨¢ntica con un actor en horas bajas (Richard Gere) y una joven promesa (Julia Roberts) y les preguntaron si quer¨ªan contribuir con una canci¨®n.
La pel¨ªcula se llamaba Pretty woman. Y Marie y Per decidieron rehacer aquella canci¨®n en la que tanto cre¨ªan, despojarla de su contexto navide?o cambiando levemente la letra y eliminando las campanas y dejar una balada perfecta sobre el desamor. Seg¨²n cont¨® el propio Gessle, al director de la cinta (Garry Marshall) le gust¨® tanto que a?adi¨® una escena adicional (esa en la que Julia Roberts se aleja en taxi del hotel tras haberse separado del hombre al que ama) para que la canci¨®n se luciese.
Escena de 'Pretty Woman' donde suena el ¨¦xito de Roxette 'It must have been love'.
La pel¨ªcula se convirti¨® en un ¨¦xito sin precedentes ese a?o. Y la pieza, por supuesto, tambi¨¦n. Se convirti¨® en el segundo sencillo m¨¢s exitoso de 1990 y en el tema que la banda ha tocado en m¨¢s ocasiones. Su ¨¦xito no dur¨® mucho en Estados Unidos, pero siguieron siendo enormemente influyentes en Europa y Australia y tambi¨¦n en Latinoam¨¦rica, especialmente gracias a su ¨¢lbum Baladas en espa?ol, publicado en 1996. En ese recopilatorio tambi¨¦n incluyeron It must have been love, claro, esta vez en castellano y con el t¨ªtulo No s¨¦ si es amor.
Roxette no dejaron de publicar discos, tanto como formaci¨®n como por parte de sus miembros en solitario, y de hacer giras en las que mezclaban sus grandes ¨¦xitos del pasado con otros m¨¢s recientes. Marie Fredriksson deja un legado no solo estil¨ªstico (siempre con el pelo corto, camisas y pantalones, fue una de las grandes valedoras del look andr¨®gino en un g¨¦nero casi siempre copado por mujeres sexis) sino de ejemplo en su lucha contra el c¨¢ncer. Desde 2002, cuando le fue diagnosticado un tumor cerebral del que habl¨® abiertamente tanto en entrevistas como en sus memorias, Listen to my heart, nombrada en honor de otro de sus grandes ¨¦xitos, Listen to your heart. Deja un viudo, Mikael Bolyos, y dos hijos. Y millones de fans que se han quedado sin una de las grandes voces del pop de finales del siglo XX.
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